Que
los fondos para estos edificios procedieron o
procederían de los fondos del Sanatorio de Battle
Creek. (Los fondos debían salir de
un edificio propiedad del Battle Creek College - una
entidad separada del Sanatorio - y de la venta
anticipada de una propiedad en particular del
College).
Que
el Dr. Kellogg había planeado erigir el edificio
o los edificios en cuestión. (El
Dr. Kellogg estaba en Europa mientras el edificio
debía ser construido con los fondos procedentes de
la venta de la propiedad del College y no supo nada
acerca de estos planes sino hasta que regresó de
Europa).
Ellen
White reclamaba para sí la autoridad directa de
Dios en su demanda de que las ganancias del
Sanatorio de Battle Creek destinadas para los
edificios de Chicago se enviaran a la obra en
Australia. Los estatutos del
Sanatorio estaba redactada de tal manera que todos
sus dineros debían ser utilizados dentro de los
límites del estado de Michigan. Dios no le diría a
Ellen que hiciera nada contrario a las leyes del
estado de Michigan. Jesús enseñó el concepto de "dar
al César lo que es del César". Ellen White azora a
Dios haciendo parecer que Él se había olvidado de
las provisiones de los estatutos del Sanatorio.
Además, es razonable pensar que ella conocía las
limitaciones de los estatutos y, a sabiendas, le
pidió a Kellogg que hiciera algo que ella sabía no
era correcto. Por el testimonio del Dr. Charles
Stewart y los registros de la Conferencia General,
sabemos que Ellen White era poseedora de acciones de
la compañía que el Dr. Kellogg había organizado para
administrar sus operaciones del cuidado de la salud.
Hoy día, esta clase de arreglos serían considerada
como un conflicto de intereses.
Que el edificio o los edificios de Chicago había sido construido o habían sido construidos.- Ningún edificio fue construido JAMÁS. Los edificios usados en el extenso ministerio del Dr. Kellogg en Chicago siempre fueron alquilados.
UNA RESPUESTA A UN TESTIMONIO URGENTE
Suyo
atentamente,
JESSE ARTHUR.
------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
[Carta del
juez Arthur a W. C. White]
Pastor W. C. White
Sanatorio, Condado Napa, Calif.
Encuentro
posible en este momento hacerle la largamente prometida
declaración relativa a la acción de la Junta Directiva del
American Medical Missionary College en la primavera y
principios del verano de 1899, esperando la creación de un
gran edificio para la escuela de medicina en la ciudad de
Chicago. Los hechos son los siguientes:
En el
último día de mayo de 1899, el Dr. A. B. Olsen, que en ese
entonces era secretario de la Junta de Fideicomisarios del
American Medical Missionary College, que recibió
instrucciones del Dr. Bayard Holmes, de Chicago, instó a
la Junta acerca de la necesidad de que el Medical College
se convirtiera en miembro de la Asociación Americana de
Escuelas de Medicina para que pudiera recibir una
categoría y una posición segura entre las instituciones de
este país y de otros países.
En seguimiento de este
propósito, el Dr. Olsen fue designado delegado para que asistiera a una reunión de la
asociación, reunión que poco después habría de tener lugar
en la ciudad de Columbus, Ohio, y solicitara
membresía a nombre de nuestro colegio médico. Esto hizo, y
la solicitud fue presentada para que se tomara acción en
la siguiente
reunión regular que tendría lugar en un año a partir de ese momento.
A su regreso, el Dr. Olsen informó que la principal objeción presentada
contra la admisión de la
solicitud de
membresía de nuestra institución médica fue la falta de un edificio adecuado en la ciudad de Chicago. La junta decidió entonces
tomar medidas en seguida
para la construcción
de ese
edificio. Se
nombró un comité de construcción, que consistió de A. B.
Olsen, W. K.
Kellogg, y
yo mismo. El Dr. Olsen fue elegido secretario de ese
comité y yo fui elegido presidente.
El comité
se reunió, e
inmediatamente formuló planes para la compra de un lugar y
la construcción del edificio. Como presidente del comité, recibí
instrucciones
para que
iniciara conversaciones con miras a la venta o la hipoteca
del lugar
No. 28 Treinta y Tres, que la escuela poseía, o de lo contrario
tomar medidas para levantar los fondos ncesarios para comprar el lugar y erigir el
edificio que se consideraba. Al Dr. Olsen se le dijo que
obtuviera los planos apropiados para el edificio de la escuela, lo
cual hizo. El costo del lote y las mejoras habría de ser
más o menos de $100, 000.00 o posiblemente más. El comité
fue a Chicago,
consideró varios lugares, y finalmente se decidió por uno situado en Calle 13, y
se iniciaron negociaciones para comprarlo.
Todo esto
luvo lugar mientras el Dr. J. H. Kellogg estaba ausente de
los Estados Unidos. Estaba en Europa. Después de que nuestros
planos estuvieron lo bastante terminados como para iniciar
la obra, se consideró aconsejable esperar el regreso del
Dr. Kellogg antes de seguir adelante con el proyecto. Por otras personas, me
enteré de que,
después del regreso del Dr. y se le informó de lo que se había hecho, se
desanimó de seguir adelante con el proyecto. Exactamente qué razones tuvo para eso, no
creo que yo las haya sabido nunca.
Confirmando
lo que he dicho, incluyo una copia de dos notas que me
escribió el Dr. Olsen, una fechada
en mayo 30,
1899, y la otra fechada el 25 de junio del mismo año.
También incluyo copia de las minutas de una reunión del comité que tuvo
lugar el 26 de junio del mismo año.
Los planos
para el edificio estuvieron en mi posesión en una ocasión,
pero creo que se los devolví al Dr. Olsen. No tengo dudas de que pueden ser hallados entre
los archivos del Medical College, que ahora está en
posesión del Dr. Stewart.
Si he omitido algo que es
importante que usted lo sepa en relación con este asunto, escríbame y, si es posible, le explicaré la
omisión.
Suyo
atentamente,
JESSE
ARTHUR
-----------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------------
Dr. Stewart: Casi
dos años más tarde, en la reunión de la Conferencia General
que tuvo lugar en Battle Creek en abril de 1901, en la cual
usted estuvo presente, se formularon planes bastante
definidos para obtener de la gente, no $65,000, sino
$100,000 o más, para la construcción de edificios para la
escuela de medicina. En esta ocasión, se recogieron varios
cientos de dólares, y se prometieron varios millares de
dólares.
En el primer intento por
levantar un edificio para la escuela, se entendía claramente
que el dinero habría de venir de la venta del lugar No. 28
Treinta y tres, y que la cantidad a ser desembolsada no
debía exceder $65,000 en total. Fue imposible vender el
lugar por más de $50,000. No se recogió ni un solo dólar, ni
en efectivo ni en promesas, porque en esta ocasión, no se
hizo ningún esfuerzo para obtener los fondos necesarios,
excepto vendiendo la propiedad a que se ha hecho referencia,
lo cual no se logró, así que la cuestión se dejó de lado. En
1901, en la Conferencia General, se trazó un plan, según el
cual se pensó que se podía reunir una gran suma de dinero
para la construcción de los edificios necesarios para la
escuela. Los registros de la reunión que se citan en
relación con esto son amplia evidencia de esto y también del
hecho de que había otros, además del Dr. Kellogg,
interesados en el proyecto. En relación con esto, podría ser
apropiado preguntar si el testimonio en cuestión sería
aplicable a W. C. White, A. G. Daniells, y O. A. Olsen, pues
ellos jugaron un papel prominente en el esfuerzo por recoger
el dinero a que se hace alusión:
[Citado más abajo del]
Boletín de la Conferencia General, abril 15, 1901, p. 289:
Quinta reunión de Int. Med..Miss., & Benev. Ass'n.
________________________________________________________________________________________________________________________
Dr. Stewart:
En relación con esto, podría ser de interés decir que
usted fue una accionista de importancia considerable en el
Instituto de Reforma de la Salud y que, cuando se propuso
reorganizarlo, se le informó a usted de ello, y usted dio
instrucciones a los administradores del Sanatorio en
cuanto a la distribución de sus acciones. Las minutas de
la Junta del Sanatorio de Junio 25, 1899 contienen lo
siguiente:
"El secretario leyó una lista de treinta y nueve nombres
de la hermana White de
personas que
se convertirían en accionistas. La lista fue aceptada".
Dr. Stewart:
También citamos parte de una carta del secretario
reconociendo que había recibido los nombres.
BATTLE CREEK, Mich., junio 6, 1899.
PASTOR W.C. WHITE.
"Sunnyside", Coorambong,
New South
Wales.
Querido hermano: Acuso
recibo de dos formularios en blanco relacionados con las acciones de la hermana
White en el antiguo Instituto para la Reforma de la
Salud. Nos alegra recibir los nombres que nos enviaron,
y nos aseguraremos de que sean notificados en
seguida, pues el plazo expira el 1 de julio. Pero, como
los nombres ya han sido recibidos y la Junta ya ha tomado acción, los
hemos
fechado en junio. Cuando sean firmados y devueltos, serán entrados
como accionistas en el Sanatorio de Michigan y la Asociación de
Benevolencia. Como usted indica en su carta, hay varias
personas en la lista a las cuales ya se les han asignado acciones y se
les han enviado certificados. A los demás, se los enviaremos en
seguida,
así como la Declaración de Principios. El pastor Haskell nos envió su nombre, y
recomendó a varias personas que ya eran accionistas. Notamos que su nombre de usted no está en la lista,
pero lo hemos incluido. Si usted desea firmar los formularios en blanco que se acompañan, y también
consigue que las otras personas firmen sus formularios y los devuelvan, me
encargaré de que sean entrados apropiadamente en nuestro libro de
accionistas.
Tendremos mucho gusto en cualquier
momento mentenerle informado con referencia al progreso y el
delineamiento general de la obra. Cualquier cosa que yo
pueda hacer para usted en cualquier momento con referencia a cualquier
cuestión mencionada arriba, será parac mí un placer hacerlo".
Vayan nuestros buenos
deseos
para su madre y todos los amigos.
Sinceramente suyo,
(Firmado) W. H. HALL,
Secretario".
Dr. Stewart:
Cuando usted autorizó la distribución de sus acciones en
el momento de la reorganización, el Señor sabía uno de los
principios fundamentales en relación con la distribución
de los fondos era que los mismos debían usados enteramente
dentro del estado.
Puede que los accionistas se hayan equivocado al
permitir que los administradores reorganizaran de la
manera en que lo hicieron, pero, puesto que ellos
reorganizaron bajo unos estatutos que exigían que todos
los fondos fueran usados enteramente dentro del estado,
¿no estaban obligados moral y legalmente a respetar las
leyes de los "poderes constituídos"? Si los administradores hubiesen accedido a la demanda: "Ahora he recibido instrucciones del
Señor para pedirles que hagan algo por nosotros, y que lo hagan sin
demora", ¿no habrían ellos violado la instrucción
bíblica dada en Romanos 13:1: "Sométase toda persona a
la
autoridades superiores, porque no hay autoridad sino de
parte de Dios, y las que hay, por Dios han sido establecidas"?
Aunque que la demanda: "debe hacerse alguna división de sus
fondos para este propósito" no pudo concederse, los
administradores del Sanatorio sí hicieron sus mejores
esfuerzos para obtener dinero para usted en alguna otra
parte y, como resultado, se le enviaron a usted varios
miles de dólares.
A pesar de estos hechos, el Dr. Kellog y los
administradres del Sanatorio fueorn criticados
severamente, aparentemente por la razón de que rehusaron
enviar a Autsralia parte de las ganancias del Sanatorio
cuando sabían que, al hacerlo, estarían violando los
estatutos bajo los cuales estaban organizados. Decimos que
aparentemente por estas razones: Porque antes de 1899, la
obra del Dr. Kellogg y sus asociados recibió la más alta
clase de reconocimiento de parte suya, como queda
evidenciado por las siguientes citas de sus escritos antes
de este tiempo:
"Los médicos misioneros
están haciendo la obra, largo tiempo descuidada, que Dios
encomendó a la iglesia en Battle Creek. Están haciendo
el último llamado a la cena que Él ha preparado".
"Para que sea llevada a
cabo correctamente,
la obra médica misionera necesita talento. Requiere manos fuertes y
dispuestas,
y administración sabia y discriminadora. ¿Pero, puede
esto hacerse mientras los
que están en puestos de responsabilidad -- presidentes
de conferencias y ministros -- obstaculizan el camino?"
"El Señor ha tocado al
Dr. Kellogg
y a sus colaboradores para que hagan la obra
que corresponde a la iglesia ... y Dios ha puesto su
preciosa obra en las manos de los que están dispuestos a
tomarla y llevarla adelante".
"Si usted no siente ningún interés en la
obra que va
hacia
adelante, si usted no estimula la obra médica misionera en las iglesias, se
hará sin su consentimiento, pues es la obra de Dios y
debe ser hecha".
Testimonios especiales
para los ministros y obreros, No. 10, marzo 1897, p1:
"Deseo decir que la obra que está haciendo el Dr.
Kellogg no debe considerada como una obra extraña, pues
es la misma
obra que cada iglesia que cree en la verdad para esta
época hace mucho tiempo debería estar haciendo ... Es la obra que
Dios mismo designó".
El peligro de rechazar
la luz -- Feb. 6, 1896:
"Ustedes están
preocupados y perplejos porque el Dr. Kellogg está
recogiendo desproporcionadamente en la obra médica misionera porque su obra excede con mucho la obra que está
haciendo en las iglesias la Conferencia General. ¿Qué es lo que pasa? Es
claro que no se ha actuado según la luz dada por Dios. Los hombres han reemplazado los
planes de Dios con sus propios planes. La prosperidad de
la obra médica misionera está en el orden de Dios: Esta obra debe ser llevada por las carreteras
y los vallados".
SUNNYSIDE, COORAMBONG,
Mayo 19, 1898.
Estimado hermano Irwin: Hemos recibido una queja,diciendo que el Dr. Kellogg ha recogiido a todos los jóvenes que ha podido, y que por consiguiente, no tenemos obreros. Pero esto es lo mejor que podía hacerse para los jóvenes y la obra. A usted, como presidente de la Conferencia General, al hermano Evans, como presidente de la Asociación de la Conferencia General, y al hermano Durland, como presidente de la Conferencia de Michigan, yo les diría: Continúen la obra con tacto y capacidad. Pongan a algunos y algunas de estos y estas jóvenes a trabajar en las iglesias. Combinen la obra médica misionera con la proclamación del mensaje del tercer ángel. ... Envíen obreros a todas las iglesias de Michigan, obreros que hayan conectado los principios de la reforma pro salud con el mensaje del tercer ángel. Verán que el aliento de vida llegará a algunas de estas iglesias". ...
"Ahora bien, Dios no
nos ha bendecido como lo habría hecho si hubiese habido
aprecio por la obra que Él está llevando a cabo. Doy
gracias a Dios de que el Dr. Kellogg no se haya hundido
en el desaliento y la infidelidad. He sentido temor por
ello, y le he escrito algunas cosas con toda franqueza,
y puede ser, Dr. Kellogg -- si está aquí -- que le haya
escrito demasiado fuerte, porque sentí como si tuviera
que agarrarlo con todas las fuerzas que pudiera reunir.
Pero he visto la obra que se ha llevado a cabo. ¿Cómo
puede alguien verla y no darse cuenta de que Dios está
presente en ella? Para mí, ese es el misterio. No puedo
entenderlo. No puedo explicarlo". [El Dr. Stewart no
parece dar
una referencia para esta cita].
Dr. Stewart: Su
testimonio de febrero 27, 1900 al Dr. Kellogg dice: "No dudo en decir que Dios
no lo puso a usted en esa obra en Chicago".
Un año más tarde, sólo algunos días después de que usted
investigó la obra médica misionera en Chicago, y
cuando el Señor llamó al Dr. Kellogg "mi
siervo" y lo designó como su médico,
usted dice lo siguiente con referencia a la obra médica
misionera: "Pero he visto la obra que
se ha llevado a cabo, y ¿cómo puede alguien verla y no darse cuenta de que Dios está presente en ella? Para mí,
ese es el misterio.
No puedo entenderlo. No
puedo explicarlo".
Fin de los
comentarios del folleto del Dr. Charles Stewart.
El Testimonio de Merritt G.
Kellogg Sobre el Fiasco de los Edificios de Chicago
Declaración de M. G. Kellogg - 1908
Aproximadamente el 30 de junio o el 1 de julio
de 1900, al regresar a Australia desde las Islas Tonga,
visité a la Sra. E. G. White en su casa cerca de
Cooranbong, Nueva Gales del Sur, con el propósito de
consultar con ella y con W. C. White acerca de futuras
obras. Entre otras cosas, la Sra. White y yo discutimos el
establecimiento de la obra del Sanatorio en Australia,
sobre una base sustancial. Esta obra había sido llevada a
cabo durante varios años a pequeña escala en Summer Hill,
en un edificio alquilado, pero no era un éxito sostenido.
La Sra. White me dijo que planeaba regresar a
Estados Unidos tan pronto como pudiera vender su casa y
arreglar ciertos asuntos allí en Australia, pera estaba
muy ansiosa de ver adoptados los planos para un edificio
apropiado para la obra de un sanatorio, y la obra de
levantarlo comenzó antes de que ella saliera de Australia.
Dijo que la tierra había sido adquirida y pagada en parte,
pero que, hasta ahora, no habían podido recoger ningún
dinero con el cual trabajar en la construcción del
edificio. Luego, W. C. White dijo: "No tenemos ningún
plano para un edificio, ni dinero con qué pagar para la
confección de planos". Luego, dijo la Sra. White: "Yo
había pensado hacer que el hermano Wessels pusiera su
dinero en un edificio para un sanatorio, y que fuese su
administrador de finanzas. Yo esperaba plenamente que lo
haría. Me dio a entender que lo haría, pues su trabajo
tenía que ver con la selección del terreno, pero en lugar
de invertir su dinero en esa empresa, súbitamente se
embarcó hace algunas semanas, y regresó a Sudáfrica sin
poner ni un solo chelín en la obra". La Sra. White
continuó hablándome de los esfuerzos que ella había hecho
para conseguir dinero para establecer un sanatorio allí en
Nueva Gales del Sur.
Novecientas libras se habían recogido en
Australia. Dijo que el Sanatorio de Battle Creek debería
ayudar con bastante liberalidad, porque uno de los
propósitos para los cuales existía era ayudar a establecer
sanatorios en otros lugares. Dijo que había llamado al Dr.
J. H. Kellogg repetidamente para que le enviara dinero
para ayudar en esta obra, diciéndole que era su deber
asegurarse de que el Sanatorio de Battle Creek asignara
parte de sus ganancias para ese propósito.
Le dije a la hermana White que yo entendía que
los estatutos del Sanatorio de Battle Creek no le permitía
usar ninguna parte de sus ganancias fuera del estado de
Michigan; que era una institución legalmente incorporada,
y que los directores debían mantenerse dentro de las
restricciones de los estatutos. Luego ella me dijo que se
le había mostrado que ella, como sierva del Señor, tenía
derecho a exigir dinero para llevar adelante la obra del
Señor, y que Él decía que quién mejor que ella para
decidir dónde se necesitaba el dinero o dónde debía
usarse. Luego me dijo que, cada vez que le pedía al Dr. J.
H. Kellogg que hiciera que el Sanatorio le enviara dinero,
él siempre contestaba que no se podía a causa de las
fuertes deudas.
Dijo la Sra. White: Eso no era verdad. El Dr.
Kellogg me mentía acerca de eso porque, en el mismo
momento en que yo le rogaba con insistencia pidiéndole
dinero, él gastaba miles y miles de dólares de las
ganancias del Sanatorio en levantar y llevar adelante la
obra que está efectuando en Chicago para los pobres de
solemnidad, una obra que Dios nunca le mandó que hiciera.
A esto, yo contesté: "Hermana White, me parece
que usted está actuando en error en este asunto, por las
siguientes razones:
1. Los estatutos del Sanatorio de Battle Creek
prohiben el uso de sus ganancias fuera del estado. Ese
sanatorio no tiene que pagar ningún impuesto al estado, ni
al condado, ni a la ciudad basándose en que es una
institución de caridad cuyos servicios caritativos han de
ser utilizados por entero en el estado de Michigan.
2. Se me informa que el dinero usado por
el Dr. J. H. Kellogg para llevar adelante esa obra en
Chicago es tomado por completo de fondos dnados para esa
obra especial, y que procedía mayormente de personas fuera
de la denominación Adventista del Séptimo Día".
A la mañana siguiente, la hermana White me dijo
que yo estaba errado en mi punto de vista sobre el asunto
que ella y yo habíamos comentado. Dijo ella: "Aquí tengo
la prueba de que el Dr. Kellogg me mintió al decirme que
el Sanatorio no podía enviarme el dinero que yo le había
pedido. Tengo la prueba de que, en ese mismo momento, él
gastaba miles de dólares de dinero del Sanatorio en
Chicago". Luego me entregó una copia de un periódico de
New York, "The Observer" creo, en el que había un artículo
que pretendía ser un relato lisonjero de una obra dirigida
por el Dr. J. H. Kellogg para los pobres de Chicago, cuyos
hogares estaban situados en los barrios bajos de esa
ciudad. El artículo presentaba al Dr. Kellogg como un gran
filántropo, y decía que el doctor había gastado gran parte
de su propios fondos en esa obra, y muchos miles de
dólares del dinero del Sanatorio de Battle Creek. Seguía
diciendo que el Sanatorio de Battle Creek pensaba seguir
gastando muchos millares de dólares cada año en esa obra.
Después de que terminé de leer el artículo,
dije: "Hermana White, usted no debe poner su confianza en
las afirmaciones contenidas en este periódico, pues es
bastante evidente que el escritor del artículo que usted
me pidió que leyera es o un reportero tratando de componer
un articulo sensacionalista o una persona que tiene su
propia trama que trata de promover por medio del artículo.
Conozco al Dr. Kellogg demasiado bien como para creer que,
a sabiendas, permitiría que se publicara cualquier
material lisonjero como éste, bien sea acerca de él mismo
o de su obra en Chicago. No creo que él nunca haya visto
ni sabido nada acerca de este artículo sino hasta que fue
publicado, si es que se enteró".
A esto, la Sra. White replicó con cierto
acaloramiento: "Sé de lo que estoy hablando. Ese artículo
fue escrito por el propio hombre de confianza de su
hermano, el que siempre viaja con él para escriba lo que
su hermano le dicte. Su hermano sabía todo acerca de ese
artículo antes de que fuese publicado, porque dirigió la
escritura de él, y fue publicado bajo sus órdenes". Traté
nuevamente de mostrarle a la hermana White que tenía una
opinión errada del asunto, pero me cerró la boca diciendo
con mucho calor que ella no estaba errada, que ella sabía
de lo que estaba hablando. Luego exclamó: "Su hermano ha
estado gastando vastas sumas de dinero en la construcción
de edificios y llevando adelante una obra en Chicago a la
cual Dios nunca lo llamó. Era su deber, y del Sanatorio de
Battle Creek, ayudarnos a establecer un Sanatorio aquí en
Australia. Él siempre ha alegado pobreza y endeudamiento
como excusa para no ayudarnos, pero ha gastado miles de
dólares en su propia obra en Chicago, una obra que Dios
nunca requirió de su mano. Se ha exaltado como
Nabucodonosor, y como Nabucodonosor debe ser humillado.
Voy a escribirle un corto testimonio sobre el tema, pero
no quiero que usted le escriba ni una palabra acerca de lo
que he dicho sobre eso hasta ahora".
Luego, me arrancó una promesa de que yo no le
escribiría al Dr. Kellogg sobre el asunto. He cumplido esa
promesa fielmente. Evidentemente, la Sra. White cumplió la
suya, pues, algunos meses más tarde se me informó desde
St. Helena que el Dr. J. H. Kellogg había rehusado
reconocer como verdadero un testimonio de la hermana White
acusándolo de haber gastado miles de dólares en la
construcción de edificios en Chicago, dinero que debió
haber sido enviado a Australia en respuesta a la exigencia
de la Sra. White.
Deseoso de confirmar los hechos acerca de ese
testimonio, hice una visita especial a St. Helena en 1906
y le pedí a W. C. White que me mostrara lo que su madre
había escrito al Dr. Kellogg sobre la construcción de
edificios en Chicago. W. C. White me dijo que el Dr.
Stewart del Sanatorio de Battle Creek le había pedido una
copia de ese mismo testimonio. Luego me mostró dos cartas
escritas por su madre al Dr. J. H. Kellogg, y también una
carta de él al Dr. Stewart, en la cual él había copiado lo
que su madre había escrito al Dr. J. H. Kellogg.
En estas cartas, la Sra.White dice que se le
había mostrado en visión un gran edificio que el Dr.
Kellogg había erigido en Chicago, y que una hoja de papel
había sido sostenida delante de sus ojos, en la cual
estaba escrito: "Consumidores, no productores". En la hoja
de papel había varias hileras de números que representaban
la cantidad de dinero que el Dr. Kellogg había gastado en
los edificios y en la obra que él había levantado y estaba
llevando adelante en Chicago. Estas cartas fueron escritas
en Australia en 1900.
En la carta de W. C. White al Dr. Stewart, White
dice que su madre vio primero el artículo de periódico en
el cual se hacía referencia a febrero 24 de 1900, y que
ella escribió la primera carta el 27 de febrero, o sea
tres días más tarde. También dice que su madre había dicho
que ella creía que los edificios habían sido construidos,
pero esto no era así, y ella dijo que no supo cómo
corregir el error que había cometido sino hasta 1902, dos
años después de haber visto los edificios en visión en
Australia. W. C. White escribió al Dr. Stewart diciendo
que, en 1902, el juez Arthur le dijo a su madre que se
había preparado un plan a solicitud de algunos doctores,
cuando el Dr. J. H. Kellogg estaba en Europa, para la
construcción de un edificio en Chicago, en el cual
funcionaría el Medical Misisonary College, y que, poco
después de recibir su información del juez Arthur, ella
tuvo una visión en la que se mostraba que el objeto de la
primera visión era impedir la construcción del edificio.
Cuando W. C. White me dijo esto para explicar el
testimonio, en el cual se acusaba al Dr. Kellogg de haber
dilapidado el dinero del Señor al construir grandes
edificios, yo le pregunté si consideraba un tratamiento
correcto acusar al Dr. J. H. Kellogg de apostasía y
rebelión porque no reconoció como verdadero un testimonio
que lo acusaba de haber hecho lo que no había hecho, y que
ni siquiera había considerado hacer, un testimonio basado
en un sueño o una visión nocturna que la Sra. White dijo
que había malinterpretado, W. C. White rehusó darme alguna
respuesta a esta pregunta. Luego yo le dije: Hermano Whte,
sólo póngase en lugar del Dr. H. H. Kellogg. ¿Cómo se
habría sentido? ¿Qué habría pensado? ¿Qué habría dicho?
¿Cómo habría actuado? ¿Habría recibido usted un testimonio
como éste, y luego se habría sentido obligado a esperar
dos años cualquier clase de explicación, y luego a recibir
una explicación como la que usted le ha dado al Dr.
Stewart ahora en 1906? W. C. White no pudo responder a
estas preguntas.
Como yo entiendo la cuestión, hay muchas cosas
que han acarreado la persecución que se ha desatado contra
el Dr. J. H. Kellogg y que finalmente culminaron con su
expulsión de la iglesia de Battle Creek. Algunas de estas
cosas eran remotas e incidentales, mientras que otras eran
más inmediatas. De éstas, mencionaré tres, que sobresalen
de manera más manifiesta que las otras.
Primera. El Dr. Kellogg es un hombre al cual W.
C. White ha temido durante muchos por años. En varias
ocasiones, W. C. White me dijo que le temía por su
influencia, por su poder como organizador. Más de una vez,
W. C. White me dijo: "Tengo miedo de reunirme con el Dr.
Kellogg. Tiene una manera de decir las cosas, que no le
puedo responder".
Justo antes de laConferencia General que tuvo
lugar en Oakland en 1903, le pregunté a W. C. White quién
creía él que sería elegido presidente, contestó: "Hemos
pensado elegir al pastor A. G. Daniells, y espero que
podamos elegirlo si su hermano de usted no se nos opone.
Sin embargo, me temo que vendrá a esta Confrencia con la
suficiente influencia para impedirlo. Sin embargo, espero
que podamos elegir al pastor Daniells". Esto demuestra
cuánto temía al Dr. Kellogg. Hasta aquí con este caso.
Segunda. El Dr. Kellogg había sido dejado en paz
en su lucha por reconstruir el Sanatorio. Se había
intentado arruinar su crédito, y el Dr. K. había decidido
regalar añ Sanatorio su libro "Living Temple" para que lo
publicara y usara las ganancias como fondo de
construcción.
Se imprimiría una edición grande y se vendería
por suscripción. Tan pronto se supo este hecho, los que se
oponían al Dr. Kellogg trataron de detener la venta del
libro declarándolo herético. La verdadera razón para que
desearan detener la venta es que su venta absorbería a
muchos de los vendedores ambulantes que se ocupaban en
vender los libros de Ellen White y otros libros
denominacionales ASD. Por consiguiente, para detener la
venta de "Living Temple", se lo acusó de enseñar
panteísmo. Esta acusación fue hecha por algunos oficiales
de la Conferencia General a pesar de que la teología
enseñada por "Living Temple" está en perfecta
armonía con la enseñanza de la teología enseñada por
la hermana White y los principales ministros de la
denominación y el editor del periódico denominacional.
En 1904, cuando el libro Living Temple era
severamente criticado, llamé a la hermana White y conversé
con ella sobre el tema. Me dijo que el libro enseñaba
panteísmo. Le dije que yo lo había leído cuidadosamente
varias veces, y que no había podido hallar en él ninguna
teología diferente de la que había visto en varios de los
libros de ella. Luego, le pregunté si ella había leído el
libro. "No", me dijo. "Nunca lo he leído. Willie ha
llamado mi atención a algunos párrafos, pero nunca lo he
examinado de cerca. No era necesario que yo lo hiciera.
Dos veces, se me ha mostrado en visiones de la noche. Lo
que me hace decir que no debe ser vendido. En una de estas
visiones de la noche, una persona digna, la que por lo
general está presente cuand tengo una visión, estuvo de
pie delante de mí con una copia de "Living Temple" en la
mano. Sosteniéndola delante de mí, dijo: 'Este libro no
debe ser vendido'. Poco tiempo antes o después de esto, yo
había estado leyendo el relato de un barco de vapor que
cruzaba el Atlántico, había encontrado un gran iceberg y
le había sido muy difícil evitar chocar contra él".
"Algunas noches después de leer este relato,
soñé que yo, junto con muchas otras personas, estaba en el
océano en un barco de vapor. Habíamos estado navegando
tranquilamente, pero, de repente, nos acercamos mucho a un
enorme iceberg. El capitán trató de alejarse sin chocar,
pero sus esfuerzos fueron inútiles. Parecía que nuestro
barco sería lanzado contra el iceberg y que se haría
añicos. En ese momento, cuando parecía que seríamos
golpeados por el hielo, la persona digna que tan a menudo
he visto en visiones de la noche, apareció en cubierta, y
hablando con el capitán, le dijo: 'Enfréntalo, enfréntalo,
enfréntalo'. En ese momento, el capitán hizo girar el
barco y lo dirigió directamente contra el iceberg. El
barco chocó contra el iceberg con un gran estruendo que
hizo estremecer el barco de proa a popa, pero el golpe
destruyó el iceberg. El hielo cayó dando tumbos sobre el
barco hasta que parecía que éste se hundiría, pero el
hielo se deslizó hacia fuera, y el barco se levantó y
siguió su camino navegando con toda seguridad. Cuando
desperté de esta visión, supe en seguida qué debía hacer
acerca de "Living Temple" y la obra de su hermano. Tenemos
que enfrentarlo, de la misma manera que vi el barco
enfrentar el iceberg. Ahora bien, deseo decirle a usted
que su hermano John no dice la verdad. Me mintió. Cuando
le escribí diciéndole que no debía vender Living Temple, me
prometió fielmente que no lo haría, pero violó su palabra,
pues continuó vendiendo el libro, y ha vendido millares de
copias desde que me prometió que no vendería más. Es
imposible que su hermano hable con la verdad. Toda su vida
ha fallado en no decir la verdad. Su hermano John se ha
exaltado como Nabucodonosor, y como él, debe ser
humillado. Yo espero que, como Nabucodonosor, se vuelva
loco".
La tercera cosa, y la principal, que, en mi
opinión, más contribuyó a la persecución contra el Dr. J.
H. Kellogg y finalmente su expulsión de la iglesia, fue el
hecho de que la Sra. White le había hecho, como testimonio
de Dios, una acusación que no era verdadera. En todo caso,
una acusación que estaba basada en un sueño que ella había
tenido como resultado de haber leído un artículo de
periódico concerniente a la obra del Dr. J. H. Kellogg en
Chicago, y como resultado de haber visto en algunas de
nuestras publicaciones un recorte del edificio alquilado,
en el cual se estaba llevando a cabo la obra en Chicago.
Habiendo cometido un error que ella no pudo explicar ni
corregir satisfactoriamente, ella y los demás luego
cometieron el error de tratar de humillar al Doctor y
comprometerlo al intentar destruir su influencia
proclamándolo como panteísta, una persona hipnotizada y
peligrosa. No satisfechos con esto, buscaron paralizar la
obra del Sanatorio impidiendo que el Sanatorio contratara
enfermeras para el cuidado de los pacientes, y haciendo
circular toda clase de informes difamantes sobre el Doctor
y sus ayudantes. También trataron de paralizar el Medical
Misisonary College impidiendo, hasta donde fuese posible,
que los estudiantes entraran en él. Esta obra de tratar de
paralizar el Sanatorio y el Medical College fue concebida
por algunos oficiales de la Conferencia General. Acordaron
que la manera más segura, más rápida, y probablemente la
única manera en que el Dr. Kellogg podía ser aplastado y
humillado era cortándole el suministro de estudiantes,
ayudantes, y enfermeras. Después de acordar su plan, y que
la única manera de llevarlo a cabo era demostrando que era
panteísta, y en general un hombre malo, pusieron el plan
por escrito, y se lo enviaron a la hermana White y
consiguieron que respaldara el plan y que escribiera
algunos artículos para ser publicados en Review and
Herald.
Estas declaraciones las obtuve del hermano
Osborne, que me dijo que estuvo presente en la reunión
donde los oficiales del Comité de la Conferencia General
consideraron la cuestión. También me dijo que él era
secretario del comité. Me acabo de enterar de que el
hermano Osborne murió hace como diez días.
Para resumir, he llegado a la conclusión de que
la persecución y la expulsión del Dr. J. H. Kellogg se
debieron principalmente a las meteduras de pata de la Sra.
White al enviarle un corto testimonio de reproche,
acusándole de haber hecho cosas que no hizo, y en segundo
lugar, al temor de que el Dr. usara esta falsa visión
contra ella misma en perjuicio de la influencia de ella en
la denominación y contra su afirmación de que era la
vocera de Dios para este pueblo. Y en tercer lugar, al
temor de que, si él no era humillado, aplastado, o
expulsado de la iglesia, como lo fue Nabucodonsor de entre
los hombres, el Dr., por su gran capacidad organizativa,
conseguiría que los vendedores ambulantes de la venta de
libros de la Sra. White se dedicaran en su lugar a vender
los libros de él, y de esa manera, limitaría sus ingresos
a causa de las menores regalías, que me dicen que el yerno
de W. C. White reportó aquí en Healdsburg eran de cinco
mil dólares por año.
Hay varias razones de por qué me siento muy
satisfecho de que la Sra. White haya enviado tantos falsos
testimonios creyendo, en ese momento, que estaba diciendo
la verdad. Conozco personalmente dos de esos testimonios,
en los cuales una persona fue severamente reprendida por
hacer ciertas cosas, a pesar de que, hasta donde sé, la
persona reprendida, no sólo no había hecho aquéllo de lo
que se le acusaba, sino que, en realidad, había hecho lo
contrario. Otra cosa que me hace creer que la Sra. White
no es la vocera de Dios en todo lo que escribe es que ella
tiene que utilizar ayudantes de capacidad literaria para
revisar y editar lo que ella dice que el Señor le revela
de manera especial. Las más notables de estas ayudantes
fueron Marion Davis y Fannie Bolton. Parece muy extraño
que lo que se da por manifestación de Dios a una persona
especialmente seleccionada e inspirada por él tenga que
ser revisado y editado por una persona no inspirada.
En 1894, cuando estaba en Melbourne, Australia,
la Sra. White me dijo que, al escribir el libro Great
Controversy y prepararlo para que fuese impreso, Marion
Davis y Fannie Bolton eran las encargadas. Me dijo también
que estas muchachas eran responsables de ciertas cosas que
debían ir en el libro en la forma en que quedaron. La Sra.
White me dijo que Marion Davis confesó su participación en
el error, pero que Fannie Bolton no quiso confesar nada.
La Sra. White no me dijo exactamente qué error habían
cometido las jóvenes. Yo supongo que la razón de que ella
me hablara del tema era que Fannie Bolton me había
visitado con una declaración como sigue: Dijo Fannie: "Dr.
Kellogg, tengo una gran angustia mental He venido a
usted en busca de consejo, porque no sé qué hacer. Le dije
al pastor Starr (Geo. B.) lo que le voy a decir a usted,
pero él no me dio ningún consejo satisfactorio. Sabe
usted, dijo Fannie, yo escribo todo el tiempo para la
hermana White. La mayor parte de lo que escribo se publica
en Review and Herald
como si hubiera salido de la pluma de la hermana White, y
se envía como si hubiese sido escrito por la hermana White
bajo inspiración de Dios. Quiero decirle a usted que estoy
muy angustiada ppor este asunto, porque siento que estoy
siendo partícipe de un engaño. La gente está siendo
engañada acerca de la inspiración de lo que yo escribo.
Siento que es un gran error el que cualquier cosa que yo
escribo salga como si fuera bajo el nombre de la hermana
White, como un artículo especialmente inspirado por Dios.
Lo que yo escribo debería salir con mi propia firma, de
este modo, el crédito lo recibiría la persona correcta".
Le di a la Srta. Bolton el mejor consejo que pude, y poco
después le pedí a la hermana White que me explicara la
situación. La Sra. White me preguntó si Fannie me había
dicho lo que yo le había repetido, y cuando le dije que
sí, dijo: "El pastor Starr dice que ella fue donde él con
lo mismo". "Ahora" -- dijo la hermana White con cierto
calor -- Fannie Bolton jamás volverá a escribir ni una
sola línea para mí. Ella puede hacerme daño como ninguna
otra persona puede hacerlo". Unos días más tarde, la
Srta. Bolton fue enviada de vuelta a Estados Unidos. Desde
ese día hasta hoy, mis ojos se han abierto.
Firmado: M. G. Kellogg.
LA EXPLICACIÓN DE WILLIE
WHITE - EL HIJO DE ELLEN WHITE
Fuente: http://www.whiteestate.org/issues/VisionsofEGW.html
A veces, se hace la
pregunta: ¿Fue el Dr. Kellogg reprendido por construir en Chicago un edificio que nunca se construyó? ¿Hubo una representación de edificios que nunca
fueron construidos? Sí. ¿Se le dio a Ezequiel una representación de una ciudad y un templo que
nunca fueron construidos? ¿Por qué se le dio esa
representación? ¡Porque era posible que hubiese una
ciudad como ésa! Si la gente hubiese andado en la luz,
habría sido construida. Pero no anduvieron en la luz, y
la ciudad y el templo que se le mostraron al profeta nunca fueron construidos. Ezequiel registró lo que se le había mostrado.
Mientras
estuvimos en Australia, se le presentaron a mi madre en
visiones de la noche grandes edificios en Chicago,
ocupados por muchas empresas, absorbiendo el tiempo y las energías de nuestro
pueblo. Se le mostró lo que significaba para las conferencias y las misiones
en otras
tierras
permitir recoger recursos económicos para estos
edificios. Nadie le había escrito jamás a mi madre, ni nadie le dijo que hubiera
ninguno de estos edificios. Pero ella escribió lo que se le había
presentado. Ella vio los edificios, las muchas empresas,
y el resultado,
y escribió la protesta que había recibido contra ello. Yo lo leí antes de que se enviara, y pensé que la persona
a quien estaba dirigido entendía
la obra lo bastante bien como para entender su significado y recibirlo como advertencia.
Pero, en lugar de eso, se despertó una gran indignación. A
menudo, se ha comentado y la carta se ha citado en el
sentido de que demuestra la ninguna confiabilidad de los
Testimonios.
Por algunos años, esto fue una carga para mi
madre, pero, en el verano de 1902, después de que se
organizó la Asociación Médica Misionera y de Benevolencia
del Pacífico, la perplejidad desapareció. Un día, el juez
Jesse Arthur y la señora de Arthur cenaron en la casa de
mi madre, y después de la cena, se comentó el asunto del
edificio de Chicago. El juez Arthur nos dijo que él sabía
algo de los planos que habían sido preparados y discutidos
para un gran edificio en Chicago, y que había visto el
plano que había sido trazado para ese edificio por el
hermano W. K. Loughborough. Nos dijo que el Dr. Holmes,
que había hecho mucho para ayudar en la obra del Medical
Missionary College en Chicago, y que era miembro activo de
la Asociación Médica Americana, estaba profundamente
interesado en que tuviéramos edificios grandes y
aceptables porque, a menos que tuviéramos un lugar
adecuado para nuestra obra, sería imposible obtener un
reconocimiento favorable de la Asociación Médica Americana
y la Association of Medical Colleges.
Por lo tanto, el Dr. Holmes buscó
voluntariamente un lugar e hizo sugerencias acerca de
planos. Se examinaron varios lugares; se discutieron
varios planos, grandes y pequeños. El Dr. Holmes constantemente lideraba planes
para un edificio
bien grande, y se pensaba que el Medical College podía
ocupar una parte, parte que podía ser entregada al dispensario, y varias
otras empresas similares podrían estar agrupadas en este
edificio grande. Según el juez Arthur describía
en términos generales los planos que estaban siendo
considerados para un edificio, decíami madre: "Eso es lo
que me fue presentado a mí", y luego procedía a describir
el edificio, y continuaba de esta manera durante un rato.
"Sí", decía el juez Arthur, y luego procedía con la
descripción. La conversación era como la de dos personas
que habían visto las mismas cosas, y en la cual una de
ellas contaba una parte y la otra contaba la otra, y todo
en perfecta armonía. Se consideró importante que el
edificio grande bajo consideración se construyera tan
pronto fuese posible porque se acercaba el tiempo de la
graduación de una clase de estudiantes del Medical
Missionary College y se deseaba la influencia amigable de
las asociaciones médicas supervisoras. El Dr. J. H.Kellogg
estaba en Europa, pero se esperaba su aprobación de todo corazón.
Pero, a su regreso, en seguida surgió la pregunta: "¿Dónde
está el dinero?" El testimonio concerniente a los grandes
edificios en Chicago le había hecho perder la esperanza de
que pudiera levantar los fondos necesarios para su
construcción.
El mensaje
había llegado al Dr. Kellogg mientras estaba en Europa. No sólo era el
líder, sino también la cabeza y el frente de esa obra.
Fueron sus planes lo que dieron forma a todo lo que se
había hecho. Cuando vio que el Testimonio era contra lo que él
y sus asociados querían hacer, hizo un alto.
CALENDARIO DEL FIASCO DE LOS EDIFICIOS
Investigado por Kerry Wynne
Afiliación en la Iglesia y
expulsión
Hubo varias razones de por qué la Iglesia ASD
expulsó al Dr. Kellogg:
1) El Dr. Kellogg creía que los ministros
religiosos no deberían estar en posiciones de
autoridad por encima de los doctores en medicina.
2) Insistía en que el Sanatorio y las
Sociedades Médicas Misioneras y de Benevolencia no eran
denominacionales. Tenía contacto con personas de todas las
convicciones religiosas, capas sociales, razas, y
culturas, y tenía un llamado a servir a toda la humanidad
sin tratar de convertirlos a la fe ASD.
3) La tercera razón era su marcada
independencia del liderazgo de la iglesia. Cuando
instituciones o esfuerzos misioneros se lo pedían, los
financiaba con ingresos privados procedentes de sus
conferencias, ventas de libros y fabricación de alimentos.
Además, sólo el diez por ciento del dinero de sus
esfuerzos para levantar fondos procedía de donantes
Adventistas. La mayoría procedía de otras denominaciones.
Su capacidad para sostener los cordones de la bolsa era
una amenaza para los líderes de la iglesia.
El origen de la información que antecede y
muchas otras más abajo es The Urantia Book Historical
Society en:
http://www.ubhistory.org/StoriesandPeople/JHKellogg.html
1893 - Fuente - Urantia: John
Harvey Kellogg establece y se convierte en presidente de
la Asociación
Médica Misionera y de Benevolencia de los Adventistas
del Séptimo Día, que establece treinta nuevos
sanatorios,12 restaurantes vegetarianos, y varias misiones
médicas urbanas calculadas para ayudar a los pobres y los
desempleados. También ayuda a establecer sanatorios en
México, Inglaterra, Dinamarca, Alemania, y Suiza. Hace
fuertes contribuciones a la MMBA con las ganancias de su
compañia de alimentos y pasa como la mitad de su tiempo
asistiendo a reuniones de juntas directivas de sanatorios,
practicano cirugías, aconsejando sobre el tratamiento de
pacientes, y en la construcción de edificios por todo el
mundo.
Kellogg abre una sucursal del Sanatorio en Chicago el
1 de mayo de 1893, con cuatro empleados, a tiempo para la
Feria Mundial "Columbian Exhibition" y en la última parte
de junio abre la Misión Médica en Chicago sobre la calle
West Van Buren con una gran donación de $40,000 de Francis
y Henry Wessel. Para 1898, hay más de 200 empleados. La
Misión Médica de Chicago abre en el sótano de la Custom
Place House, ofreciendo tres tipos principales de
servicios: 1) un dispensario médico; 2) baños gratis, y 3)
lavandería gratis. Durante un solo mes, la misión
proporciona 2,116 baños gratis, lavandería gratis a 1,725
personas, y recetas para 199 personas. Venda 427 heridas,
y regala 2, 942 piezas de ropa usadas. Enfermeras
visitantes de la Escuela de Enfermería de Battle Creek vienen
a obtener experiencia clínica. Durante el primer año de la
existencia de la misión, las enfermeras visitantes hacen
9,000 llamadas gratis a sus casas.
William S. Sadler sugiere que la venta de
alimentos aumentaría rápidamente si pudieran poner en el
mercado muestras de productos alimenticios Sanatorio en
tiendas al detal. El doctor aprueba un plan para que
William S. Sadler lleve a cabo una campaña de muestras en
la ciudad de Michigan, campaña que tiene éxito. Los
directores del Sanatorio rehusan votar a favor de asignar
fondos para expansión, a pesar del éxito de la prueba de
mercadeo. Por consiguiente, John Harvey decide crear una
compañía independiente, Sanitas Food Company.
Produce nuevos alimentos, como cereales en hojuelas y
carnes "vegetales". John Harvey delega más y más
responsabilidad en su hermano menor, William Keith, y le
entrega un cuarto de las ganancias. Esta compañía se
convierte en la fuente primaria de ingresos que alimentan
la futura Misión Médica de Chicago.
1894 - Fuente -
Urantia: The Haskell Home for Orphans [El
Hogar Haskell para Huérfanos] en Battle Creek es dedicado
el 25 de enero. Durante este período, el Hogar aloja entre
150 y 200 niños y coloca más de 500 huérfanos en hogares
sustitutos. El hogar permanece abierto hasta 1921.
John Harvey Kellogg envía a William S. Sadler al
Moody Bible
Institute para recibir adiestramiento en técnicas
evangelísticas.
Mayo 31. Se perfecciona un nuevo cereal en
hojuelas - Granose
Flakes, que resulta en una patente. John Harvey
impone restricciones sobre los anuncios a causa de los
límites de la comunidad médica.
1895 - Fuente -
Urantia:
William S. Sadler es nombrado secretario de las
actividades de la Misión Médica de Chicago. El sanatorio
de Battle Creek, conjuntamente con la Asociación Misiones
Médicas y de Benevolencia, inician el American Medical
Missionary College. El trabajo clínico se hace en la
Misión Médica de Chicago y en Battle Creek. Se compra el
Edificio de Asentamientos AMMC a cierta distancia de al
sur de la misión principal en un vecindario de clase
trabajadora. Sirve como una combinación de dormitorio,
salón de clases, y hogar de asentamiento.Se convierte en
la oficina principal del Servicio de Enfermeras
Visitadoras de la misión y los otros programas,
incluyendo: un kindergarten gratis y enfermería diurna
para madres que trabajan, una escuela de cocina, clases de
costura y adiestramiento manual, conferencias sobre la
salud para adultos y niños, clubes de damas, un cuarto de
lectura para muchachos vendedores de periódicos, un
servicio de colocaciones para huérfanos y prostitutas
reclamadas, empleos para ex-alcohólicos, y un hogar
materno para madres solteras y escapadas. Se establecen Servicios de Salvavidas en Botes.
"Todas las noches, parejas de enfermeras de edad madura
salían de la Casa de Establecimiento para trabajar entre
las prostitutas de Chicago, a las cuales alientan a
abandonar su vida de prostitutas".
John Harvey Kellogg presenta un trabajo sobre
vida biológica en el Congreso Médico Panamericano
en Toronto.
El almirante A. P. Niblack acepta muchas de las
ideas de Kellogg y procede a presentar algunas de ellas en
la Academia Naval de Annapolis. En
una ocasión posterior, indica que la Academia Naval debe
la totalidad de su programa de adiestramiento físico a
John Harvey Kellogg.
1896 - Fuente - Urantia:
John Harvey Kellogg se dirige a la Academia de Medicina
de New
York. La Misión Médica de Chicago compra una antigua
iglesia para proporcionar un lugar para dormir y comer
para 300-400 personas. El hogar proporciona trabajo para
hombres, como tejer alfombras o fabricar escobas.
Fuente -
Urantia - El permiso del Sanatorio expira y se reorganiza como la
Asociación del Sanatorio y de Benevolencia de Michigan,
una corporación sin ánimo de lucro. Las disposiciones de
los nuevos estatutos: Todos los miembros firman una
declaración de principios, y acuerdan que la obra del
sanatorio debería ser "de naturaleza no denominacional, no
sectaria, humanitaria, y filantrópica". [Nota del editor: Las
palabras que
describen la
obra del sanatorio están citadas como aparecen en los
estatutos].
El Sanatorio ya no está bajo el control de la iglesia
Adventista. Los antiguos accionistas pueden nominar a una
persona a
la membresía
en la nueva organización, así que un gran número de ministros Adventistas del
Séptimo Día se convierten en miembros de la nueva Asociación.
[Nota del
editor: Esto
ayuda a
explicar por qué Ellen White terminó siendo accionista
del Sanatorio.
Aparentemente, compró acciones bajo las condiciones de los nuevos estatutos. Se le pagaba un salario de ministro con dinero de los diezmos;
aunque, como mujer, no podía ser
"ordenada". Sus ingresos del Sanatorio habrían comenzado
en 1897, o varios años antes de acusar al Dr. J. H. Kellogg de malversar fondos del Sanatorio para ayudar a
cuidar de los pobres 'indignos' de Chicago. Puede haber
tenido más de una razón para no querer que el Dr.
Kellogg gastara dinero del Sanatorio de Battle Creek en Chicago].
Fuente: A Sword of Fire Hung over Battle Creek by Gerald Carson, pp.
129-139: El Sanatorio de Battle Creek, bajo la
guía y el control del Dr. Kellogg, había establecido
sanatorios sucursales por todos los Estados Unidos y el
mundo. El Dr. Kellogg parece haber temido que los antiguos
estatutos, que designaban al Sanatorio como propiedad de
la denominación Adventista del Séptimo Día, hubiesen
dejado las puertas abiertas de par en par para que la
denominación tratara de malversar fondos del enormemente
exitosos Sanatorio de Battle Creek para ayudar a sostener
a otras instituciones en la red que estaban luchando por
sobrevivir.
Una oportunidad para poner fin a esta tentación
cayó en las manos del Dr. Kellogg. De tanto en tanto, la
comunidad de Battle Creek desarrollaba la fuerte impresión
de que el Sanatorio era un empresa comercial y que debería
pagar impuestos. Los incidentes que rodearon el
surgimiento de esta impresión en 1897 dieron una excusa
a Kellogg para presionar a favor de nuevos estatutos (para
reemplazar los que estaban a punto de expirar) para
resolver tanto el problema de la potencial malversación de
fondos hacia otros sanatorios como para protegerse de la
cuestión de los impuestos de una vez por todas. Gerald
Carson describe lo que sucedió:
Un Comité de Ciudadanos investigó, y halló que el "San" era
"enteramente
filasntrópico según la ley y de
hecho", que el Dr. no recibía ningún salario y que actuaba por
"motivos altruistas". De esta manera, el problema de los impuestos proporcionó
el clima para insertar uno de los artilugios más ingeniosos
del Dr. Kellogg en el reglamento. Primero, el Sanatorio fue
declarado oficialmente como no sectario, que, como decía
Horace Fletcher, el campeón masticador, recibía
bien a los "agnósticos honestos y a los budistas de
nacimiento". Segundo, aseguran y hacen cierta la exención de impuestos
del "San"; se escribió en los estatutos que sus ingresos debían, por ley, ser gastados
dentro del estado de Michigan. Ambas condiciones,
explicó el
Dr., eran necesarias para asegurar, y merecer, un amplio apoyo público.
El efecto operativo de
esta disposición fue que los Adventistas no podían
desviar el dinero btenido en Battle Creek para aumentar sus
cuartos de tratamiento que estaban esparcidos aquí y allá. Tan pronto como comenzó a
trabajar bajo los nuevos estatutos, el Dr. Kellogg pudo sentirse razonablemente seguro
de que no era posible ninguna conversión de fondos. Las
habilidades del multifacético nutricionista nunca le
resultaron más ventajosas que en su manejo de los documentos de la incorporación. Los
nuevos reglamentos no requerían que los
constituyentes
fuesen adventistas, y se hizo una declaración adicional
em el sentido de que la obra era "no denominacional, no
sectaria, puramente caritativa, benevolente, cristiana y filantrópica". Estas
palabras
eran citadas a menudo más tarde por el Dr. Kellogg. En ese tiempo, él explicaba
afablemente que estas disposiciones eran necesarias para proteger
el status de institución libre de impuestos. Por supuesto, como hospital, el
establecimiento no debía ser para cierta clase, sino para todas. No
era una afirmación sincera, porque, más tarde, cuando las diferencias entre los Adventistas y
el Sanatorio se volvieron críticas, el Dr. dijo claramente que, por supuesto, el
Sanatorio no operaba en los intereses de la iglesia - "como
dicen los estatutos". Los pastores habían sido burlados.
1898 - JULIO 19
- Un incendio muy sospechoso estalla en la
Compañía de Alimentos para la Salud en el Sanatorio.
1898 - JULIO 21
- Estalla otro incendio sospechoso, esta vez en
la planta de la Compañía de Alimentos Sanitas. Estos
incendios (Julio 19 y Julio 21) eran solamente
"levantadores de cortina", para citar al autor Carson.
1898 - Fuente - Urantia: La Misión de Salvavidas
abre el 15 de marzo de 1898, en 436 State Street, con John
Callahan como director. Es la única actividad que lleva la
etiqueta Adventists del Séptimo Día. Kellogg autoriza a
Sadler para que publique Life Boat Magazine. En su momento de mayor
circulación, publica más de 200,000 copias por edición.
El Dr. Kellogg inicia la Battle Creek Sanitarium Food
Company en White Street. En 1902, el nombre se
cambia por el de Battle Creek Sanitarium and Health Food
Company.
En junio, Will y Lena Sadler, junto con Thomass
Mackey pasan una semana en Sparta, Wisconsin, dictando
conferencias a un Campamento Misionero Adventista. El Dr.
Holden y la hermana Black regresan de la Asamblea Chautauqua
en Marinette, Wis., donde ayudan en la obra de la Escuela
de la Salud.
El Dr. John Harvey Kellogg va a la costa del
Pacífico y a México.
Lena Sadler es encargada del Servicio de Rescate
en Botes Salvavidas, y William Sadler es
secretario de la Escuela de Adiestramiento Médico Misionero
de Chicago, ambos en 1926 Wabash Avenue, en abril
de 1898. Un nuevo
hogar para obreros, un antiguo cuartel militar, es situado en 1939
State Street, con nueve pisos y cierto número de
habitaciones privadas.
Lena Sadler encabeza el programa en la cárcel de
mujeres.
"Las reuniones evangélicas en el Hogar de Maternidad
se están volviendo más y más interesantes. Las reuniones
son dirigidas por las hermanas Sadler y Callahan".
Se informa en Life Boat Magazine que hay más de
350 organizaciones de caridad en Chicago, que atienden las
necesidades de los pobres.
Tiene lugar una Convención Médica Misionera el 17-19
de diciembre en Chicago y a ella asisten 15 presidentes de
conferencia. La nueva Escuela de Adiestramiento Médico
Misionero tiene una matrícula de 150.
1899 -
Fuente - Urantia: William S. Sadler es puesto a
cargo de la Misión de Rescate en Botes Salvavidas hasta
octubre, cuando Thomas Mackey es puesto a cargo.
William S. Sadler dirige estudios sobre "Cristo
como obrero personal". También hace una visita a Peoria,
Illinois, y habla a la YMCA y varias iglesias".
Veintisiete Asociaciones Misiones Médicas y de
Benevolencia exiksten ahora en Chicago.
1899 - ENERO 31
- Testimonio de Ellen White a la Junta del Sanatorio [de Battle Creek], Enero 31, 1899:
"He recibido instrucciones del Señor de llamarlos a ustedes a hacer algo
por nosotros, y hacerlo ya". ... "Alguna división de sus fondos debe
hacerse con este propósito". "Una Apelación para la obra
en Australia", 1899, p. 36: "... las ganancias del
sanatorio deberían ser usadas mayormente para ayudar a instituciones
similares en circunstancias de necesidad".
1899 - MAYO - Fuente - Dr. Charles Stewart:
"El Dr. A. B. Olsen, que
en ese entonces era Secretario de la Junta de Fideicomisarios del American Medical
Missionary College, por insistencia del Dr. Bayard Holmes, de
Chicago,
insta a la Junta acerca de la
necesidad de que el Medical College se haga miembro de
la Association of Medical Colleges para que tenga una
posición y
un status
seguros entre las instituciones médicas de este país y de otros".
JUNIO 19 - 1899
- Fuente - Dr.
Charles Stewart:
"Lo siguiente, tomado de los registros del
American Medical Missionary College, demostrará
exactamente lo que se ha hecho en relación con el edificio
al que hemos aludido:
La Junta de
Fideicomisarios del American Medical
Missionary College se reunió el lunes a las nueve, el 19 de junio de
1899, en el Salón del Comité del Hospital, en Battle Creek, Mich. Presenets: los
fideicomisarios el juez Jesse Arthur, el Dr. H. F. Rand, y el
Dr. A. B. Olsen. Presente por invitación, el Dr. Wm. A.".
El Dr. Stewart explica que la reunión discutió
el asunto, pero difirió una decisión para el año
siguiente.
1899 - AGOSTO 29 - Fuente: Carta de
Ellen White al Dr.
John H. Kellogg:
Hermano Kellogg, el Señor llama a
hacer un
alto, mientras usted se sienta y cuenta el costo, para ver si podrá terminar el
edificio que comenzó. Mi hermano, usted está en peligro.
Está haciendo
muchos planes que nunca podrá llevar a cabo. En su
esfuerzo por abarcar mucho en la obra de rescate, está en peligro
de divorciarse de lo más importante y más urgente del
mensaje del último evangelio. Debe haber reuniones al
aire libre para alcanzar a todas las clases y, en cada
lugar en que haya estas reuniones al aire libre, debe haber un
hogar en que obreros educados puedan enseñar a toda clase de aprendices
a trabajar en actividades médicas misioneras en conjunto
con obreros bíblicos. Todos debemos ser enseñados a
desarrollar la obra en pueblos y ciudades que todavía no hayan
oído el mensaje. De este modo, la luz de la verdad
brillará en muchos lugares. Hay que construir casas de reunión y alquilar o construir
edificios humildes en que se puedan ofrecer tratamientos a los enfermos.
Por este medio, la obra del evangelio y la obra médica misionera estarán unidas. - Carta 135,
1899, pp. 1, 3, 7. (Al Dr. Kellogg, agosto 29, 1899). {4MR
132.2}.
1900 - Fuente:
Urantia: Se ofrece una completa descripción de
los servicios de la Misión de Chicago en The Life Boat,
edición de agosto de 1900, Vol. 3, No. 6.
William S. Sadler hace una corta visita a Omaha,
Nebraska, y a Denver, Colorado.
Las señoritas Langley, (Anna B) Kellogg, y
Blickenderfer, todas en una ocasión miembros de nuestro
establecimiento de enfermeras graduadas, en Chicago, toman
un curso especial para enfermeras graduadas en el
Sanatorio de Battle Creek.
1900 - FEBRERO
24 - Fuente - Carta de Willie C. White al Dr. Charles
Stewart: En una carta al Dr. Stewart, W. C. White
dice que su
madre vio por primera vez el artículo de periódico
al que hemos hecho referencia en Feb. 24, 1900, y que ella
escribió la primera carta el 27 de febrero, o sea tres
días más tarde. [El artículo que describe la obra de
rescate del Dr. Kellogg en Chicago].
1900 - FEBRERO 27 - Fuente- Carta 33 -
Ellen White desde Cooranbong, Australia, al Dr. Harvey
Kellogg:
Más recientemente, he
escrito acerca
de cifras
que me han sido presentadas con respecto al carro del evangelio. Luego
tuve una visión de la obra que usted ha estado haciendo
durante varios años. Yo estaba perdida a todo lo que había a mi
alrededor.
Vi la gran obra establecida por
usted en Chicago, y el dinero que se había invertido. Me fue presentado un
largo rollo
de papel, y en él había cifras de una naturaleza
alarmante, mientras que, en grandes letras, estaba escrito:
"Consumidores, pero no productores". Las cifras mostraban la cantidad de dinero
de Dios que se había invertido en esa empresa de Chicago, y el
resultado de esa obra en todo el mundo. La representación era de lo más descorazonadora. ...
{4MR 138.2}.
La viña entera del Señor
ha sido robada para llevar a cabo una obra interminable. Ha
consumido medios económicos que deberían haber suplido las necesidades
de campos en el extranjero. Los medios económicos
gastados en Chicago habrían dado ventajas a nuevos
campos para hacer la misma obra que Dios ha decidido que
se hiciera. Mire la pobreza que existe en porciones del campo en
países extranjeros, y por contraste, vea la inversión
hecha en una gran ciudad. Esto muestra que habido una malversación de fondos
que no son suyos para hacer con ellos lo que a usted le
plazca.
... {4MR 138.3; párrafo también en 2MR 241.1}.
No dudo en decir que Dios no lo puso a usted en
esa obra de Chicago. ... {4MR 139.1}.
Hace tres mañanas, puse
la mano sobre ciertos papeles, intercambios desde Estados Unidos,
que me enviaron hace como dos años. En el New York Observer del 6 de agosto de
1896, vi
su nombre y el encabezamiento: "La obra del Dr. Kellogg,
el Hogar
del Obrero, y la Obra Misionera de Chicago". Seguía un relato de la
obra que en ese momento seguía adelante, y la gran cantidad
de medios económicos requeridos para sostenerla. Desde
ese momento, la obra se ha expandido mucho, y por supuesto, su sostenimiento requiere una mayor suma
de dinero. Mientras
leía el artículo, y pensaba en estas cosas, pude entender la luz que el Señor me había dado
en cuanto a lo que los principios de verdad y justicia
conducirían a hacer los patrocinadores y obreros del sanatorio
[los patrocinadores
y obreros de
Battle Creek]; que su
primera ocupación debería ser ayudar a la obra en este
país [Australia],
a donde el Señor ha enviado obreros de
experiencia, aptos para llevar adelante su obra.
...{4MR 139.2}.
[Nota del
editor: El párrafo anterior es donde Ellen White
traiciona el hecho de que está acusando a Kellog de
estar utilizando el dinero del Sanatorio de Battle Creek
para sostener sus proyectos de Chicago - una acusación falsa. Aquí está la prueba de
que ella sí lo acusó de eso].
En el sanatorio de Battle
Creek como centro, el Señor le dio su obra, todo lo que
usted podía hacer con éxito. La obra médica misionera
debió ser siempre la gran obra que había de preparar a
un pueblo para que permaneciera de pie en el día de Dios
que pronto tendría lugar. "El temor de Dios es el
principio de la sabiduría". En su
sagrada dignidad, el
ministerio del evangelio de verdad es permanecer en el
cuerpo; Cristo mismo es la cabeza; la obra [médica]
misionera debe ser el brazo y la mano. Sólo una completa
instrucción
en la
palabra de Dios será suficiente para la salvación de las almas que están listas
para perecer. {4MR 139.3}.
Nuestra obra en las
reuniones de campo nos pone en contacto con todas las nacionalidades y
clases, ricos y pobres; altos y bajos; y nos pone en contacto con
los enfermos y los que sufren. Estas reuniones de campo deberían
ser consideradas como los verdaderos instrumentos de
Dios, así como lo son los sanatorios. Su obra es esencial.
{4MR 140.1}.
La obra de nuestras
escuelas es esencial. Dios tiene una iglesia, y la
educación en las escuelas no está en una base sólida a
menos que se lleve a cabo junto con la iglesia, y se
funde en los principios de la palabra de Dios. Una
completa instrucción en la palabra de Dios imparte una
educación que será tan duradera como la eternidad. ...
{4MR 140.2}.
Todas estas líneas de
trabajo requieren dinero. Dios no asigna a su pueblo la
misma obra que le asignó a Muller. Muller hizo una obra
noble. Pero Dios ha asignado a su pueblo una obra para
hacer según un plan diferente. A ellos les ha dado un
mensaje para el mundo entero. Han de entrar en
territorio tras territorio, y hacer una guerra agresiva
contra los pecados que destruyen el alma. Dios les dice:
"Alcen sus voces como trompeta, y muestren a mi pueblo
sus transgresiones, y a la casa de Jacob sus pecados".
Han de ocuparse en la obra de casa en casa, abriendo las
Escrituras a los que están en oscuridad. Ricos y pobres
por igual han de ser instruidos. Hay que trabajar por
los jóvenes con celo perseverante para ganarlos para la
verdad, para que también puedan convertirse en obreros
junto con Dios.-- Carta 33, 1900, pp. 1-5. (A J. H.
Kellogg, febrero 27, 1900).
Toda esta obra en
Chicago fue presentada en una visión que se me dio a
mediodía. Puso sobre mí una carga que nadie podía entender.
Yo no pude entenderla. Estaba abrumada por las cosas
presentadas. {4MR 141.1}.
Cuando volví en mí,
estaba como aturdida. El cuadro estuvo delante de mí
noche tras noche. Vi las inversiones que usted estaba
haciendo, el dinero que estaba consumiendo. ?Y cuál
sería el fin? No lo diré. {4MR 141.2}.
"¿Quién ha requerido
esto de tu mano?", fue la pregunta. "Hermana White", usted se lamenta,
"alguien le ha presentado las cosas en una luz
errónea". No, no; las cosas que nadie conoce se me han
presentado a mí. {4MR 141.3}.
Se me han hecho
entender los ambiciosos proyectos que usted ha
emprendido en una ciudad impía, dinero que debería haber
ayudado a la obra en este nuevo mundo y a levantarnos.
Pero todas las necesidades de este campo, que estaban
delante de usted, le han parecido menos importantes que
las grandes cosas que usted estaba creando. {4MR 141.4}.
Todos nuestros ruegos,
toda nuestra pobreza, que usted conocía; toda nuestra
incapacidad, que ciertamente era imposibilidad, estaba
delante de usted, pero las cosas de su propia creación
cerraron sus sentidos a nuestra gran necesidad. El Señor
quería que hiciéramos un gran centro aquí; que en este
país se estableciera la misma obra que habíamos
establecido en Estados Unidos con la mayor autonegación
y autosacrificio a cada paso. ... {4MR 141.5}.
Mientras escribo, mi
alma arde dentro de mí al ver cómo se ha usado el dinero
para consumir, no para producir. ... {4MR 141.6}.
A estas fechas,
deberíamos tener un edificio grande y bien construido,
con terreno circundante en una hermosa localidad, donde
pudiéramos cooperar con Dios en el cuidado de la
humanidad enferma y sufriente. Por medio de esta obra,
junto con el ministerio del evangelio, brillaría la luz
de la verdad. La gente que vive en ignorancia tendría la
oportunidad de relacionarse con los principios de salud,
y muchos serían conducidos a practicar la autonegación
esencial para la salud del cuerpo y la claridad de la
mente, y serían llevados a comprender lo que es la verdad
para estos últimos días. Esta es la obra que debe
hacerse. ... {4MR 141.7}.
Nuestra escuela en Australia ha
sido establecida y llevada adelante con un fuerte sacrificio financiero. Si
algunos de los recursos absorbidos por la misión de
Chicago y empresas similares hubiesen sido destinados a las
necesidades de las instituciones designadas por Dios mismo en este nuevo campo, el Señor
habría sido glorificado mucho más, pues entonces
habríamos recibido recursos para impartir a otros. {4MR
142.2}.
Por medio del trabajo en las escuelas y los sanatorios, la luz del
evangelio habría penetrado cerca y lejos con rayos de
luz claros y duraderos. La luz de Dios habría sido como una ciudad
asentada sobre una colina. Si la enseña de la verdad
puede alzarse
en las instituciones educativas y en sanatorios para los
enfermos, en las islas del mar y en muchos países, se habría
logrado más en traer almas a la verdad de lo que se habría
conseguido con todos los otros métodos que pudieran
haberse inventado. {4MR
142.2}.
Hay muchas comunidades
en que todos
están en humildes circunstancias, en que faltan muchos de los
refinamientos, muchas de las comodidades, y hasta muchas de aparentes necesidades de la
vida. Pero cuando la verdad sea recibida por estas personas, ¡qué cambio se
efectuará! El tabaco se considera como un gasto innecesario, y
como un perjuicio para la salud. Es descartado, y el
dinero así ahorrado se usa para pagar maestros que instruyan
a los niños, para que puedan ser criados en la educación
y la amonestación del Señor. {4MR 142.3}.
Muchos de los que no
conocen la verdad están llegando a entender que su
adiestramiento y su enseñanza en las escuelas dominicales no
llevarán a cabo la obra que es esencial para esta época. La verdad presente debe
llegar a la gente. Necesitan la verdad bíblica, la verdad especial
para esta época. Nuestras iglesias deben ser templos vivientes para Dios; cada una de las piedras
que componen el templo debe ser una piedra viva, que
emite luz. {4MR 143.1}.
A menudo, el mayor bien
se logrará con las reuniones de campo. En la mayoría de los
casos, éstas deberían durar dos o tres semanas. Estas
reuniones deben ser dirigidas para que se conviertan en
lecciones objetivas de nitidez, orden, y buen gusto; y
al mismo tiempo, debe haber una cuidadosa preocupación por la
economía. En estas reuniones, la verdad es presentada
ante las
personas
que jamás entrarían en una iglesia, y muchos son
convencidos de pecado y convertidos. {4MR 143.2}.
En todo lugar en que
los creyentes se crían, deberían construirse iglesias humildes.
... {4MR 143.3}.
El origen de todo lo que está involucrado
en el esfuerzo de reuniones de campamento no puede ser jamás hallado. Dios está
llamando a las almas, y debemos estar listos a recoger
la cosecha tan pronto comienza la obra del ministerio. La amonestación debe
ser entregada por cada alma convertida. Esta es la obra
misionera que debe hacerse. El dinero debe invertirse,
no en costosos edificios, sino en los mejores métodos para
alcanzar y salvar al mayor número de almas para Cristo
Jesús. {4MR 143.4}
El ministerio no debe
ser menospreciado mi criticado. Los hombres nombrados
para el ministerio no deben ser censurados porque no se dedican en cuerpo y
alma a lo que se describe como obra médica misionera. Dios ha dado a cada
persona su trabajo. No es deber de los ministros hacer
lo que usted hizo. Si lo hicieran, robarían a los campos destituidos y sufrientes que tienen
tanto derecho a la ayuda como las personas en la impía
ciudad de Chicago. Hermano John, es su deber respetar el ministerio tan
plenamente como usted cree que su propio trabajo debe ser respetado. {4MR
143.5}.
[Nota del
editor: El párrafo que antecede proporciona prueba de que Ellen White sí lo acusó
de "robar",
al decir que, si todos los otros ministros hicieran lo
que él -
el Dr. Kellogg - hizo, habrían robado a los campos en el
extranjero al gastar el dinero de aquéllos en Chicago. Es como
decir que
el Dr. Kellogg robó].
Si usted hiciera lo que le place, se retiraría dinero
de la tesorería para sostener las empresas de su
creación, hasta que las misiones a las cuales Dios ha
asignado una obra especial quedarían privadas de las instalaciones para
llevar a cabo esa obra. -- Carta 33, 1900, pp.
2-8. (A J. H. Kellogg, febrero 27, 1900).
Descuidar la misma obra
que Dios le ha encargado y ocuparse de una obra que Él no ha designado no es idea del Señor,
sino suya, de usted. Usted no puede llevar a cabo en Chicago la obra
que ha estado ejecutando, y llevar a cabo aceptablemente la obra
que el Señor le ha encomendado. De nadie que crea que
estamos
llevando al mundo el último mensaje de misericordia le requiere
Dios que transite por el terreno por el cual usted está
transitando. -- Carta 33, 1900, p. 8. (A J. H.
Kellogg, Feb. 27, 1900). {2MR 241.2}.
1900 -
MARZO 10
Fuente - Ellen White, Carta #41 al Dr. J. H. Kellogg (desde
Australia).
Naciones que esperan la luz. -- A los que suponen que el
Señor les ha encargado la obra de ocuparse de la
promiscua masa de parias, que se han arruinado a sí
mismos, muchos de los cuales continuarán haciendo lo que
han hecho en el pasado, subsistiendo al mismo tiempo con
dinero que les han entregado los Adventistas del Séptimo
Día, les dice el Señor: ¿Quién les asignó esta obra?
Hay pueblos y
naciones que todavía no han recibido la luz para esta
época. El mensaje del evangelio ha de ser exaltado y ha
de ser de largo alcance. {WM 260.2}.
A cada lugar en que se
proclama el
mensaje, los obreros misioneros deben ir con la Biblia en la
mano. Las almas deben ser convertidas y establecidas en
la verdad. Debe construirse una casa de reuniones. La
luz debe
brillar en los creyentes; ellos deben ser como una ciudad asentada
sobre un monte. En ese lugar, la iglesia debe ser
testigo de lo que la verdad puede hacer. Carta 41, 190.
[Nota del editor: Tal como nos lo entregó la
fuente, este extracto de la referencia de la Carta 41 no
está claro. Todos los otros extractos de la Carta 41
tiene una designación MR, como lo hacen el anterior y el
que sigue].
Los Adventistas del Séptimo Día tienen
una obra especial que hacer en la construcción de sanatorios en
nuestro mundo, según lo exija la necesidad. Estos
edificios deben ser pequeños o grandes, según sea apropiado
en la situación y las circunstancias que la rodean.
Nuestra obra debe ser agresiva y llevada a todo el
mundo. ...{1MR 224.2}.
La obra del pueblo de
Dios es iluminar el mundo, según las instrucciones dadas en el
capítulo cincuenta y ocho de Isaías. Allí está presentado el plan de trabajo que
debe llevarse a cabo en todo lugar en que la verdad se apodera de las mentes y los corazones.
En relación con la proclamación del mensaje, debe hacerse la obra de aliviar
las familias que están en aflicción. Los que toman su posición al lado del Señor
deben ver en los Adventistas del Séptimo Día a un pueblo afectuoso, que se niega a sí mismo,
que alegre y gozosamente ministra a los necesitados. Hay que ayudar
especialmente a los que sufren porque han tenido el
valor moral de aceptar la verdad. Debe prestárseles
atención a los que han sido expulsados. {1MR 224.3}.
Pero la obra de hacer provisión para todos
los necesitados,
todos los borrachos, y las prostitutas no ha sido
asignada por el Señor a los Adventistas del Séptimo Día, y
nunca lo será. ... {1MR 224.4}.
Dios ha dado
instrucciones de que los sanatorios deben ser establecidos en diferentes lugares. Estas instituciones deben ser
sus agencias para alcanzar a una clase de personas que
no pueden ser alcanzadas de ninguna otra manera. Es estos instrumentos, la luz de la
verdad debe brillar intensamente. ... {1MR 224.5}.
El sanatorio debe ser
el recuerdo,
un testigo
de la
eficacia de la verdad. Los que vienen a la institución deben ver
que, en el temor del
Señor está el principio de la sabiduría. Cuando el estandarte de
la verdad ya no sea el estandarte honrado y respetado de la
institución, el Señor retirará de la institución su
poder limitante. Carta 41, 1900, pp. 3, 5, 7, 9. (Para el Dr. y la Sra. J. H. Kellogg,
Marzo 10, 1900). {1MR 225.1}.
Si las instituciones
establecidas han de ser dirigidas, como se ha dicho, con un plan no
denominacional, ¿qué tienen que ver los Adventistas del Séptimo Día
con esta obra? Los Adventistas del Séptimo Día tienen una obra especial que
llevar a cabo de construir sanatorios en nuestro mundo, según
lo demande la necesidad. ... {2MR 241.3}.
Usted casi ha ignorado
el mensaje del tercer ángel. Ha menospreciado la obra
del ministerio del evangelio, mientras que ha hecho la
obra médica misionera desproporcionadamente importante.
Ha debilitado donde
debío haber
fortalecido. Usted no soporta ninguna restricción. Si
hubiese podido,
habría decidido poner a funcionar la obra que había
planeado, pero esta obra Dios nunca lo puso a hacerla.-- Carta 41,
1900, pp. 2, 3, 4. (Para J. H. Kellogg, Marzo 10, 1900).
1900 -
JUNIO-JULIO Fuente - Declaración de 1908 de Merritt G.
Kellogg: Merritt G. Kellogg visita a Ellen G.
White en su casa de Australia. Él dice que comentaron las
actividades del Dr. J. H. Kellogg en Chicago, y dice que
ella le mostró un artículo de periódico de hacía varios
años que hablaba de la gran obra que el Dr. Kellogg estaba
llevando a cabo a favor de los pobres de Chicago con sus
propios fondos y los del Sanatorio de Battle Creek.
Informa que le explicó a ella que los estatutos del
Sanatorio de Battle Creek no permitía que sus fondos se
usaran fuera del estado de Michigan. Ellen le muestra un
artículo de periódico que él cree, pero no
está seguro, que había aparecido en el New York Observer
hacía varios años. Ella le asegura que, en las palabras de
Merritt Kellogg, "su
hermano ha estado gastando vastas sumas de dinero en la construcción de
edificios y
llevando adelante una obra en
Chicago que Dios nunca le mandó que hiciera".
1900 - AGOSTO 29
Ellen White sale de Australia y viaja por mar
hacia Estados Unidos.
1901 - Fuente -
Urantia:
John Harvey Kellogg publica Rational Hydrotherapy [Hidroterapia
Racional], un resultado de veintisiete años de
investigación. Un libro principalmente para doctores, es
reconocido como el único y más importante tratado sobre el
tema. Todavía en 1960, la Clínica Mayo reporta estar
usándolo.
La Misión Médica de Chicago es sostenida por
donaciones privadas. Sólo un décimo de la Misión Médica de Chicago
es sostenida por donantes Adventistas; el resto
proviene de la venta de Life Boat Magazine y contribuciones
privadas.
Los líderes
de la iglesia trasladan el Battle
Creek College a Berrien Springs, Michigan, privando al
Sanatorio de la fuerza de trabajo de medio tiempo
compuesta por estudiantes de pre-medicina.
William y Lena Sadler se mudan al área de la
bahía de San Francisco para estudiar medicina en el Cooper Medical
College, situado entre las calles Clay y Webster,
en San Francisco. El tío de Lena Sadler, el Dr. Merritt
Kellogg, un doctor Adventista del Séptimo Día, reside en
el área de la bahía. El
financiamiento
de la Misión Médica de Chicago comienza a declinar, obligando al Dr. Kellogg a sufragar una
porción cada vez mayor
de los costos con sus ingresos personales procedentes de la fábrica
de alimentos.
1901 - Abril 2 hasta Abril 23 -
La Conferencia General está en sesión. Ellen White está presente, y se discute
acerca de un buen edificio para el colegio médico en
Chicago. Ella apoya
el plan de
buena gana.
(Fuente = El Dr. Charles E. Stewart en su "Libro Azul").
1901 - Abril
17, 1901 - En la sexta reunión de la I. M. M. B.
A., abril 17 [1901] (Véase Gen. Conf. Bulletin, p. 341), se hacen
planes aun más definidos para obtener fondos para la
construcción de edificios para el colegio médico. Willie White, hijo de Ellen White, está presente y declara que
está completamente a favor de tener un edificio para el
colegio médico:
W. C. White: "Estoy intensamente
interesado en nuestras escuelas. En ninguna estoy más interesado que
en el Medical Missionary College. Nuestras escuelas
deberían tener sus propios edificios sin ser alquilados.
Por consiguiente, propongo
una
resolución: "Se resuelve: Que procedamos a recoger fondos para
construir los edificios necesarios para el American Medical
Missionary College. Propongo que se adopte esta resolución".
1902 - FEBRERO 18 - Fuente - Urantia: El 18 de febrero de 1902,
un incendio destruye por completo el edificio principal, el hospital de caridad, y varios edificios adyacentes
del Sanatorio. El 12 mayo de 1902, diez mil
personas se reúnen para una detallada ceremonia de poner
la piedra angular. El Sanatorio solicita que la ciudad lo
declare exento de impuestos sobre la propiedad. Aunque
gente rica y famosa frecuentaba las instalaciones, el
Sanatorio abre los libros al gobierno de la ciudad para
mostrar los modestos salarios que han recibido todos los
empleados, desde el Dr. Kellogg para abajo, hasta los
ayudantes. Los investigadores están sorprendidos por el
número de casos de caridad tratados en el Sanatorio.
1902 -
John Harvey viaja a Europa.
1902 - (MAYO 11) Fuente = A Sword of Fire Hung over
Battle Creek, tomado de The Cornflake Crusade, por Gerald Carson, páginas 129-139, copyright 1957, Rinehart &
Company, Inc., New York y Toronto, Biblioteca del Congreso Catalog
Number 57-9631: El edificio principal del nuevo
Sanatorio de Battle Ceek es dedicado con una ceremonia de
gala de tres días de duración. Los Adventistas niegan un
relato del New York
Tribune, que llevaba este enbezamiento: DYNAMITE
ASCENSION DAY [Día de la ascensión dinamita]. Planeado por
estos Adventistas, pero la trama fue descubierta por medio
de una carta de advertencia. En otro artículo de
periódico, el Battle
Street Journal, una carta anónima había sido
enviada a los oficiales del Sanatorio para que buscaran
una bomba, y se hallaron dos tacos de dinamita en el tubo
que suplía gas al edificio.
1902 - JUNIO -
Fuente - Charles Stewart: El Dr. Charles Stewart
documenta que a Ellen White ahora se le ha "mostrado" que
la visión que tuvo en Australia hace algunos años era sólo
una lección objetiva.
Dr. Stewart: En su testimonio,
dado en Junio de 1902, usted dice lo siguiente:
"Algún tiempo después
de esto, se me mostró que la visión [concerniente a la construcción de edificios
en Chicago, que había sido dada tres años antes]. ...
era una lección objetiva para nuestro pueblo, advirtiéndole que no
invirtiera
mucho dinero de sus recursos en la propiedad de Chicago,
ni en ninguna otra ciudad".
1902 - DICIEMBRE 13 - Diez meses
después del incendio del Sanatorio, The Review and Herald,
la gigantesca casa publicadora de la Iglesia en Battle
Creek, se consume hasta los cimientos. La mayoría de los
Adventistas ve las dos calamidades como juicio divino. Con
la mudanza del College de Battle Creek y los dos
incendios, había comenzado la descentralización del
Adventismo en Battle Creek.
1903 - MAYO 18 - Fuente = Carson:
El nuevo Sanatorio de Battle Creek se incendia nuevamente,
pero esta vez, sólo los establos arden, con la pérdida de
13 caballos y un paciente de caridad.
Fuente - Urantia: Mayo 31: El nuevo Sanatorio
de Battle Creek queda terminado completamente. [Téngase presente que, el 11 de mayo de ese año, sólo el edificio principal
había sido terminado]. Muchos
Adventistas creen que Battle Creek es un lugar peligroso
para jóvenes Adventistas, y temen que sus hijos puedan
perder la fe en la inspiración de Ellen White.
John Harvey Kellogg pierde la patente de
alimentos cereales en hojuelas. John Harvey comienza a
creer que es mejor que venda algunas de sus creaciones
alimentarias por una suma redonda porque, si no, de todas
maneras se las van a piratear.
Will y Lena Sadler regresan de San Francisco el
14 de diciembre para continuar sus estudios médicos en el
American Medical Missionary College en Chicago y trabajar
tiempo parcial en la Misión Médica de Chicago según lo
permitan sus estudios.
William S. Sadler habla en la Convención de
Jóvenes de West Michigan en Battle Creek el 31 de
diciembre de 1903, tomando como lema el texto: "Si oyereis
hoy su voz". Se hizo énfasis muy oportunamente en la
necesidad de una definida consagración. La respuesta fue
de todo corazón. Como ciento cincuenta buscaron la
victoria en poder sobre el pecado. Muchos consagraron sus
vidas para un servicio completo". El día de año nuevo, los
delegados son llevados al Hogar Haskell (para huérfanos),
cordialmente invitados al hogar del Sr. y la Sra. J. H.
Kellogg, al American Missionary College, y al Sanatorio de
Battle Creek. Concluyen con vísperas en el gimnasio y una
charla por el Dr. John Harvey Kellogg.
1903 - Fuente: Nation Master Encyclopedia, Artículo "William S. Sadler":
Sadler, atrapado en la lucha entre los que apoyan a Ellen
White y sus oponentes, es despojado de todas sus
atribuciones administrativas en la Iglesia Adventista del
Séptimo Día.
1903 - AGOSTO 10 - A instancias
de Ellen White, la Conferencia General de los Adventistas
del Séptimo Día se traslada de Battle Creek, Michigan, al
área de Washington, D. C.
1903 -
OCTUBRE -
Fuente - Dr. Charles Stewart: Ellen White escribe
al Dr. Harvey Kellogg acerca de la visión que tuvo en
Australia, y admite que, cuando tuvo la visión, creía que
los edificios ya se habían construido.
De un testimonio de Ellen White para el Dr.
Kellogg fechado el 28 de Octubre de 1903 en Elmshaven, en
el Sanatorio, Calif., citamos lo que sigue, refiriéndose a
una visión anterior que ella afirmaba haber tenido en
Autsralia:
"En visiones de la
noche, se me presentó la imagen de un gran edificio
que yo pensaba que
había sido construido, y le escribí a usted inmediatamente
con respecto a este asunto. Después me enteré de que el medificio
que yo había visto no había sido construido". Pero
ningún mortal me había escrito ni me había dicho que
este edificio había sido construido. Me fue presentado
en visión.
1904 - Fuente: Urantia - Mr.
Peddicord dona una propiedad de 160 acres en el condado de
La Salle, como a 80 millas de Chicago,el cual se usa para
cultivar frutas y vegetales para la Misión de Chicago.
Se obtiene la propiedad del Sanatorio de
Hinsdale por medio de la donación del Sr. C. B. Kimball.
Los Sadler hacen un viaje fuera del país. Visitan
Alemania, entre otros países.
1904 - Fuente:
Declaración de Merritt G. Kellogg - 1908: Merritt
G. Kellogg informa que habló con Ellen White acerca de la
injustificada crítica de ella contra el libro del Dr.
Harvey Kellogg, The
Living Temple,
que ella había criticado acremente, afirmando que Dios le
había dicho que impidiera su publicación. El Dr. Merritt
le dice a ella que ha leído el libro cuidadosamente varias
veces y que no encontró en él ninguna teología diferente
de la que había visto en varios de los libros de ella. Él
dice que la Iglesia quería impedir que el Dr. Kellogg
vendiera su libro porque su venta habría perjudicado la
venta de los libros de la propia Ellen White, y reducido
los ingresos de ella por medio de las regalías de la venta
de su propio libro sobre el mismo tema. Merritt Kellogg
informa que Willie C. White, el hijo de Ellen White,
informa que los ingresos de su madre por la venta de su
propio libro sobre el tema de la vida saludable es
aproximadamente de $5,000 por año. (Véase 1908).
1904 - (CIRCA) Fuente: Declaración de
Merritt G. Kellogg - 1908: Merritt Kellogg
informa que un hermano Osborne, de la Conferencia General,
le dijo que un comité especial de la GC se había reunido
para planear cómo destruir al Dr. Kellogg, y que él había
sido presidente de ese comité. El hermano Obsorne le dijo
que el comité había decidido una estrategia triple: (1)
declararlo panteísta; (2) paralizar el Sanatorio haciendo
circular historias infamantes acerca del Dr. y sus
ayudantes, y (3) cortar su suministro de estudiantes,
ayudantes y enfermeras [trasladando el College fuera de
Battle Creek a Berrien Springs]. Además, Merritt Kellogg
dice que este plan fue puesto por escrito y enviado a
Ellen White de modo que algunos artículos fueran enviados
al Review & Herald para su
publicación.
1905 - Fuente: Urantia -
Kellogg le confía a un antiguo asociado que él había
anticipado la probabilidad de un eventual rompimiento
entre él y la iglesia hacía quince años, y que se había
estado preparando para esta probabilidad desde hacía diez
años. Por esa razón, escrbió, había insistido en mantener
el sanatorio como "una corporación privada, separada, e
independiente".
El doctor contrata a algunos de sus asociados
del sanatorio para que presenten veintiocho seminarios de
salud en varias asambleas en Chautauqua durante la
estación de 1905.
Fuente: Nation Master Encyclopedia, Artículo "William S. Sadler: Sadler
abandona la Iglesia Adventista del Séptimo Día
1906 - Fuente:
MS 33, 1906 (copiado del MSS del Dr. Stewart de Junio 5, 1905) - En el
párrafo #3, Ellen White dice:
"Poco después
de que terminara la reunión, el juez Arthur y su esposa
pasaron parte del día en mi casa. Tuvimos una conversación
muy agradable y fructífera. Entre otras cosas, comentamos
el asunto de la
representación
que se me había dado de un costoso edificio en la ciudad
de Chicago, usado por varas clases de obra médica misionera. Yo relaté
cómo, cuando
estuve en Australia, se me mostró un gran edificio en
Chicago el cual, con su construcción y su equipo,
había costado una gran suma de dinero. Se me mostró el
error de invertir dinero en edificios como éste en
nuestras ciudades".
1906 - Fuente - Urantia: - John Harvey Kellogg
organiza la American Medical Missionary Board y la dota de
cinco mil acciones de la Toasted Corn Flake Company y le
encarga llevar a cabo, de una manera completamente no
sectaria, las actividades que anteriormente habían sido
patrocinadas por la Asociación Médica Misionera y de
Benevolencia Adventista del Séptimo Día. La AMMB financia
la publicación fallida de "Good Health". La AMMB patrocina la Conferencia Médica
Misionera anual en el Sanatorio para estimular las misiones médicas
en el extranjero entre las denominaciones evangélicas.
El auge en
el consumo de cereales preparados para el desayuno aportó suficientes fondos
para completar el financiamiento del nuevo Sanatorio.
Creyendo que las restricciones que John Harvey
Kellogg había impuesto sobre propaganda estaban limitando
las ventas, William Keith Kellogg persuade a su
hermano de que transfiera sus derechos de producir
Corn Flakes a una compañía independiente. Se funda la Battle Creek Toasted Corn Flake Company con
ayuda financiera de C. D. Bolin. William Keith es
presidente de la compañía y CEO [Chief Executive Officer].
Will insiste en que
su hermano, John Harvey, reciba una generosa compensación enla forma de
acciones de la compañía, a condición de que John Harvey no
tenga ninguna participación en la administración de la compañía.
William Keith Kellogg pone su firma a través del frente de
cada caja de hojuelas tostadas.
William S. Sadler es secretario general de la
facultad de la Escuela
de Adiestramiento Médico Misionero del
Sanatorio Hinsdale, que inicia su segundo curso
anual de estudios. La escuela tiene 450 horas dedicadas a
doctrina bíblica y al estudio del Mensaje del Tercer
Ángel. Los diplomas de esta escuela son reconocidos por
todos los estados para la práctica de la enfermería. El
Sanatorio está situado en medio de dieciséis acres de
bosque en Hinsdale, Illinois.
1906 - Fuente:
Kaspersen: Ellen G.
White - The Myth and the Truth, Capítulo 5,
"Pantheism and
the Alpha of Apostasy": Pacific Press, la casa
publicadora Adventista del Séptimo Día, se consume hasta
sus cimientos. Ellen White pierde varios miles de dólares
en obras de arte por las cuales había pagado a artistas de
New York por ilustraciones que serían usadas en sus
libros. Kaspersen observa que, de allí en adelante, Ellen
White no tuvo mucho que decir acerca de incendios como
juicios de Dios.
Fuente:
NationMaster
Encyclopedia, Articulo,
"William S. Sadler": Sadler es excomulgado por la
Iglesia Adventista del Séptimo Día.
1907 - Fuente - Urantia: John
Harvey Kellog viaja con el Dr. James T. Case a San.
Petersburgo, Rusia, a observar los experimentos del
psicólogo ruso Pavlov.
John Harvey Kellogg es expulsado de la Iglesia
Adventista del Séptimo Día. Hay alguna evidencia de
fuentes Adventistas de que, en décadas futuras, el Dr. J.
H. Kellogg se apartó del cristianismo ortodoxo y, en
realidad, puede que haya adoptado una posición cristiana
definidamente panteísta. El Dr. Sadler, a solicitud de una
mujer cuyo esposo había comenzado a actuar de manera
extraña mientras dormía, le pide al Dr. Sadler que
investigue. Él está convencido de que el hombre está
canalizando espíritus, y éste se convierte en "sujeto
durmiente" (véase el artículo de la Enciclopedia
NationMaster sobre el Dr. Sadler para este hecho en
particular). El Dr. William S. Sadler, teniendo amplia
evidencia de que las visiones de Ellen White procedían de
fuentes diferentes de la de Dios, abandona la Iglesia
Adventista del Séptimo Día y comienza a investigar y a
escribir acerca de la "canalización" de espíritus. Los Documentos de Urantia
dicen que, hasta donde su organización puede establecer,
el Dr. Sadler comenzó a juntar el material para un libro
sobre canalización que finalmente se publicó en 1955 y se
llamó el Libro de
Urantia. El libro pretende contar la "verdadera"
historia del cristianismo y afirma tener un mandato de los
espíritus que comunicaron la historia para llevar al mundo
la "correcta" versión del cristianismo.
1908 -
El Dr. Merritt G. Kellogg, un noble líder cristiano
Adventista del Séptimo Día y misionero, proporciona una
declaración que trata del ocultamiento de la falsa visión
de Ellen White sobre los edificios de Chicago, revela un
escándalo que rodea la oposición al libro del Dr. Harvey
Kellogg, The Living
Temple, y el hecho de que, en realidad, Ellen
White no escribió muchos de sus libros. El Dr. Merritt
atribuyó credibilidad indirectamente a la afirmación de
Fannie Bolton de que ella había escrito el libro de Ellen
White, Steps to Christ [El Camino a Cristo].
Para resumir, he llegado a la conclusión de que la
persecución y la expulsión del Dr. J. H. Kellogg se
debió principalmente a la metedura de pata de la Sra.
White al enviarle un corto testimonio de reproche, acusándole de haber hecho
cosas que no había hecho, y en segundo lugar, al temor de que
el doctor
usara esta falsa visión contra ella para perjudicar su influencia en la
denominación y contra su afirmación de ser la vocera de Dios para su pueblo. Y
en tercer lugar, al temor de que, si el Dr. no era humillado, aplastado, o
expulsado de la Iglesia, como lo fue Nabucodonosor de entre los hombres, él, con su su gran
habilidad organizativa, lograría finalmente que los
vendedores ambulantes dejaran de vender los libros de la
hermana White y vendieran en su lugar los libros de él,
y de esa manera afectar las regalías de la venta de sus libros.
1911 - Fuente - Urantia:
El Dr. William S. Sadler, que, antes del fiasco de la
visión de Ellen White sobre Chicago, la defendía con mucha
energía, comienza a presentar discursos en público sobre
las varias fases de los fenómenos y la filosofía del
espiritismo.
1915 -
Muere Ellen White. Su propiedad está profundamente
endeudada porque ella vivía más allá de sus ingresos,
mayormente por haber conservado todo un equipo de
asistentes y escritores en su mansión de Elmshaven, cerca
del Sanatorio de St. Helena y el Pacific Union College en
el norte de California. La Iglesia Adventista del Séptimo
Día se endeuda para adquirir la propiedad de ella, pagar
sus deudas, y adquirir sus derechos de publicación.
1922 - Fuente:
A Sword of Fire Hung Over Battle Creek (Gerald Carson),
pp. 129-139: La Iglesia del Tabernáculo de Battle
Creek [la Iglesia ASD] se consume hasta los cimientos en
un incendio, sólo siete años después de la muerte de Ellen
White. El periódico Detroit News expresó este punto de
vista sobre el incidente:
Aunque la idea de que el
incendio fue el cumplimiento de la profecía de la
"espada llameante" de la Sra. Ellen White, fundadora de
la denominación, fue objeto de burla hasta cierto punto,
se ha señalado que este [el incendio del Tabernáculo]
era el décimotercer gran incendio en el extremo
occidental de Battle Creek, y que todos los edificios,
menos uno, que era parte del grupo Adventista en el
tiempo en que la Sra. White tuvo lo que se pretendía que
fuese una visión, han sido víctimas del dios del fuego.
Calendario Separado
CÓMO FINANCIABA EL DR.
KELLOGG SUS OPERACIONES EN CHICAGO
Compilado por Kerry
Wynne
El Dr. Harvey Kellogg dijo que Ellen White lo
reprendió por haber financiado sus proyectos de Chicago
con dinero malversado del Sanatoro de Battle Creek. No
sólo es esto interesante porque los estatutos del
Sanatorio prohibían que se usaran sus fondos para
proyectos fuera del estado de Michigan, sino porque era
razonablemente bien conocido cómo financiaba el Dr.
Kellogg sus proyectos en Chicago. La vasta mayoría de su
financiamiento provenía de donaciones de personas
adineradas, iglesias de muchas denominaciones del área de
Chicago, suscripciones a su revista sobre la salud, y
dinero de sus propias empresas comerciales - especialmente
su compañía de fabricación de alimentos para la salud. Las
cartas entre Kellogg y Ellen White demuestran que él la
mantenía a ella bien informada sobre sus operaciones en
Chicago. Hasta compartía con ella sus preocupaciones
financieras cuando las experimentaba.
Un calendario separado enfocado en cómo Kellogg
financiaba sus operaciones médico-misioneras en Chicago
hasta el momento en que Ellen White lo acusó de malversar
dinero del Sanatorio de Battle Creek para financiarlas,
demuestra lo absurdo y lo injusto de aquella acusación:
1893 -
Henry y Wessels [sic] le entregan $40,000 a Kellogg. Son
Adventistas del Séptimo Día relativamente nuevos, cuya
fortuna procedía del descubrimiento de una mina de oro en
su propiedad de Sudáfrica.
1893 - La
Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día,
usando la donación de los hermanos Wessel, establece la
Asociación Adventista Médica Misionera y de Benevolencia
para financiar el costo de sus operaciones en Chicago para
los pobres, y nombra a Kellogg presidente de la
asociación.
1893 (MAYO) - La Asociación
compra una propiedad en College Place #26 y la establece
como la sucursal del Sanatorio de Battle Creek en Chicago.
El Sanatorio es patrocinado por una variedad de clientes
de paga, incluyendo a los ricos, y pronto el Dr. Kellogg
decide que él tiene los recursos para iniciar una obra de
benevolencia entre los pobres de Chicago (Battle Creek
Daily Journal, abril 24, 1893, citado en Schwarz).
1893 (JUNIO 25) - Kellogg
busca, pero no puede hallar, un edificio apropiado para la
misión de Chicago, así que negocia un trato con Henry
Monroe, superintendente de Pacific Garden Mission, para
compartir instalaciones en la oficina principal de la
Misión, situada en 98-100 West Van Buren Street.
1893-1894 (CIRCA) - Poco
después de inaugurar la segunda ubicación de la misión,
Kellog comienza a anunciar en el Advent Review and Sabbath Herald y el Medical Missionary su solicitud
de que los Adventistas le envíen ropa usada en buen estado
para la misión.
1895
(PRIMAVERA) - El Dr. Kellogg comienza a anunciar
en publicaciones Adventistas un programa especial para
recoger dinero para su obra médica misionera en Chicago.
Pide a los Adventistas que dediquen una porción de sus
terrenos para un jardín y que donen al programa de Chicago
lo que cobren por la venta de lo que produzca el terreno.
Ofrece comprar semillas para los Adventistas que tienen
terrenos pero no tienen con qué comprar semillas. Medical
Misisonary V (Abril, 1895):112; VI (Abril, 1896): 109; Adventist Review and Sabbath Herald
LXXIII (abril 21, 1896) : 250-251.
1895 -
Un edificio de cinco pisos, situado en el número 1926 de
South Wabash Avenue y que había sido adquirido en 1885, se
convierte en el American Medical College. Primera
matrícula de 04 estudiantes ocurre en septiembre. Los
costos operativos de la escuela son compartidos
conjuntamente por la Asociación Médica Misionera y de
Benevolencia y el Sanatorio de Battle Creek.
[Nótese
que éste es el antiguo Sanatorio de Battle Creek que más
tarde se incendió, algunos años más tarde. Los estatutos
originales del San, que expiraron en 1897, no especificaban que sus fondos sólo
podían ser usados dentro del estado de Michigan. Los
nuevos estatutos, redactados en 1897, sí requerían que los fondos del San sólo podían usarse dentro del estado de
Michigan. De este modo, los nuevos estatutos
gobernaronel dinero del
San por
varios años mientras el San ocupaba el antiguo edificio, que se quemó en 1902,
y continuaron
gobernando sus operaciones una vez que se construyó el nuevo
edificio].
1896 (VERANO) - Las
actividades de la Misión han excedido todas las
instalaciones, y se compró una antigua iglesia en el
número 42 de Custom House Place. Fue rebautizada con el
nombre de The Workingman´s Home [El Hogar del Trabajador].
1896 -
Kellogg parece estirar la verdad a Ellen White acerca del
financiamiento de sus operaciones de Chicago. Citamos al
autor ASD, Richard W. Schwartz:
Kellogg había escrito a
la Sra. White en 1896: "Muchos tienen celos de nuestro trabajo porque el Señor parece haberlo hecho prosperar mucho, y
porque la ha estado pasando bien sin pedir ayuda". En realidad, por
supuesto, la Asociación Médica Misionea y de Benevolencia
estaba
apelando directamente a la membresía en busca de ayuda financiera".
1897 -
Kellogg escribe a Ellen White acerca de su obra en Chicago
y hace notar que es una lástima que una porción tan
pequeña del dinero recogido por la Iglesia Adventista del
Séptimo Día se haya usado para "hacer avanzar realmente la
causa de Cristo para el alivio y la salvación de de los
pecadores". (abril 27, tomado de The White Papers).
1897 -
Kellogg admite que sus esfuerzos para hacer que la Misión
de Chicago sea autosostenible y no dependiente de apoyo de
la Iglesia Adventista del Séptimo Día no han tenido éxito.
Reconoce eso hasta la fecha. (Documentación: The Chicago Medical Mission
and Allied Charities).
1898 -
El Dr. Kellogg prepara un manual para la obra de las
misiones entre ciudades, que hace énfasis en la
importancia de evitar diferencias doctrinales y trabajar
para salvar almas sin meterse en las diferencias
teológicas entre las denominaciones. (City Medical Missions
[Battle Creek, 1898], Kellogg Papers).
[Nota del
editor: Es muy
probable que el deseo de Kellogg de hacer de la Misión de Chicago un
proyecto inter-denominacional fue lo que minimizó las
singulares creencias de los Adventistas del Séptimo Día y lo puso
en un rumbo de colisión con Ellen White y la Conferencia
General].
Este calendario nos lleva hasta 1899, cuando
Ellen White escribió al Dr. Kellogg un testimonio
acusándole de construir un edificio con fondos malversados
del Sanatorio de Battle Creek.
En conclusión, si Dios fuera el "culpable" de
toda esta confusión, lo haría parecer como si no las
tuviera todas consigo cuando le "dio" a Ellen White su
visión sobre los edificios de Chicago en 1899. ¿Querría
Dios ser visto en una luz adversa a los ojos de una
comunidad entera de sus seguidores? ¿Querría Él azorar a
su "sierva" Ellen White, y hacerla parecer estúpida?
Después de todo, si ella era su vocera para los
Adventistas, ¿querría que ella fuera mirada con respeto
por su rebaño de creyentes del fin del tiempo? ¿Cuánts
veces se ha dicho que Dios no es autor de confusión? Como
hemos visto tantas veces antes, el hecho de que Ellen
White le haya dado crédito a Dios por cosas que Él no hizo
es una forma de blasfemia de cuello blanco. Dios lo sabe
todo y es omnipresente. ¡No comete errores! Contraste esto
con la manera en que Dios honró a su siervo Moisés delante
de los hijos de Israel. Dios no permitió ni una sola vez
que Moisés pareciera estúpido. Moisés se sintió azorado
una vez, pero fue su culpa.
Los resultados de nuestra investigación indican
que hay dos explicaciones para las manifestaciones
aparentemente sobrenaturales de Ellen White cuando estaba
en visión - canalización de espíritus versus
manifestaciones que son típicas de mujeres que habían
tenido la misma clase de lesión cerebral que ella
experimentó cuando era niña. Como lo hemos presentado en
capítulos anteriores, tanto sus seguidores como sus
críticos atestiguan el hecho de que, mientras estaba en
visión, ella demostró tener todas las apariencias de
control sobrenatural. Tenemos un testigo que vio una mesa
levitarse del piso en una de sus experiencias en visión.
¿Cuál explicación se ajusta mejor a los hechos?
Aparentemente, los que estaban más cerca de ella deben
haber pensado que la explicación de la canalización de
espíritus encaja mejor con los hechos porque un número
significativo de individuos que perdieorn la fe en ella
como profetisa bíblica parecían haber llegado a la
conclusión de que ella experimentaba con la canalización
de espíritus, y se volvió al espiritismo con la esperanza
de que los mensajes del mundo de los espíritus fueran
genuinos fenómenos sobrenaturales, pero no necesariamente
iban a ser exactos. Después de todo, los espiritistas
creen que hay espíritus "buenos" y "malos", y no se
sorprenden de que haya espíritus que les jueguen malas
pasadas. Además, notamos que, a menudo, Ellen White
describe lo que ella experimenta en visión de la misma
manera en que los médiums espiritistas describen lo que
ven en una sesión.
Poniendo junta toda la información que tenemos
sobre Ellen White y sus visiones, incluyendo su frecuente
uso de mentiras, engaños, y trampas para mantener la
apariencia de que tiene una conexión directa con Dios, la
respuesta más lógica al misterio de Ellen White es que era
una médium espiritista con fuertes conexiones con el
cristianismo, que estaba lo bastante engañada como para
creer que podía hacer mucho bien a favor de Dios si la
gente creia que ella era su vocera. Abreviando, ella llegó
a la conclusión de que el fin (el bien que ella podía
hacer a favor de Dios como profetisa en que la gente cree)
justifica los medios (trampas, engaños, y ocultamientos).