Cómo nació el 'Espíritu de Profecía'
Adventista del Séptimo Día

¡Prueba de que las frases "Se me mostró ..." fueron copiadas!

Walter T. Rea
Traducido

A mediados de la década de 1970, muchos otros y yo estábamos haciendo unos trabajos relacionados con los escritos de Ellen G. White, la profetisa Adventista del Séptimo Día. Lo que todos estábamos encontrando era preocupante, por decir lo menos. No se trataba de que otros antes que nosotros no estaban enterados de que los materiales en los escritos de ella, que aparecían bajo su nombre, habían sido copiados de otros autores. No se trataba siquiera de la cantidad. Si los que estábamos haciendo la investigación hemos contribuido algo al pensamiento y la erudición Adventista, fue la extensión del copiado del cual los miembros de la Iglesia como un todo no se habían enterado antes y que todos nosotros descubrimos. Esa cantidad era tan abrumadora que motivó al Comité Glendale de 1980, convocado para revisar la evidencia, a declarar que
  1. QUE RECONOCEMOS QUE, EN SUS ESCRITOS, ELLEN WHITE USÓ VARIAS FUENTES MÁS EXTENSAMENTE DE LO QUE SE HABÍA PENSADO ANTERIORMENTE.
  1. QUE, TAN PRONTO SEA POSIBLE, SE DESARROLLE UN PLAN PARA INFORMAR PLENAMENTE A LOS ADMINISTRADORES DE NUESTRA IGLESIA ACERCA DE LA NATURALEZA Y LA EXTENSIÓN DEL USO DE FUENTES POR PARTE DE ELLEN WHITE.
Debido a que, desde el comienzo mismo del Adventismo, otros dentro de la iglesia habían descubierto que la Sra. White había plagiado y lo habían dicho así, el hecho de que lo hiciera nunca fue seriamente puesto en duda por las autoridades de la Iglesia.

¿Cúanto fue plagiado?

La defensa de sus acciones, que se utilizó hasta nuestros días, fue que la cantidad era un punto importante, y que esa cantidad variaba desde el 8% hasta el 10%, dependiendo de a cuál apólogo leía uno o a cuál quería uno creerle. No fue sino hasta que la Iglesia contrató los servicios del Dr. Fred Veltman para que estudiase el libro El Deseado de Todas las Gentes que la cifra aumentó hasta el 30% o más, dependiendo de los capítulos seleccionados en el libro que uno estuviese usando. Después un gran gasto y casi ocho años, Veltman confirmó lo que otros estudios mostraban, que, dependiendo del material usado de los escritos de Ellen White, el copiado podría llegar hasta el 90%. En realidad, el Dr. Don McAdams, un erudito Adventista, había afirmado en la reunión de Glendale 1980 que "si cada uno de los párrafos del libro Great Controversy, escrito por Ellen White, hubiese tenido notas de pie de página correctas, entonces cada uno de los párrafos habría necesitado pies de página". Esa afirmación jamás ha sido cuestionada seriamente por ningún miembro de la Iglesia.

Está claro para cualquier erudito razonable que la Iglesia no ha atacado los verdaderos problemas que muchos estudios han revelado, ni han cumplido los oficiales de la Iglesia con su primer compromiso de que se mantendrían en contacto conmigo y de que informarían a la Iglesia cuáles son los verdaderos puntos en disputa. En lugar de eso, han continuado oscureciendo los temas del copiado y los plagios con otros temas menos importantes, como cuál es la correcta interpretación de la inspiración. La interpretación y hasta la idea de la inspiración son una palabra y un concepto acerca de los cuales los teólogos han argumentado y han debatido y a causa de los cuales hasta se han matado durante más de dos mil años. Los administradores o eruditos de la Iglesia Adventista todavía no han respondido a su propio erudito contratado, el Dr. Fred Veltman, cuando, después de terminar su estudio, preguntó por qué Ellen White había negado que había copiado alguna vez. Otro falso punto de desacuerdo que se trae a colación a menudo es que ella hizo lo que los escritores bíblicos hacían. Apenas vale la pena refutar el hecho de que se haya traído este punto a colación, por cuanto los Adventistas siempre han dejado en claro para el público en general, si no para la membresía en general, que ellos no consideran a Ellen White igual a o similar a los escritores bíblicos y sus obras.

Por supuesto, la Iglesia no quiere debatir ni discutir en público conmigo, ni con cualquier erudito que haya estudiado los escritos de Ellen White, el verdadero punto en desacuerdo. Pero ese verdadero punto de desacuerdo es grandemente discutido y debatido por eruditos de la Iglesia y honestos pensadores y miembros laicos que quieren saber la verdad con respecto a la Iglesia y sus escritos y el 'Espíritu de Profecía'. Por supuesto, el verdadero punto que hay que aclarar es: ¿Hasta dónde tuvieron los plagios en todos sus escritos una función humana y un origen humano, y cuánto de esos escritos eran de origen divino o un don sobrenatural de Dios, si es que lo eran? ¿Cuán digna de confianza es la información contenida en los libros publicados bajo el nombre de Ellen White? Un tema relacionado, dependiendo de cómo responde uno el primer punto, es qué clase de Dios adora la Iglesia Adventista del Séptimo Día. ¿Es un Dios que está por encima del engaño y la mentira, que no necesita las palabras de otros para poner ideas y pensamientos en la boca o la mente de otro, que ha sido copiado, o es un Dios que haría jugarretas y aplicaría juegos de inteligencia a sus criaturas?

Afirmaciones "Se me mostró ...", copiadas de otros autores

Este estudio, que yo llamo CÓMO LOS PENSAMIENTOS Y SUPOSICIONES DE OTROS ESCRITORES SE CONVIRTIERON EN ABSOLUTOS DE DIOS POR MEDIO DE ELLEN WHITE, mostrará que, cada vez que Ellen White decía: 'Se me mostró' para dar la impresión de que Dios estaba hablando por medio de ella, en realidad estaba copiando los pensamientos y las impresiones de otros, a menudo palabra por palabra, sin dar crédito a sus fuentes humanas. El estudio también mostrará que, a medida que copiaba, comenzando en el principio
mismo de sus escritos hasta el final mismo, hasta en sus 'testimonios' más serios y que algunos consideran 'sagrados', ella convertía las suposiciones y fantasías de aquellos escritores, de los que ella copiaba, en sus absolutos de Dios, como si ella estuviera obteniendo sus 'discernimientos' y su 'inspiración' de una fuente superior.

Después de cotejar las referencias que se dan y las copias presentadas, ninguna persona razonable podría argumentar seriamente, ni en público ni en privado, que 'Dios' tuvo algo que ver con un engaño tal. Si cualquier otro grupo o denominación en el mundo presentara tal información y tales escritos y éstos fuesen expuestos a la luz pública como lo muestra el estudio, los Adventistas del Séptimo Día serían los primeros en condenar el material como falso y gravemente defectuoso por lo que concierne a un Dios razonable. En realidad, los Adventistas hicieron exactamente eso en el libro The Great Controversy, que supuestamente fue comunicado por Dios al mundo por medio de Ellen White. El libro ataca a casi todos los sistemas religiosos en el mundo civilizado, pero deja en claro que Dios sólo aprueba a los Adventistas que creen, viven y practican lo que Ellen White, su profeta, dijo que Dios les dijo que creyesen. Si los Adventistas confesaran que se han equivocado al evaluar a la Sra. White y sus escritos, podrían pasar a un enfoque más sensible usando lo que ella escribió como instrucciones para su tiempo, por hombres y mujeres de su tiempo, alcanzando, tanto ellos como nosotros, un mejor entendimiento de Dios y cómo Él instruye a los hombres y mujeres de nuestro tiempo. Esto es lo que yo espero que este estudio logre para los que lo lean sin ira ni prejuicios.

Como ex-ministro de la Iglesia Advenmtista del Séptimo Día que fue relevado de sus credenciales eclesiásticas porque hizo saber sus hallazgos a la Iglesia y al público, lo que descubrí no hace vacilar mi fe en Dios o en su plan de salvación por medio de su Hijo Jesucristo. De hecho, deseaba alejar al Adventismo de muchos de sus puntos de vista fanáticos expresados a través de los "discernmientos" de Ellen White. Reconociendo el modo de pensar Adventista, habrá los que invocarán la ira de cielo contra mí y este estudio, como ha ocurrido siempre que alguien en el pasado o en el presente intenta cambiar el pensamiento de la gente en cualquier momento sobre algo. Quizás sea bueno citar a un autor bien conocido. M. Scott Peck y a su libro The Road Less Traveled [El Sendero Menos Transitado], p. 46.

¿Qué sucede cuando uno ha luchado duro y por largo tiempo para desarrollar un punto de vista funcional del mundo, un mapa aparentemente útil y factible, y luego es confrontado por nueva información que indica que ese punto de vista es erróneo y que la mayor parte del mapa necesita ser retrazado? El doloroso esfuerzo requerido parece espantoso, casi abrumador. Lo que nosotros hacemos con mayor frecuencia, y por lo general inconscientemente, es ignorar la nueva información. A menudo, este acto de ignorar es mucho más que pasivo.  Podemos denunciar la nueva información como falsa, peligrosa, herética, obra del diablo. Podemos de veras emprender una cruzada contra ella, y hasta tratar de manipular el mundo para hacerlo conformarse a nuestra visión de la realidad. En lugar de tratar de cambiar el mapa, un individuo puede tratar de destruir la nueva realidad. Es triste que, en fin de cuentas, la tal persona pueda gastar mucha más energía defendiendo un punto de vista anticuado del mundo que la que habría requerido revisarlo y corregirlo en primer lugar.

Lo que este autor está indicando es que se necesita más honestidad y valor para cambiar que para continuar creyendo una mentira White.

Es muy imparcial hacer la pregunta: ¿Recibió Ellen G. White, la profetisa Adventista del Séptimo Día, sus instrucciones, discernimientos, su información y su sabiduría de fuentes humanas o de revelaciones divinas y la inspiración, como se asegura?

Para ser tan objetivo como sea posible, es sólo imparcial y correcto presentar lo que la misma Ellen White decía en público y en sus escritos era la fuente de su material. Hay muchas de tales afirmaciones, pero sólo unas pocas son necesarias, por cuanto ninguna de sus declaraciones, desde el principio hasta el fin de su vida, varió jamás de la idea de que Dios estaba detrás de todo aquello. Cientos de 'se me mostró' fueron usados en sus primeros escritos, y no se dejó nunca ninguna duda de quién le mostraba qué. Era siempre un ángel de Dios o el Espíritu de Dios, no un hombre. Nótese lo siguiente:

"Dios hablaba por medio de la arcilla. Usted podría decir que esta comunicación era sólo una carta. Sí, era una carta, pero inspirada por el Espíritu de Dios, para poner ante su mente las cosas que me habían sido mostradas a mí. En estas cartas que yo escribo, en los testimonios que yo envío, yo le presento lo que el Señor me ha presentado a mí. Yo no escribo un solo artículo en el papel expresando meramente mis propias ideas. Ellos son lo que Dios ha abierto ante mí en visión -- los preciosos rayos de luz que brillan desde el trono ...". (Carta al Dr. Paulson; St. Helena, California, June 14, 1906, Selected Messages, pp. 24-37).

"Ustedes han, por tanto, insultado al Espíritu de Dios. Ustedes saben cómo el Señor se ha manifestado por medio del Espíritu de Profecía. El pasado, el presente y el futuro han pasado delante de mí ... si ustedes buscan hacer a un lado el consejo de Dios para complacerse a sí mismos, si disminuyen la confianza del pueblo de Dios en los testimonios que él les ha enviado, se están rebelando contra Dios tan ciertamente como lo hicieron Coré, Datán, y Abiram ... Dios estaba hablando por medio de la arcilla. Ustedes podrían decir que esta comunicación era sólo una carta. Sí, era una carta, pero inspirada por el Espíritu de Dios. Para poner delante de sus mentes las cosas que se me habían mostrado a mí. En estas cartas que yo escribo, en los testimonios que envío, les presento a ustedes lo que el Señor me ha presentado a mí. Yo no escribo un solo artículo en el papel, expresando meramente mis propias ideas. Ellos son lo que Dios ha abierto delante de mí en visión: Los preciosos rayos de luz que brillan desde el trono ...". (The Testimonies Slighted; Healdsburg, California, June 20, 1882, Testimony for the Church, vol. 5, pp. 62-70).

Y, sin embargo, a pesar de estas afirmaciones absolutas, inequívocas, lo que seguía en el siguiente párrafo y en varios después, fue, palabra por palabra, pensamiento tras pensamiento, oración tras oración, copiado de otro autor. Sin dar ningún crédito a ninguna fuente humana, dando la impresión a cualquiera que lo leyera de que todo procedía de 'lo que Dios ha abierto en visión' o 'las cosas que se me habían mostrado a mí', o 'inspirada por el Espíritu de Dios'. (Lea el libro de Walte Rea "La Mentira White" para ver estas comparaciones). Ciertamente, este es un concepto diferente del de 'visión o el Espíritu de Dios' que se le ha enseñado a la iglesia en el pasado.

Night Scenes in the Bible
Daniel March 1868-1870
Testimony for the Church, vol. 5, p. 68
Ellen G. White, June 20, 1882
No debemos diferir nuestra obediencia hasta que hayan desaparecido toda sombra de incertidumbre y toda posibilidad de error. La duda que exige perfecto conocimiento jamás dará lugar a la fe, porque la fe descansa en probabilidades, no en demostraciones ... debemos obedecer la voz del deber cuando hay muchas otras voces que claman contra él, y se necesita un gran cuidado para distinguir al que habla en nombre de Dios. Debemos abrigar el impulso de la conciencia en el momento en que nos insta a la acción, no sea que cesen sus instancias y quedemos abandonados a la ciega dirección del apetito y la pasión.
Si ustedes rehusan creer hasta que quede eliminada toda sombra de incertidumbre y toda posibilidad de duda, nunca creerán. La duda que exige perfecto conocimiento jamás cederá a la fe. La fe descansa en la evidencia, no en la demostración. El Señor requiere que obedezcamos  la voz del deber, cuando hay otras voces alrededor de nosotros que nos instan a seguir un curso de acción diferente. Se requiere sincera atención de parte de nosotros para distinguir la voz que habla en nombre de Dios. Debemos resistir y derrotar la inclinación, y obedecer la voz de la conciencia sin parlamentos ni concesiones, no sea que sus instancias cesen y el control lo ejerzan la voluntad y el impulso.
Testimony for the Church,
Vol. 3, p. 258, 1872-5
Carta al Dr. Paulson, Junio 14, 1906, Selected Messages, vol. 1, pp. 27-28
Se me mostró que Dios ha asignado una obra especial a mi esposo y a mí ... y que muchos diferirán su obediencia a la amonestación y la reprensión que se han dado, esperando hasta que toda sombra de incertidumbre sea eliminada de sus mentes. La incredulidad que exige perfecto conocimiento jamás cederá a la evidencia que Dios le ha complacido dar. Él requiere de su pueblo una fe que descanse en el peso de la evidencia, no en el perfecto conocimiento. Los seguidores de Cristo que acepten la luz que Dios les envía deben obedecer la voz de Dios que les habla cuando hay muchas otras voces que claman contra ella. Se requiere discernimiento para distinguir la voz de Dios.
Si usted rehusa creer hasta que toda sombra de incertidumbre y toda posibilidad de duda sean eliminadas, jamás creerá. La duda que exige perfecto conocimiento jamás cederá a la fe. La fe descansa en la evidencia, no en la demostración. El Señor requiere que obedezcamos la voz del deber, cuando hay otras voces por todas partes a nuestro alrededor que nos instan a seguir un curso de acción en sentido opuesto. Se requiere de nosotros una sincera atención para distinguir la voz que habla de parte de Dios. Debemos resistir y derrotar la inclinación, y obedecer la voz de la conciencia sin parlamentos ni concesiones, no sea que sus instancias cesen y el control lo ejerzan la voluntad y el impulso. 

En todos estos casos, Ellen White promociona su autoridad como la voz de Dios, sus instrucciones como primero de Dios. Sin embargo, a pesar de que ella está usando las palabras, las ideas y la estructura gramatical de otros, se supone que creamos que Dios está hablando lo que ella está diciendo. Pero Dios no lo está haciendo. 

Las "visiones" tuvieron su origen en otros

El convencimiento o la suposición de que Dios mostraba a Ellen White todo lo que ella decía que veía en cualquier fuente de la que ella recogía la información comenzó desde muy temprano en la vida de Ellen. En un libro
titulado The Unknown Prophet  [El Profeta Desconocido], escrito por Delbert W. Baker, un ministro Adventista negro, Baker presenta una información interesante. Foy, que es el profeta desconocido, tuvo su 'visión' desde 1842 hasta 1845. En la página 123, Baker dice que la Sra. White dijo en 1912:

"Él tuvo todas éstas antes de que yo las tuviese. Fueron escritas y publicadas. Ella indica que, en una ocasión, ella poseyó una copia de ellas".

En diciembre de 1844, a la edad de 17 años, Ellen tuvo su primera visión, que estaba llena de 'Yo vi', o 'Se me mostró', o 'el ángel dijo'. Era un duplicado de la 'visión' de Foy, y en las páginas 95 y otras del libro de Baker, hay una lista de las similitudes. La ropa, el semblante, los ojos, las piernas, los pies, la corona, el brazo, la mano, la voz y algunas de las escenas son idénticas, a menudo usando Ellen las mismas palabras. Sólo es necesario dar algunos ejemplos de entre muchos para subrayar el hecho de que la 'visión' de Ellen no le fue dada por Dios, sino que ella la tomó de Foy. De dondequiera que sea que ella asegure que la recibió, es posible que creyera que Dios se la había dado, pero otros no siempre creyeron lo que ella creyó.

Christian Experience of  W. E. Foy
Christian Experience of  E.G. W. 1846
"Luego veo incontables millones de seres brillantes que vienen con tarjetas en las manos. Los que brillaban eran nuestros guías. Las tarjetas que traían brillaban por encima de la brillantez del sol; y nos las pusieron en las manos, pero no pude leer los nombres en ellas.

"Había incontables millones de brillantes ángeles, cuyas alas eran de oro puro, y cantaban en voz alta, mientras sus alas exclamaban: Santo.

"Detrás del ángel contemplé incontables millones de brillantes carruajes ... cada carruaje tenía cuatro alas como fuego llameante, y un ángel seguía detrás del carruaje, y las alas del carruaje, y las alas del ángel clamaban a una voz, diciendo. 'Santo'.

The Unknown Prophet, pp. 10-11, 18.

"Todos los ángeles comisionados para que visiten la tierra sostienen una tarjeta de oro, que presentan a los ángeles en las puertas de la ciudad al pasar hacia adentro y hacia afuera". Early Writings, p. 39.

"A ambos lados del carruaje había alas y debajo de él, ruedas. A medida que el carruaje ascendía, las ruedas exclamaban 'santo' y las alas, al moverse, exclamaban 'santo'.

"Y a medida que el carruaje ascendía, las ruedas exclamaban 'santo' y las alas, al moverse, exclamaban 'santo' y la comitiva de santos ángeles, alrededor de la nube, exclamaba 'santo', 'santo'  Señor Dios Todopoderoso".

Early Writings, p. 35; Spiritual Gifts, vol. 1, p. 208.

A pesar del provocativo título de Delbert Baker y sus presuposiciones acerca de Dios y las 'visiones' que se suponía que William Foy había tenido, no hay ninguna evidencia en su libro de que Foy era profeta, mucho menos un profeta desconocido. No se ha demostrado que nada de lo que dice que él vio ni de lo que más tarde fue copiado por Ellen White es ni cierto ni profético. Ni siquiera puede decirse que el 'pueblo de Dios' de las 'visiones' tenía nada que ver con la Iglesia Adventista del Séptimo Día, como Ellen White quería hacer creer a la gente, por cuanto no había ninguna Iglesia Adventista del Séptimo Día en ese momento, y ninguno del resto de los acontecimientos puede examinarse ni probarse.

Quizás uno de los impactos más fuertes contra el mito Adventista de las 'visiones divinas' de Ellen fue causado por la publicación del libro de Ronald Numbers Prophetess of Health [Profetisa de la Salud], por Harper´s Row, en 1976. En el libro, Numbers documenta decenas de paralelos en que Ellen White parafrasea o hasta usa las mismas palabras e ideas y el mismo lenguaje de otras personas, e insiste en que lo que ella veía venía directamente de Dios. Pero Numbers sólo había arañado la superficie, pues las siguientes referencias demuestran que Ellen copiaba, no sólo de los médicos de su tiempo, sino de muchos, muchos otros autores en todos los campos de las ideas sobre las cuales ella escribía, asegurándose siempre de que la 'visión' o 'escena' sonara como si ella misma estuviese allí para 'ver' u 'oír' lo que en realidad estaba ocurriendo.

Hasta los "Testimonios" fueron copiados de otros autores

Comenzando con el primer tomo de los Testimonios para la Iglesia, que cubre el período 1855-1868, hasta el tomo nueve, que es el último, Ellen usó cualesquiera autores con los cuales deseaba concordar y afirmaba que todo procedía de Dios, pero siempre para ella primero, no dando crédito nunca a ninguna otra fuente. Enumeradas abajo hay cientos de referencias en sus escritos donde ella ha tomado y usado las ideas, las palabras, y hasta las suposiciones de otros escritores no inspirados y los convirtió en inspirados al insistir en que lo que ella estaba viendo y diciendo venía directamente de Dios. El tiempo y el espacio no permiten hacer comparaciones lado a lado como se hizo en el libro La Mentira White, pero cualquiera que lo desee puede hacerlo si puede obtener los libros enumerados, muchos de los cuales fueron enumerados por el E. G. White Estate como que estaban en la biblioteca de la propia Ellen mientras ella trabajaba con sus asistentes en sus escritos para la iglesia. Están listados los nombres de los autores que Ellen usó, así como dónde pueden hallarse las declaraciones que ella copió.


Ellen G. White
Autores copiados
por Ellen White


Testimonies for the Church

Vol. 1: 1855-1868


p. 371: I was shown. pp. 494-5
March p. 90: Our Father´s House
Wiley, pp. 29-33
U. Smith, Prophetess of Health, p. 112



Vol. 2:

1868-1871
What the Lord has shown me, pp. 60-67, 96.
Look to Jesus, p. 123
I have been shown, pp. 347, 362
On Health,  pp. 364, 384
The Lord has given me a view of some of the corruption, pp. 391, 403, 409, 486

Cole, Philosophy of Health, p. 60
March, Home Life, pp. 210, 607
Cole, pp. 266, 267
Miller, The Cause of  Exhausted Vitality, p. 114.
Cole, p. 538
Miller, pp. 39, 43, 110, 114, 350.



Vol. 3:

1872-1875
In the view given me, pp. 68-72, pp. 138-142
I was shown that God had laid upon ...me. pp. 258-259
pp. 273-274, Elijah
pp. 333-4
pp. 368-370
pp. 487, 562-5

Cole, The Health Reformer 9-144
Horace Mann, Cole, How to Live, p. 135
March, Night Scenes, pp. 68-70
March, Night Scenes, pp. 200,334, 339 pp.49 - 50; Mirror of the Soul, 183
March, Night Scenes, pp. 58-62
Cole, pp. 79, 104




vol. 4:

1876-1881
p. 60 Biographies
pp. 144-148 Obedience
pp. 163, 253
pp. 280-2, Spirit of the Lord
p. 374
p. 409
p. 444
p. 480
p. 543
p. 594
Melville, Sermons by Melville ii 3-5
Cole, p. 127
Marsh, Night Scenes pp. 47- 9,203, 60-62, 242, 98, 45-60
Gardener, Ministry of Healing, 1892
Marsh, Walks, pp. 313-4
Melville, p. 95
Marsh, Night Scenes, 98, 99, 101
Harris, pp. 150-60
Marsh, Our Father´s House, pp. 190-1
Melville, Last Prophecy









vol. 5:
1882-1889
pp. 68-70 I was told
pp. 118-121
p. 133
pp. 154-156
pp. 204-206
pp. 266-268, 270
p. 314
p. 467
pp. 512-516
p. 686
p. 704
p. 707
pp. 735-736
p. 737
March, Night Scenes, pp. 201-204
Melville, pp. 163-168
March, Night Scenes, p. 263
Harris, pp. 150-156
Harris, pp. 19, 30, 45, 48
Harris, pp. p, 98
Miller, p. 27
Marsh, Walks, p. 133
March, Night Scenes, p. 352 Secrets, pp. 68-69
Melville, p. 190
Harris, p. 9
Melville, p. 369
Melville, p. 68, 83
Harris, pp. 113-117



Vol. 6:
1890-1
pp. 58-60 He said
p. 91
pp. 185-186
p. 340
pp. 349-51
pp. 363-4
Harris, pp. 17, 20 xiv
Harris, The Great Teacher, pp. 151-160
Melville, Sermons, vol. 2, p. 42
Marsh, Our Father´s House, p. 104
Andreews, J. N. History of the Sabbath, 22-pp. 105-108
Harris, pp. 105-108

vol. 7:
1902
p. 16 The Church
p. 148
p. 159
p. 276
Harris, p. 160
Harris, p. 71
Harris, p. 125
Harris, p. 318



vol. 8:
1904
p. 15
p. 21
pp. 177-8
p. 201
pp. 259-60
pp. 309-310
Harris, p. 32
Harris, p. 27
Harris, pp. 107-8
Harris, p. 112
Melville, pp. 42-45
Andrews, J. N., History of the Sabbath
Harris, pp. 51, 278, 294

vol. 9:
1909
pp. 50-51
p. 97
p. 256
Melville, pp. 192-199-200
Harris, p. 64
Marsh, p. 16, 134

En este estudio, hemos presentado ejemplos de cómo, durante todos los años  de escribir para los Testimonios para la Iglesia, desde el tomo 1 hasta el 9, desde 1855 hasta 1909, Ellen White estuvo usando las ideas, las palabras, y la estructura de otros escritores para sus frases 'Se me ha mostrado'. Desde el principio, con la 'visión' de William Foy hasta el fin de su vida, usó la 'inspiración' ajena para promocionar el Adventismo y su concepto de estilo de vida que era necesario para agradar a su Dios.

Ellen White
Copiado de ...
Saulo de Tarso, ... desempeñó un papel importante en las discusiones que tuvieron lugar .. esto es evidente por el hecho de que fue nombrado en un importante puesto eclesiástico y político inmediatamente después.

E. G. White, p. 38-72
Saulo también estaba presente y desempeñó un papel importante contra Esteban ... después de la muerte de Esteban, fue elegido miembro del concilio del Sanedrín en consideración al papel que había jugado en aquella ocasión. Conybeare & Howson, pp. 9-20
Una providencia decisoria permitió que el apóstol se demorase.

E. G. W. 194-206
Fue sin duda decidido para bien que fuera así.

C. & H. 585-619
Emocionantes fueron los recuerdos que tenían de los días en que la luz que brillaba sobre el rostro de Esteban se volvió al cielo mientras él sufría el martirio.

E. G. W. p. 204
En sus mentes debe haber florecido más de un recuerdo conmovedor de los días en que laluz del cielo, que una vez había brillado sobre el rostro de Esteban, se volvió al cielo en la agonía del martirio.

Farrar, pp. 519-20
El recuerdo de aquella escena, y de sus propios esfuerzos para conseguir la condena del siervo de Cristo, vinieron a su mente vívidamente.

E. G. W. pp. 214-234
Difícilmente podría olvidar aquel momento, pero miró fijamente a sus inquisidores.

Conybeare & Howson, pp. 621-652
Estas palabras no eran una explosión de emoción. Bajo la influencia del Espíritu Santo, Pablo pronunció una denuncia profética similar a la que Cristo había pronunciado al reprender la hipocresía de los judíos. El juicio pronunciado por el apóstol se cumplió terriblemente cuando el inicuo e hipócrita sumo sacerdote fue muerto por asesinos en la guerra de los judíos. Pero los presentes consideraron las palabras de Pablo como profanas, y exclamaron con horror ...

E. G. White, pp. 214-234
Si consideramos estas palabras como una explosión de indignación, no podemos culparlas severamente ... Si las consideramos como una denuncia profética, se cumplieron terriblemente cuando este hipócrita presidente del Sanedrín fue muerto por asesinos en la guerra de los judíos.

Conybeare & Howson, pp. 621-652
Aquí Julio, el centurión que había escuchado el discurso del apóstol delante de Agripa.

Ellen G. White, pp. 262-271
Y Julio, que difícilmente pueda haber estado ausente de la brillante multitud que había escuchado el discurso de Pablo delante de Agripa.

Farrar, pp. 562-573

Conclusión

Así, pues, una y otra vez, cientos de veces en todos sus escritos, ella tomó las especulaciones, las suposiciones, y hasta las fantasías de otros escritores de los cuales ella copiaba, y convirtió todo ello en absolutos y, en algunos casos, por medio de su propio testimonio, en palabras del Espíritu Santo. Parece un intento deliberado de usar las obras, las palabras, y las ideas ajenas para hacer creer a los que leyeran sus escritos que Ellen era transportada hacia atrás en el tiempo y podía leer la mente, los pensamientos, y los propósitos de cada situación y luego interpretar para Dios los tiempos y los sucesos de lo que ella describía. Contrariamente a lo que algunos han tratado de argumentar, ella no sigue los pensamientos de la narración de la Escritura, sino que proyecta totalmente las especulaciones ajenas como los pensamientos de Dios.

Hay cientos de otras páginas que podrían citarse, cada una con sus plagios de otros autores, sin dar crédito nunca a nadie aparte de Dios y a la frase "se me ha mostrado". Un aparte interesante puede encontrarse en el tomo 2 de los Testimonios, p. 116, donde Ellen dice de sus pensamientos relativos a una 'visión'. 'Quedé profundamente impresionada'. Y nuevamente, en el mismo tomo, p. 565: 'Ayer me tomé algún tiempo para reflexionar, y ahora tengo algunas ideas que deseo presentarles'. ¡Si palabras como éstas hubiesen sido usadas en lugar de "se me ha mostrado", Ellen White no habría alcanzado el status de infalibilidad que alcanzaron sus escritos, ni habría sido canonizada como lo hemos hecho! Todo sacerdote sincero, todo profeta honesto, todo pastor devoto, cuando ha hablado o escrito, ha creído homiléticamente que ha presentado el mensaje de Dios por medio de él sin 'se me ha mostrado', y sin importar de dónde obtuvo su 'inspiración'. La mayor parte de las congregaciones reconocen que una persona ha hablado en nombre Dios, no que Dios ha hablado en nombre de una persona. ¡Qué diferencia podría haber habido en el Adventismo, si hubiésemos aceptado la misma sabiduría!

Una observación cuidadosa o hasta casual de la historia convencerá a cualquier investigador honesto de que ella consiste de los registros de pueblos, naciones, tribus, o familias que han 'tomado prestado' o 'robado', sin devolver ni dar crédito, ideas, palabras, posesiones, o bienes y tierras que pertenecen a alguien más, y que luego han asegurado durante todo el tiempo de allí en adelante que no lo habían hecho y han muerto defendiendo sus mentiras. Pero sólo unos pocos han logrado sobrevivir, algunos con gran respeto y seguimiento, afirmando que Dios o les ayudó a hacer lo que hicieron o por lo menos les dijo cómo y dónde hacerlo. ¿Y por qué se hace esto en la humanidad? La razón es también muy clara. Queremos poseer o controlar a los que están a nuestro alrededor y qué mejor manera de hacerlo que convertir a Dios en socio y aliado. Así, pues, tenemos la historia de la política y la religión desde el principio del tiempo.

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