ELLEN WHITE ATACA A BALLENGER

Traducido



En la siguiente carta, obsérvese, por favor, que la Sra. White no aporta ni un solo versículo bíblico para refutar la evidencia bíblica que Ballenger presentó. Más bien, afirma que él ¡necesita poner su fe en las "demostraciones del Espíritu" [sus visiones] antes que en la Palabra de Dios! -- Editor.

La carta de la Sra. White a A. F. Ballenger

Cuando el poder de Dios testifica en cuanto a lo que es la verdad, esa verdad ha de permanecer para siempre como verdad. No se deben considerar suposiciones contrarias a la luz que Dios ha dado. Surgirán hombres con interpretaciones de la Escritura que para ellos son verdad, pero que no lo son. La verdad para esta época Dios nos la ha dado como fundamento de nuestra fe. Él mismo nos ha enseñado lo que es verdad. Surgirá uno, y otro más, con nueva luz, que contradice la luz que Dios ha dado bajo la demostración de su Santo Espíritu. Todavía hay algunos vivos que pasaron por la experiencia obtenida en el establecimiento de esta verdad. Por gracia, Dios ha perdonado sus vidas para repetir, y repetir hasta al fin de sus vidas, la experiencia por la cual pasaron, como le ocurrió al apóstol Juan hasta el mismo fin de su vida. Y los portaestandartes que han caído en la muerte hablarán por medio de la reimpresión de sus escritos. Se me ha dicho que, de este modo, sus voces han de ser escuchadas. Ellas han de dar testimonio de lo que constituye la verdad para este tiempo.

No debemos aceptar las palabras de los que vienen con un mensaje que contradice los puntos especiales de nuestra fe. Estas personas reúnen gran número de textos bíblicos, y los amontonan como prueba de las teorías que afirman. Esto se ha hecho una y otra vez durante los pasados cincuenta años. Y mientras que las Escrituras son la Palabra de Dios y deben ser respetadas, la aplicación de ellas es un gran error si tal aplicación mueve una sola columna del fundamento que Dios ha sustentado en estos cincuenta años. El que hace tal aplicación no conoce las maravillosas demostraciones del Espíritu Santo que dio poder y fuerza a los pasados mensajes que han llegado al pueblo de Dios.

Las pruebas del pastor G. no son dignas de confianza. Si se aceptan, destruirían la fe del pueblo de Dios en la verdad que ha hecho de nosotros lo que somos.

Debemos permanecer firmes sobre este tema, porque los puntos que él está tratando de probar con la Escritura no son sólidos. No prueban que la experiencia pasada del pueblo de Dios fue una falacia. Teníamos la verdad; fuimos dirigidos por ángeles de Dios. Fue bajo la guía del Espíritu Santo que se presentó la cuestión del santuario. La elocuencia de cada uno es guardar silencio con respecto a las características de la fe en la cual no tuvo parte. Dios nunca se contradice. Las pruebas bíblicas se aplican erróneamente si se las fuerza a testificar de lo que no es verdad. Otro y otro más se levantará y traerá lo que se supone que es más luz y hará sus asertos. Pero nosotros permanecemos al lado de los antiguos hitos.

Se me ha indicado que diga estas palabras que podemos usar como apropiadas para este tiempo, porque ha llegado el momento en que el pecado debe ser llamado por su nombre verdadero. Somos estorbados en nuestra obra por hombres que no se han convertido, que buscan su propia gloria. Desean ser considerados originadores de nuevas teorías, que presentan asegurando que son la verdad. Pero si estas teorías se aceptan, conducirán a una negación de la verdad que Dios ha estado entregando su pueblo durante los pasados cincuenta años, sustentándola con la demostración del Espíritu Santo. -- Carta 329, 1905 (Selected Messages, Book 1, pp. 161-162).

Dos preguntas para la Sra. White

¿Notó usted las muchas veces en la carta anterior que la Sra. White nos insta a que creamos en las "demostraciones del Espíritu Santo" antes que en la evidencia que Ballenger descubrió en la palabra de Dios?

PREGUNTA 1: ¿Es sabio confiar en demostraciones espirituales en vez de la clara palabra de Dios?

Y para tomar el lugar de la palabra de Dios, él [Satanás] presenta manifestaciones espirituales. He aquí un canal enteramente bajo su control; por este medio, puede hace creer al mundo lo que quiera. Great Controversy, p. 557.

PREGUNTA 2: ¿Y qué acerca de los grandes reformadores protestantes que escribieron sobre la Gran Controversia? ¿Hicieron lo que usted sugiere? ¿Confiaron en demostraciones espirituales para establecer su verdad?

El gran movimiento que Wycliffe inició, que consistía en liberar la conciencia y el intelecto y libertar las naciones por tanto tiempo uncidas al carro triunfal de Roma, nació en la Biblia. Aquí estaba la fuente de esa corriente de bendición que, como el agua de la vida, ha fluido por las edades desde el siglo catorce. Wycliffe aceptó las Sagradas Escrituras con fe implícita como la inspirada revelación de la voluntad de Dios, una suficiente regla de fe y práctica. Había sido educado para considerar la iglesia de Roma como autoridad divina e infalible, y para aceptar con reverencia incondicional las enseñanzas y costumbres establecidas de un millar de años; pero se apartó de todo esto para escuchar la santa palabra de Dios. Esta fue la autoridad que instó al pueblo a reconocer. En vez de que la iglesia hablara por medio del papa, Wycliffe declaró que la única autoridad es la voz de Dios hablando por medio de su palabra. Y enseñó, no sólo que la Biblia es una perfecta revelación de la voluntad de Dios, sino que el Espíritu Santo es el único intérprete, y que todo hombre, por medio del estudio de sus enseñanzas, debe aprender su deber por sí mismo. De este modo, apartó las mentes de los hombres del papa y la iglesia de Roma y las dirigió a la palabra de Dios. Great Controversy, p. 93.             

Arriba

1  2  3  4  5  7  8  9  10  11  12  13
14  15  16  17  18  19  20  21  22  23  24  25  26


Sección de Libros3

Index1