La confusión del sellamiento

D. Anderson

"He aquí, yo estoy contra los que profetizan sueños metirosos, ha dicho el Señor".
Jer. 23:32


Las visiones de la Sra. White con respecto al "tiempo de sellamiento" proporcionan evidencia inequívoca de que fracasó en las pruebas de un profeta.

Para comenzar, examinemos la enseñanza de Ellen White con relación al tiempo del sellamiento, enseñanza que aparece en su libro que marca un hito, The Great Controversy:

"Cuando la prueba final se aplique a los hombres, entonces se trazará la diferencia entre los que sirven a Dios y los que no le sirven. Mientras que la observancia del falso sábado, en cumplimiento de la ley del estado y contrariamente al cuarto mandamiento, será una confesión de lealtad a un poder que se opone a Dios, la observancia del verdadero sábado, en obediencia a la ley de Dios, es evidencia de lealtad al Creador. Mientras que una clase, al aceptar la señal de sumisión a los poderes terrenales, recibe la marca de la bestia, la otra clase, al escoger la señal de lealtad a la autoridad divina, recibe el sello de Dios". (1)

"Un ángel que regresa de la tierra anuncia que su obra está consumada; la prueba final ha sido aplicada al mundo. y todos los que han demostrado que son leales a los preceptos divinos han recibido "el sello del Dios viviente". Entonces Jesús cesa en su intercesión en el santuario de arriba". (2)

Estudie cuidadosamente los párrafos precedentes y observe lo siguiente:
  1. La "prueba final" consiste en escoger la observancia del sábado en lugar del falso sábado impuesto por el gobierno.
  1. La "prueba final" todavía estaba en el futuro cuando The Great Controversy se publicó en 1911. La Sra. White escribe en tiempo gramatical futuro al decir: "Cuando la prueba final se aplique ...".
  1. Los "sellados" tienen que "probar" su lealtad a Dios escogiendo obedecer las leyes de Dios antes que las leyes del estado.
  1. El "sello de Dios" se les da a los que pasen la "prueba final" al escoger el sábado de Dios por encima del sábado impuesto por el estado.
  1. Para recibir el "sello de Dios" uno tiene que pasar la "prueba final". Por consiguiente, el sellamiento no podría haber comenzado antes de 1911, porque la "prueba final" todavía no había llegado en 1911.
Como evidencia adicional de que la Sra. White consideraba el sellamiento como todavía en el futuro, ella escribió en 1889 que los hijos de Dios serían sellados "dentro de poquito":

"Dentro de poquito, todo el que sea hijo de Dios tendrá el sello de Dios sobre él. ¡Oh, que sea puesto sobre nuestras frentes! ¿Quién puede soportar la idea de ser pasado por alto cuando cuando el ángel venga a sellar a los siervos de Dios en sus frentes?" (3)
 
Carta de W. C. White sobre los 144,000 (23)
Ahora la pregunta: ¿Enseñó la hermana White que los que morían en el mensaje desde 1844, y de los cuales se dice: 'Bienaventurados los muertos que mueren en el Señor de ahora en adelante', serían parte de los 144,000?

Puedo asegurarle, hermano mío, que ésta era la enseñanza de Ellen G. White. Muchas veces la he oído hacer afirmaciones en este sentido, y tengo una carta dirigida al hermano Hastings, que es mencionado en la página 237 de Life Sketches, en la cual ella dice claramente que la esposa de él, que había fallecido hacía poco, sería parte de los 144,000.

En una carta recibid recientemente de un hermano en Reno, Nevada, se hace referencia a una declaración en el libro del pastor Loughborough, en la página 29, donde se informa que la hermana white dijo: 'Los que murieron en la fe estarán entre los 144,000. Eso lo tengo claro.

Y yo testifico,mi hermano, que eso concuerda perfectamente con sus escritos, lo que ella decía, y sus enseñanzas durante los años de su ministerio.

Los 144,000 sellados

En Great Controversy, la Sra. White bosqueja las características específicas de los 144,000  de esta manera:

"Sobre el mar de vidrio delante del trono, ese mar de de vidrio como si estuviera mezclado con fuego, -- tan resplandeciente con la gloria de Dios -- está reunida la compañía [1] de los que han 'obtenido la victoria sobre la bestia, y sobre su imagen, y sobre su marca, y sobre el número de su nombre'. Con el Cordero en el monte Sión, 'teniendo las arpas de Dios', permanecen de pie los ciento cuarenta y cuatro mil que fueron redimidos de entre los hombres; y se oye, como el sonido de muchas aguas, y como el sonido de un gran trueno, 'la voz de los arpistas que tocaban sus arpas'. Y cantan 'un cántico nuevo' delante del trono, un cántico que nadie puede cantar salvo los ciento cuarenta y cuatro mil. Es el cántico de Moisés y del Cordero -- un cántico de liberación. Nadie sino los ciento cuarenta y cuatro mil pueden aprender ese cántico; porque es el cántico de su experiencia -- una experiencia como no la ha tenido ninguna otra compañía. 'Éstos son los que siguen al Cordero por dondequiera que va'. Éstos, habiendo [2] sido trasladados de la tierra, de entre los vivos, son contados como 'las primicias para Dios y el Cordero'. Apocalipsis 15:2, 3; 14:1-5. [3] 'Estos son los que salieron de gran tribulación'; han pasado por el tiempo de angustia cual nunca fue desde que hubo nación; [4] han soportado el tiempo de la angustia de Jacob; [5] han permanecido sin intercesor durante el derramamiento de los juicios de Dios. ... [6] Han visto la tierra devastada por hambruna y la pestilencia, teniendo el sol poder para abrasar a los hombres con gran calor, y ellos mismos han soportado sufrimiento, hambre, y sed". (4)

Por lo que antecede, es obvio que los 144,000 -- los que han recibido el sello de Dios -- pueden ser identificados por lo siguiente:
  1. Obtuvieron la victoria sobre la "marca de la bestia".
  2. Estaban vivos y fueron trasladados al regreso de Jesús.
  3. Pasaron por la gran tribulación.
  4. Pasaron por la "angustia de Jacob".
  5. Permanecieron sin un mediador.
  6. Vivieron durante los juicios finales de Dios sobre la tierra.
Obviamente, nadie que estuviese vivo en el siglo diecinueve había pasado por ninguna de estas experiencias. Nadie ha sido trasladado a la segunda venida, ni pasado por la gran tribulación, ni vivido sin un mediador, ni vivieron durante los juicios finales. Ni siquiera la marca de la bestia se ha manifestado de acuerdo con Ellen White, que escribió en 1899:

"Nadie ha recibido la marca de la bestia todavía. El tiempo de prueba no ha llegado todavía. En todas las iglesias, sin exceptuar la Católica Romana, hay verdaderos cristianos. Nadie es condenado sino hasta que haya visto la luz y la obligación del cuarto mandamiento. Pero, cuando salga el decreto haciendo cumplir el falso sábado, y el clamor del tercer ángel amoneste a los hombres contra el culto a la besta y a su imagen, se trazará claramente la línea entre lo falso y lo verdadero. Entonces los que todavía continúen en transgresión recibirán la marca de la bestia". (5)

Así, pues, es claro que, en el siglo diecinueve, nadie estaba sellado ni era parte de los 144,000.

Confusión y contradicción

Parece que, en 1911, la profetisa creía que el tiempo del sellamiento todavía estaba en el futuro. Sin embargo, sus "visiones" de 62 años antes pintaban un cuadro muy diferente. En la década de 1840, ella creía que el tiempo del sellamiento estaba en plena marcha.

"Satanás está usando ahora todas las artimañas en este tiempo del sellamiento, para mantener las mentes del pueblo de Dios lejos de la actual verdad del sellamiento, y hacerles titubear. Vi una cortina que Dios estaba corriendo sobre su pueblo para protegerles en el tiempo de angustia; y toda alma decidida en favor de la verdad y que era pura de corazón habría de ser cubierta con la cortina del Dios Todopoderoso". (6)

"Vi que Satanás estaba trabajando de estas maneras para distraer, engañar, y alejar al pueblo de Dios, justo ahora en este tiempo del sellamiento" (7).

En enero de 1849, los White publicaron un folleto titulado "A los que están recibiendo el sello del Dios viviente". En ese folleto, la Sra. White escribió:

"El tiempo del sellamiento es muy corto, y pronto terminará. Ahora es el momento de asegurar nuestro llamado y nuestra elección, mientras los cuatro ángeles están conteniendo los cuatro vientos". (8)

La Sra. White llegó hasta a identificar a algunos de los que habían recibido el sello de Dios durante el tiempo del sellamiento ...

"Vi que ella [la Sra. Hastings, que acababa de morir] estaba sellada y se levantaría a la voz de Dios y estría de pie sobre la tierra, y estaría con los 144,000. Vi que no era necesario que la lloráramos; ella reposaría en la tribulación". (9)

Más tarde, escribió que algunos de los miembros de más edad en la iglesia tenían el "sello de Dios" sobre ellos:

"Hay hombres vivos en nuestra tierra que han pasado de la edad de 90 años. Los resultados naturales de la vejez se ven en su fragilidad. Pero creen en Dios, y Dios les ama. El sello de Dios está sobre ellos, y estarán entre el número de los que el Señor ha dicho: 'Bienaventurados los muertos que mueren en el Señor'". (10)

En su libro A Seal of the Living God [Un sello del Dios viviente], publicado en 1849, Joseph Bates cita una visión que Ellen White tuvo del sellamiento. En esta visión, la Sra. White asegura que "no todos" los santos han sido sellados todavía, dando a entender que algunos ya han sido sellados:

"Los ángeles están conteniendo los vientos. Es Dios el que restringe los poderes. Los ángeles no han soltado, porque no todos los santos están sellados. La tribulación ha comenzado. Ha comenzado. La razón de que los cuatro vientos no hayan sido soltados es que no todos los santos están sellados. La tribulación está aumentando más y más; esa tribulación nunca terminará sino hasta que la tierra se deshaga de los impíos. Ellos [los vientos] están listos para soplar. Hay una restricción puesta porque no todos los santos están sellados". (11)

No hay duda de que la Sra. White enseñaba, a través de sus visiones, que el sellamiento estaba en progreso en 1849. Pero, en 1911, ella describe el sellamiento como un suceso futuro, una actividad que tiene lugar en el momento de la "prueba final".  ¿Puede algo ser más confuso?

¡No me pidan que lo explique!

Aunque la mayoría de los Adventistas probablemente no están enterados de las anteriores afirmaciones de la Sra. White, aparentemente había algunos que notaron la discrepancia, porque la Sra. White se quejó más tarde de las preguntas que recibía sobre el tema:

"Llegan cartas haciendo preguntas con respecto al sellamiento del pueblo de Dios, quiénes serán sellados, cuántos, y otras preguntas inquisitivas. Creo que debemos decirles que lean y hablen de las cosas que están claramente reveladas. La Palabra nos informa que, si andamos humildemente con Dios, recibiremos instrucciones. Pero la curiosidad inquisitiva no debe ser alentada". (12)

Quizás una de esas "preguntas inquisitivas" que la Sra. White no pudo explicar era cómo es que el sellamiento comenzó en 1849, aparentemente se detuvo, y ahora estaba en el futuro. La respuesta de la Sra. White, en efecto, equivalía a decir: "¡Dejen de hacerme preguntas sobre el sellamiento!".

¿Los White fueron víctimas de la falsa enseñanza de Joseph Bates?

Después del Chasco de 1844, a Joseph Bates se le ocurrió la idea de que los Adventistas  estaban en un período de prueba de siete años acerca de la verdad del sábado. Ese período de siete años habría de terminar en el otoño de 1851 con el retorno de Cristo. Por un tiempo, los White fueron arrebatados en este error, pero para fines de agosto de 1851, era evidente que Cristo no regresaba, y James reconoció que había sido una falsa enseñanza.

"Es bien sabido que algunos de los hermanos han estado enseñando que la gran obra de salvación para el remanente, por medio de la intercesión de nuestro gran Sumo Sacerdote, terminaría siete años después del fin de los 2300 días, en el otoño de 1844. A algunos de los que han enseñado esto nosotros les estimamos mucho y les amamos 'fervientemente' como hermanos, y pensamos que es apropiado que no nos apresuremos a herir sus sentimientos; pero no podemos abstenernos de dar algunas razones para no aceptar el tiempo". (13)

James añadió entonces: "Ahora estamos enfáticamente en el tiempo de espera". (14)

Nótese cómo Ellen cambió el tono después de que James hizo esta declaración:

ANTES de 1851 - Tiempo del sellamiento
DESPUÉS de 1851 - Tiempo de espera
Ene. 1849. El tiempo de sellamiento es muy corto, y pronto terminará. (15)

Ago. 1849. Satanás está usando ahora todas las artimañas en este tiempo del sellamiento. ... Vi que Satanás estaba trabajando de estas maneras para distraer, engañar, y alejar al pueblo de Dios, justo ahora en este tiempo del sellamiento. (16)
1864. Hemos estado, y todavía estamos, en el paciente tiempo de espera. (17)

1876. Estamos en el tiempo de espera ... (18)

1883. Estamos en el tiempo de espera ... (19)

1885. Estamos en el tiempo de espera ... (20)

1910. Estamos en el tiempo de espera ... (21)

¿De quién es la culpa, de todos modos?

Con el tiempo, se inventó una razón para explicar cómo el sellamiento pudo comenzar en la década de 1840, luego se detuvo, y ahora está en el futuro. ¿Fue culpa de la profetisa? ¿Cometió un error? ¿Se equivocó su visión? ¡No, por supuesto! No fue culpa de ella. ¡Fue culpa del pueblo Adventista! ¡El pueblo es el responsable! Por absurdo que parezca, la Sra. White trasladó la culpa de su fracaso al pobre pueblo Adventista:

"Si el pueblo de Dios hubiese andado en su consejo, la obra de Dios habría avanzado, los mensajes de la verdad habrían sido llevados a todo el pueblo que habita sobre la faz de toda la tierra. Si el pueblo de Dios hubiese creído en Dios y sido hacedor de su Palabra, si hubiera guardado sus mandamientos, el ángel no habría venido volando por el cielo con el mensaje a los cuatro ángeles que habrían de soltar los vientos para que soplaran sobre la tierra, exclamando: Aguanten, aguanten los cuatro vientos que soplan sobre la tierra, hasta que yo haya sellado a los siervos de Dios en sus frentes. Pero, porque el pueblo es desobediente, desagradecido, impío, como el antiguo Israel, el tiempo se ha prolongado para que todos puedan escuchar el último mensaje de misericordia proclamado en alta voz. La obra del Señor ha sido estorbada, y el tiempo del sellamiento demorado". (22)

Allí lo tienen. Todo el caos acerca del tiempo del sellamiento se debe al pueblo Adventista. Quizás no entregaron suficientes diezmos y ofrendas. Quizás no compraron suficientes libros de Ellen White para regalarlos a sus vecinos. Cualquiera que sea la razón, Dios tuvo que detener el sellamiento a medio camino, llamar de vuelta a sus ángeles de su obra de sellamiento, y reprogramar el sellamiento para una fecha posterior. ¿Suena confuso? Tiene razón. Lo es.

Porque Dios no es Dios de confusión
1 Corintios 14:33

NOTAS
  1. Ellen White, Great Controversy, p. 605. 
  1. Ibid., p. 614.
  1. Ellen White, SDA Bible Commentary, vol. 7, pp. 969, 970 (1889).
  1. Ellen White, Great Controversy, p. 649.
  1. Ellen White, Evangelism, pp. 234-235.
  1. Ellen White, The Present Truth, August 1, 1849.
  1. Ibid.
  1. Ellen White, "To Those who are Receiving the Seal of the Living God", January 31, 1849.
  1. Ellen White, Letter 10, 1850, Selected Messages, book 2, p. 263.
  1. Ellen White, SDA Bible Commentary, vol. 7, p. 982.
  1. Ellen White as quoted by Joseph Bates in A Seal of the Living God, pp. 25, 26.
  1. Ellen White, S. D. A, Bible Commentary, Vol. 7, p. 918.
  1. James White, Review and Herald, Aug. 19, 1851.
  1. Ibid. See Ellen G. White: The Early Years, Volume 1 - 1827-1862. By Arthur L. White (1985), p. 209.
  1. Ellen White, "To Those who are receiving the seal of the living God", Jan. 31, 1849.
  1. Ellen White, The Present Truth, Aug. 1, 1849.
  1. Ellen White, Spiritual Gifts, Volume 4b (1864), p. 151.
  1. Ellen White, Testimonies for the Church Vol 4 (1876-1881), p. 123.
  1. Ellen White, The Review and Herald, Jan. 9, 1883.
  1. Ellen White, The Review and Herald, Aug. 18, 1885.
  1. Ellen White, The Gospel Herald, Aug. 1, 1910.
  1. Ellen White, Letter 106, 1897. Released by the Ellen G. White Estate, Washington, D. C. March 12, 1986. Entire letter. Manuscript Releases Vol. 15, pp. 292-293.
  1. W. C. White letter, April 18, 1929.
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