EL
SÁBADO, LA LEY,
Y EL EVANGELIO
Rolaant L. McKenzie
Traducido de Gospel
Outreach
2. ¿Fue el sábado instituido
en la creación?
Algunos cristianos sabadistas dicen que el séptimo día sábado
es un memorial de la creación, que se originó en el jardín de
Edén, y que, a causa de esto, se nos llama a, o se nos ordena,
guardarlo. Pero, ¿es esto lo que la Biblia dice? Echemos un
vistazo a Génesis 1 y 2.
Génesis 1-2
Génesis
1
y 2 revelan algunas cosas interesantes:
- La creación se completó en seis días.
- Dios reposó en el séptimo día.
- Dios bendijo al séptimo día.
- Dios santificó al séptimo día.
- La razón de que Dios santificó el séptimo día
es que reposó en él.
- El relato del séptimo día no contiene la
fórmula "Y fue la tarde la mañana el día tal", como la
tienen los anteriores seis días de la creación.
- En el relato del Génesis, no hay ninguna orden
para que la humanidad repose.
- No se menciona nada expresamente en relación
con el hombre en el reposo del séptimo día de la creación.
- El reposo del séptimo día de Dios se
caracterizó más probablemente por su deleite en sus nuevas
creaciones y en abierta comunión con Adán y Eva en el ambiente
sin pecado, perfecto, del Edén.
- Las condiciones que caracterizaron al reposo
de Dios habrían continuado probablemente a no ser por el
pecado del hombre.
- Podemos sacar la conclusión de que el
séptimo día tuvo una tarde y una mañana, y que fue un día
regular, como los seis anteriores, o un período indefinido
de tiempo. En Génesis 2:4, Moisés usa la palabra día para un
período de tiempo que dura por lo menos seis días.
- Posiblemente, la santificación que se le
asigna al séptimo día en Génesis 2:2-3 se refería a un
período indefinido de tiempo, puesto que la razón de que
fuera santificado era que Dios reposó de su obra de la
creación.
- El relato del Génesis no menciona la
terminación del reposo de Dios en el séptimo día. Este
reposo es presentado como un estado continuo, como lo indica
la omisión de la frase "y fue la tarde y la mañana el día
séptimo". El hecho de que el relato del Génesis haya sido
redactado tan cuidadosamente indica que esta omisión no fue
accidental.
- Cuando el hombre pecó, fue excluído del reposo
de Dios, y Dios inició su obra de redención para restaurar al
hombre a Sí mismo. (2)
¿Cuál es esta nueva obra que Dios inició
inmediatamente después de que Adán y Eva pecaron? "Y Jehová hizo
al hombre y a su mujer túnicas de pieles, y los vistió" (Génesis
3:21). Este suceso fue el comienzo de una obra que continuaría a
través de los siglos, hasta que su significado se revelara
plenamente en la muerte de Cristo. La muerte de aquel primer
cordero, aunque no se menciona así en el relato del Génesis, era
la bellota de la gran verdad que, durante los siglos siguientes,
crecería hasta convertirse en el grande y frondoso roble de la
justicia por la fe. Apuntaba hacia adelante, hacia la vida y la
muerte substitutivas de Cristo en favor de la humanidad perdida.
Los desnudos Adán y Eva fueron vestidos de túnicas hechas de la
piel del cordero - un sustituto que dio su vida. Milenios más
tarde, Pablo expresaría esta misma verdad con estas palabras:
2 Corintios 5:21. "Al que no
conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros
fuésemos hechos justicia de Dios en él".
Gálatas 3:27. "Porque todos los
que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis
revestidos". (3)
En vez de en la creación, el mandamiento de
observar el sábado tuvo su origen con Moisés y los hijos de
Israel en el desierto, porque el sábado era la señal del pacto
que Dios hizo con Israel en el Monte Sinaí. Considérense estos
pasajes en Éxodo 16, 20, y 31; Deuteronomio 5 y 9; y Nehemías 9.
Éxodo
16:16-30
Éxodo
20:8-11
Éxodo
31:12-18
Deuteronomio
5:12-15
Deuteronomio
9:8-11
Nehemías 9:13-14
Hay varios anacronismos en los escritos de
Moisés. Anacronismos son afirmaciones en desacuerdo con su
contexto inmediato. Génesis fue escrito por Moisés. Sólo podemos
especular si lo escribió antes o después de Éxodo, o si usó o no
usó documentos-fuente que ya existían. Pero esto no cambia el
hecho de que Moisés escribió Génesis desde su perspectiva en el
tiempo. Los siguientes son tres ejemplos que ilustran este
punto.
Primero, en Génesis 2:10-14 se menciona la
tierra de Cus. Cus era un nombre común para la tierra de Egipto
en los días de Moisés. La propia esposa de Moisés era de la
tierra de Cus (Números 12:1). Este pasaje también menciona a los
ríos Tigris y Éufrates. Aunque el jardín de Edén probablemente
estaba situado en esta parte del mundo, todavía parece que
Moisés estaba expresando esta verdad en un lenguaje que podía
entenderse desde la perspectiva post-diluviana de sus días.
Segundo, Génesis 2:23 habla de la creación de Eva de una
costilla de Adán. La mayoría de las traducciones terminan la
cita de Adán después del versículo 23. El siguiente versículo
parece un comentario de Moisés, que muestra dónde tuvo su origen
la costumbre del matrimonio en los días de Moisés. Y tercero,
Moisés dice en Génesis 3:20 que Adán llamó a su mujer Eva, que
significa "vida", "porque ella era madre de todos los
vivientes". Pero cuando Adán dio este nombre a su esposa, ella
no era madre de todos los vivientes en absoluto. Parece que la
razón de que esto se hiciera es que "era madre de todos los
vivientes" desde la perspectiva de Moisés. Este fue el
comentario de Moisés o la manera en que se presentó el relato
después de los hechos.
Hay dos modos de considerar esta
información. Uno es que la bendición y la santificación del
séptimo día podría ser también un anacronismo. Si esto es
verdad, entonces el registro de la bendición de Dios sobre el
séptimo día, como fue registrado por Moisés en Génesis 2, en
realidad tuvo lugar en Sinaí, en vez de en la creación. Otro
punto de vista es el de que la Escritura subraya claramente la
santificación de ese séptimo día en la creación. De todos modos,
hay fuerte evidencia bíblica contra la posición que iguala el
sábado del Sinaí con el reposo del séptimo día de Edén.
La obra de redención es la obra que Dios
inició cuando el hombre pecó y fue expulsado del reposo de Edén.
Esta obra continuaría hasta que la humanidad fuese restaurada al
verdadero reposo de Dios. Jesús, no un período de 24 horas, es
nuestro reposo sabático. Esto parece estar confirmado en Hebreos
3 y 4.
Hebreos 3-4:1-11
A la luz de estos pasajes en Hebreos, las
palabras de Cristo relativas al sábado en los evangelios de
Mateo, Marcos, y Lucas adquieren un significado más profundo y
más maravilloso.
Mateo 12:1- 8
Marcos 2:23-28
Lucas 6:1-5
El significado de estos pasajes bíblicos ha
sido motivo de debate entre los cristianos por bastante tiempo.
Algunos los han usado para demostrar que el sábado fue
establecido en la creación para toda la humanidad. Sin embargo,
este punto de vista discrepa con la creencia de los judíos de
que el sábado fue dado sólo al pueblo de Israel como señal del
pacto entre ellos y Dios. Más bien, Jesús dice en estos pasajes
que el sábado fue hecho para beneficio del hombre, y no el
hombre para beneficio del sábado. Jesús, el Hijo del Hombre,
controla el sábado, no es controlado por él. Jesús se declara
Señor del reposo que debe recibirse en Él, puesto que "sábado"
significa "reposo". El título Hijo del Hombre, que Jesús usó a
menudo para referirse a sí mismo, viene de Daniel 7:13, donde se
usa en relación con la venida del reino de Dios en los últimos
días. Por lo tanto, al defender la aparentemente cuestionable
conducta de sus discípulos contra los fariseos, Jesús declaraba
su propia autoridad como el Hijo del Hombre que facilita la
llegada del reino de Dios en los últimos días, el verdadero
reposo al cual apuntaba el sábado.
El punto principal del argumento de Jesús
aquí no es definir la apropiada conducta sabática o la correcta
interpretación de la ley sabática del Pacto Antiguo. Por el
contrario, demuestra cómo la ley del Pacto Antiguo, incluyendo
la ley sabática, apunta a Él. Como resultado, podemos ver que
Jesús está tomando sobre sí la autoridad por encima de la ley
sabática. Su presencia permite mayor libertad en relación con la
observancia del sábado de la que tenían los sacerdotes en el
templo. Su posición como el Ungido y venidero Rey de Israel, le
daba a Él, y a los que estaban asociados con Él, autoridad para
infringir la ley sabática. Como Hijo del Hombre, que tenía la
misión de inaugurar el reino de Dios al final del tiempo, está
por encima del control de la ley sabática. Vemos esto mejor
cuando consideramos que, tanto en Marcos como en Lucas, este
incidente sigue inmediatamente a la discusión sobre poner vino
nuevo en odres viejos (Marcos 2:21-22; Lucas 5:36-38). En esto,
tenemos un precursor de cambios venideros. Este mismo incidente
en el evangelio de Mateo, bosquejado más arriba, está
relacionado con los tres versículos del capítulo anterior, en
que Cristo llama a todos a venir a Él para que reciban descanso
(Mat 11:28-30) mediante el uso de la frase "En aquel tiempo"
(Mat. 11:25; 12:1). Esto parece indicar que el sábado mismo
puede ser asociado con el reposo de Dios al final del tiempo,
comenzando con la aceptación del reposo en Jesús, comenzando con
la fe en Él y en su evangelio de la salvación.
Al mismo tiempo, hay evidencia de que el
sábado mismo está asociado con el tema de la restauración y la
Era Mesiánica. Dentro de este marco, el hecho de que Jesús es
Señor del sábado se vuelve más significativo, porque el mismo
concepto del sábado comienza a sufrir una transformación. Que
Cristo Jesús es Señor del sábado es no sólo una afirmación
mesiánica de grandes proporciones, sino que abre la posibilidad
de un futuro cambio o una reinterpretación del sábado,
precisamente de la misma manera que su profesa superioridad por
encima del templo, abre ciertas posibilidades sobre la ley
ritual. Ningún detalle de esa naturaleza se da aquí, pero estos
pasajes despiertan expectativas. (4)