Si Moisés escribió la Biblia,
habrá sido responsable de registrar versiones contradictorias de
sucesos, algo fácil de demostrar, al citar yo en esta página
ejemplo tras ejemplo de traducciones variantes en la Biblia.
Traducciones divergentes también quedan reveladas cuando
consideramos las extrañas redacciones que rodean la historia de
la torre de Babel. Primero, se describen los pueblos de la
tierra, con sus variados idiomas extranjeros.
"De
éstos [los hijos de Jafet] se poblaron las costas, cada cual
según su lengua, conforme a sus familias, en sus naciones. ...
Éstos son los hijos de Cam por sus familias, por sus lenguas,
en sus tierras, en sus naciones. ... Éstos fueron los hijos de
Sem por sus familias, por sus lenguas, en sus tierras, en sus
naciones". (Génesis
10:5, 20, 31).
La historia de
la torre de Babel comienza con la siguiente afirmación
incongruente:
"Tenía entonces toda la tierra una sola lengua y
unas mismas palabras". Y aconteció que, cuando salieron de
oriente, hallaron una llanura en la tierra de Sinar, y se
establecieron allí". (Génesis 11:1, 2).
Debería ser obvio que aquí nos enfrentamos a una situación de
'esto' o 'aquello', en la cual los dos relatos son mutuamente
excluyentes, y es particularmente peregrino hallar una
afirmación acerca de la torre de Babel, y que el solo lenguaje
de la tierra sigue inmediatamente a una tradición separada que
describe los muchos lenguajes de la tierra. Pero, como se
vuelve obvio a medida que uno investiga, la Biblia ha sido
redactada de una manera muy rara.
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