EL ZARANDEO DEL
ADVENTISMO
Geoffrey J. Paxton

Título de la obra en inglés:
The Shaking of Adventism


Traducido de Present Truth Magazine


Capítulo 7

Avance y retroceso: La década de 1970


La década de 1970 es la época en que, por primera vez, surgen
en el Adventismo dos  corrientes de pensamiento consistentes acerca del evangelio. Una corriente lleva los avances cristológicos de la década de 1950 y los avances soteriológicos de la década de 1960 a su fin lógico. La otra corriente retrocede desde esos avances hacia el adventismo de antes de la década de 1950. Esta división lleva el adventismo al umbral de un zarandeo sin precedentes. Ahora es nuestra tarea seguir los pasos de este asombroso desarrollo.

Brinsmead capitula ante Heppenstall y Ford

Al principio de la década de 1970, Robert Brinsmead y sus colegas se sumergieron profundamente en el estudio de la Reforma protestante y las implicaciones de la teología paulina en el estudio de la teología reformada  y la teología católico-romana. Brinsmead llegó a una renovada interpretación de los temas en disputa del siglo dieciséis - en particular, el significado y las implicaciones de la justificación por la fe sola.

El redescubrimiento del evangelio de la Reforma causó una revolución en el modo de pensar de Brinsmead. (1) Por primera vez, entendió el verdadero significado de la justificación por la fe sola - su primacía, su centralidad, y su todo suficiencia. Se le hizo claro lo que Lutero quería decir al llamar a la justificación el artículo sobre el cual la iglesia permanecería en pie o se caía.

Lo que esto significaba para Brinsmead y sus colegas era que, mientras que en el pasado la Reforma siempre había sido considerada a la luz de la distintiva perspectiva adventista, ahora la perspectiva adventista debía ser vista a la luz de la Reforma. Brinsmead llegó a creer que cualquier edificación sobre la Reforma tenía que ser una edificación sobre la Reforma, y no en lugar de la Reforma. Cualquier contribución que el adventismo tuviera que hacer al mundo no debía entrar en conflicto con el artículo central de la teología de la Reforma - el evangelio de la justificación por la fe sola.

Teológicamente, el redescubrimiento de Brinsmead significaba lo siguiente:

1. Brinsmead se vio obligado a aceptar la posición de Heppenstall, Ford, y los demás en lo relativo a la cuestión de la perfección. Aunque Brinsmead había enseñado un perfeccionismo modificado (es decir, perfección en el juicio, pero no antes), ahora se daba cuenta de que aun un perfeccionismo modificado y una justificación por la fe sola no pueden vivir felizmente en la misma casa. Niebuhr le enfocó el problema: para los reformadores, justificación era una justicia por fe, y vieron su propia verdadera naturaleza y su verdadero destino en términos de esta justicia y no en los de ninguna justicia tangible ni empírica en el proceso histórico. Heppenstall y Ford tenían razón: no puede haber ninguna perfección hasta que Cristo venga.

2. Usando el evangelio de la Reforma como canon, Brinsmead y sus colegas llegaron a la conclusión de que la manera adventista tradicional de tratar la "justificación por la fe" estaba en armonía con la teología católico-romana y no con la teología de los reformadores. Como hemos tenido amplia ocasión de hacer notar, el adventismo tradicional veía la justificación como el perdón inicial de los pecados del pasado, mientras la regeneración y la santificación eran consideradas como la habilitación de una persona para sostenerse en el juicio venidero. Se pensaba que la justificación por fe abarcaba tanto la justificación como la santificación. Brinsmead llegó al convencimiento - por medio de Lutero y Calvino (y también de Chemnitz) - de que la justificación por la fe significa justificación solamente. Entendió que continuar en los patrones de pensamiento del adventismo tradicional era mezclar la ley y el evangelio, y depender en última instancia del desarrollo del carácter y la renovación interna más bien que en una justicia ajena para ser aceptados por Dios, y ser obligados a postular el perfeccionismo en esta vida. Llegó a la conclusión de que el sentido adventista tradicional de "justificación por la fe" conduce a enfocarse en el santo - la terrible idea de volvernos hacia nosotros mismos.

3. La justificación por la fe solamente en la justicia ajena de Cristo llamó al cuestionamiento a la tradicional escatología adventista de Brinsmead. En su teología de los 60, había tratado de mantener bajo un mismo techo al pecado original y al perfeccionismo en el juicio. Ahora el evangelio de Pablo y los reformadores dejaban claro que el perfeccionismo en el juicio de Brinsmead era un  intento por tratar el pecado original de tal manera que equivalía a competir con la obediencia activa y la obediencia pasiva del Sustituto Dios-hombre. El perfeccionismo en el juicio de Brinsmead era una medida de urgencia para manejar el problema del pecado original. Pero el evangelio de los reformadores le enseñaron que la justificación por fe en los méritos de Cristo era el único método efectivo tratar con el pecado original. (2) Mientras que en el adventismo tradicional la naturaleza inicial, mera de la justificación era una concesión a la aceptación final sobre la base de la renovación interna, la renovación final de Brinsmead era una concesión a la justificación, pero  también la viciaba. (3) Según él, todo esto "debía desaparecer". La justificación era vista como claramente escatológica. Era el veredicto de Dios en el día del juicio final, recibido aquí y ahora por fe.

Para Brinsmead, este punto de vista escatológico de la justificación significaba que nunca puede estar subordinada a la santificación, contrariamente a la mucha teología adventista tradicional. Aunque el creyente permanece justificado, la justificación es siempre aquéllo hacia lo cual se está moviendo. Como el salmista, el creyente puede esperar, no tanto un juicio de él por el Juez, sino a un juicio a favor de él. El juicio es vindicación - una vindicación de la que el creyente ya disfruta por fe.

4. Brinsmead testifica que este redescubrimiento lo volvió a él y a sus colegas fuera de sí mismos hacia los demás. Con la llegada del evangelio de Pablo y los reformadores, la mentalidad sectaria comenzó a desvanecerse. Brinsmead buscó la comunidad del pueblo de Dios dondequiera que pudiera hallarla. Además, él y sus compañeros agitadores se acercaron a los cristianos adventistas que se habían separado para confesar sus errores y procurar la reconciliación. (4)

La principal expresión de la nueva mirada de Brinsmead hacia fuera fue su empresa de publicación, la revista Present Truth. El principal propósito de Present Truth era recordarles a los protestantes su herencia reformista y cuán lejos se habían alejado de ella.

La capitulación de Brinsmead: Una amenaza más peligrosa

El lector no dejará de notar la ironía del subtítulo anterior. Durante el conflicto de la década de 1960, los líderes de la iglesia se volvieron a Heppenstall y a Ford en busca de una respuesta a las enseñanzas de Brinsmead. Así, pues, cuando éste capituló ante la posición de Heppenstall y Ford, uno naturalmente habría esperado que los líderes quedaran encantados. Sin embargo, habría de tener lugar una casi increíble serie de sucesos: ¡Brinsmead llegó a ser considerado una amenaza mayor que nunca!

Dentro del adventismo en general, la opinión concerniente a Present Truth variaba. El Dr. Desmond Ford, de Avondale, y L. C. Naden, presidente retirado de la División Australasiática, consideraron que el nuevo cambio de Brinsmead estaba en la dirección teológica correcta. En algunos respectos, era una vindicación de la posición de Ford y Naden sobre la perfección. Sin embargo,
salió una alarma de las oficinas centrales de la iglesia en Washington, D. C. por el punto de vista "unilateral" de Brinsmead con respecto a la justificación por la fe. En las oficinas centrales, Kenneth Wood y Herbert Douglass, editors of Review and Herald, comenzaron a hacer énfasis en cosas tales como la piedad de una vida victoriosa, el desarrollo de personas que demostrasen las vidas impecables en la última generación, el ejemplo de Cristo en una vida impecable, y la naturaleza humana impecable de Cristo. Los principales teólogos de la División Australasiática comenzaron a alarmarse por el énfasis perfeccionista de Review and Herald y la ruina de los progresos cristológicos de Questions on Doctrine en la década de 1950. Y en Norteamérica, el Dr. Heppenstall y algunos teólogos principales de Andrews University tampoco se sentían felices con el perfeccionismo de Review and Herald y su enseñanza sobre la naturaleza humana pecaminosa de Cristo.

La polarización se vuelve obvia

Si quedaba alguna duda de si los líderes de la iglesia estaban adoptando una posición opuesta hacia el nuevo mensaje de Brinsmead, esta duda se disipó en 1974 con la aparición de un número especial de Review and Herald sobre el tema "Justificación por la fe". (5) Era diametralmente opuesto a la enseñanza de Brinsmead. El número especial definía la justificación por la fe como

... más que una doctrina, es una relación con un propósito. Y si volvemos nuestras espaldas al pecado, y dejamos que Cristo viva su vida en nosotros, no importa qué nombre le demos al proceso. (6)

Parece que Present Truth Magazine estaba siendo criticada por ser cerebral en su enfoque del evangelio porque hablaba mucho de la "doctrina" de la justificación por la fe.

En el mismo número especial, Don Neufeld describe la justificación por la fe como una "experiencia", (7) y la "no condenación" de Romanos 8 es interpretada a la manera de Trento. (8) C. Mervin Maxwell dice inequívocamente: "La justificación por fe es mucho más que el perdón de los pecados; es también victoria sobre el pecado". (9) Podrían citarse otros pasajes para mostrar que Review and Herald persiste en la tradicional definición adventista de justificación por la fe en el sentido de que incluye tanto la justificación como la santificación. (10) Mirado desde una perspectiva académica, no es exagerado decir que este número especial se especializa en la santificación y el desarrollo del carácter y un énfasis hagiocéntrico (centrado en el creyente). (11)

Herbert Douglass ha surgido en la década de 1970 como quien está tratando de hacer que el perfeccionismo de Andreasen-Branson sea dominante en el pensamiento adventista. En el número especial de Review and Herald, Douglass propone decirles a sus lectores "Por qué Dios es urgente y sin embargo espera". La respuesta es: "Dios espera un pueblo que demuestre que lo que Jesús hizo ... puede ser hecho por sus seguidores ...". (12) Dice Douglass: "Dios espera un pueblo así". (13) Este es el perfeccionismo aquí y ahora de los primeros años (y los años posteriores) de la década de 1960, y caracteriza la posición de la iglesia de acuerdo con Review and Herald en la década de 1970.

Algunas semanas después de la distribución del número especial de Review and Herald en Australia, Brinsmead produjo un folleto titulado A Statement to My S. D. A. Friends [Una declaración para mis amigos A. S. D.]. (14) Sin mencionar a Review and Herald, cuestionó la suposición de que la santificación pertenezca al artículo paulino sobre la justificación por la fe. Brinsmead afirmaba que la justificación por la fe no es nada hecho por nosotros o sentido por nosotros y que nunca es una cualidad en nosotros. La justificación en "justificación por la fe" es el hacer y el morir de Cristo, que es nuestro por la fe en el misericordioso veredicto de Dios. Brinsmead declaraba que esta posición es fiel a la de los reformadores del siglo dieciséis y todos los protestantes que los han representado durante unos cuatrocientos años. Llamar santificación a la "justificación por la fe" es ponerse del lado del Concilio de Trento contra la Reforma protestante.

Si el número especial de Review and Herald representa la posición de los líderes de la iglesia - y los eventos subsiguientes demuestran que lo es - entonces tenemos que decir que la ambivalencia de la posición de los líderes en la década de 1960 ha desaparecido. El liderazgo que una vez se adhirió al perfeccionismo aquí y ahora  y al no perfeccionismo aquí y ahora (siguiendo a Heppenstall y a Ford) ahora defiende el perfeccionismo aquí y ahora solamente. Esto confronta al investigador académico con ciertas preguntas. ¿Qué significaba el hecho de que los líderes abrazasen la enseñanza de Heppenstall y Ford en la década de 1960? ¿Por qué esa posición ha caído fuera de servicio ahora? Otra pregunta más se suscita por  el hecho de que los líderes de la iglesia ahora defienden el perfeccionismo de la generación final que Brinsmead defendía en la década de 1960, y Brinsmead ahora defiende el antiperfeccionismo que los líderes defendían en la década de 1960. ¿Qué indujo a los líderes a adoptar la posición de Brinsmead? Intentar responder estas preguntas puede que nos lleve fuera de nuestra tarea inmediata. Simplemente observamos las interesantes fluctuaciones.

La década de 1970 es un período de dos teologías distintas en la Iglesia Adventista. Hasta un punto u otro, la teología de Brinsmead siempre ha tenido voz dentro del adventismo, especialmente en la década de 1960. Pero, en la de 1970, por una definición más precisa de "justificación por la fe" y del perfeccionismo, ha sido purificada de los elementos viciantes que le estorbaban. Lo mismo sucede con la teología de los líderes Adventistas del Séptimo Día. La teología representada en Review and Herald siempre ha estado presente en el Adventismo. Pero surge en la década de 1970, purificada de los elementos (por ejemplo, el antiperfeccionismo) que habrían retardado su articulación efectiva.

Además, estas dos teologías nunca han estado en la relación mutua en que lo están en la actualidad. Cada una permanece purificada de elementos que lógicamente pertenecían a la otra, y cada una de ellas compite ahora por la devoción de los miembros de iglesia. Así, pues, esta década es un tiempo de polarización sin precedentes.

Al principio de este capítulo, mencionamos que cada una de estas teologías tiene una relación bastante diferente con las dos décadas precedentes. La teología de Brinsmead, dentro y fuera de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, es una teología lógicamente consistente tanto con los avances cristológicos de la década de 1950 y los avances soteriológicos de la década de 1960. Por otra parte, la teología del número especial de Review and Herald (y los artículos subsiguientes) tiene que soslayar veinte años de desarrollo teológico dentro de la Iglesia Adventista. Tiene que hacer a un lado tanto los avances cristológcos de la década de 1950 como los avances soteriológicos de la década de 1960. Así, pues - como veremos más tarde - el Dr. Herbert Douglass busca demostrar que Questions on Doctrine es, como lo llamó M. L. Andreasen, una "herejía condenable". Y los editores de Review and Herald también expresan su negación del pecado original y su desacuerdo con el antiperfeccionismo de un creciente número de defensores.

"La lealtad de camaradas entre Ford y Brinsmead" (15)

En 1975, la Sra. Desmond Ford publicó un trabajo titulado The Soteriological Implications of the Human Nature of Christ [Las implicaciones soteriológicas de la naturaleza humana de Cristo] (16. El trabajo incluía un apéndice de respuestas a preguntas, por el Dr. Ford. El enlace entre este manuscrito y el departamento de teología de Avondale College era obvio.

El trabajo se concentraba en tres áreas altamente controvertidas. (1) Examinaba la cuestión del estado impecable de la humanidad de Cristo y repudiaba claramente la doctrina de la naturaleza humana impecable de Cristo. (2) Trataba del significado de justificación por la fe, declarando claramente que la justificación por la fe es justificación sola. (3) El manuscrito recogía la cuestión del perfeccionismo y repudiaba la idea de la perfección en esta vida.

Este trabajo produjo una acalorada reacción de parte de algunos laicos influyentes y obreros de iglesia retirados en Australia. Los líderes de la iglesia en Norteamérica y Australia hicieron arreglos para tener una conferencia de administradores y teólogos en un intento por solucionar el problema. Esta conferencia tuvo lugar en Palmsdale, California, en Abril 23-30, 1976.

Sin embargo, antes de la conferencia de Palmsdale, un  grupo grande de líderes de iglesia de Australia se reunió en Avondale en Feb. 3-4 para escuchar las acusaciones levantadas contra el Dr. Ford por un grupo encabezado por J. W. Kent. La principal acusación era concerniente a la interpretación de Ford de la justificación por la fe. El Dr. Ford fue atacado en un trabajo preparado por F. A. Basham como sigue:

Hay muchos que encuentran imposible distinguir entre la enseñanza contenida en el manuscrito [de la Sra. Ford] y la de Robert Brinsmead. El Departamento de Teología y Brinsmead están completamente de acuerdo tanto en lo que afirman que es cierto como en lo que denuncian como falso. El manuscrito del Departamento de Teología argumenta que los que incluyeron la obra del Espíritu Santo dentro del significado de la frase "la justicia que es de fe" están enseñando un "falso evangelio". Brinsmead lo llama "romanismo sin tapujos". Ambas afirmaciones reflejan una actitud de hostilidad hacia la posición denominacional. (17)

El pastor Basham vio claramente los hechos de la situación cuando dijo: "Así que tenemos una clara división entre lo que el Dr. Ford enseña en Avondale y lo que enseñan nuestros hermanos norteamericanos". (18) Hay pocas dudas de que la evaluación de Basham d ela situación teológica es correcta. Ford sostiene una teología bastante diferente de la de Review and Herald. Basham escribió además:

La situación que existe ahora en la iglesia puede expresarse simplemente. Si la posición asumida por el manuscrito enviado desde "el Departamento de Teología" de Avondale es correcta, entonces la posición histórica de la Iglesia Adventista es errónea. Los dos puntos de vista son irreconciliables. (19)

El pastor Basham ha puesto el dedo en el corazón de la crítica situación que enfrenta la Iglesia Adventista del Séptimo Día en la actualidad. Por supuesto, el significado de "correcto" y "erróneo" para Basham debe establecerse por medio del conocimiento de la meta y la intención expresas del movimiento. Recuérdese que la meta declarada del adventismo es perpetuar la obra de la Reforma con fuerza y claridad sin precedentes.

Al enlazar a Ford con Brinsmead, Basham da a entender que Ford se ha convertido en seguidor de la teología de Brinsmead. (20) Pero la evidencia de nuestra investigación de las décadas de 1950 y 1960 no respalda esta conclusión. Como se ha señalado, Ford enseñaba los aspectos fundamentales de esta teología - con la (aparente) aprobación de los líderes de la iglesia durante la década de 1960. En realidad, los
mismos líderes de la iglesia habían estado enseñando aspectos de esa teología. Además, la perspectiva cristológica de Ford se sostiene en el avance cristológico de la década de 1950. La idea, bastante extendida, (que Basham anuncia) de que Ford se ha apartado del adventismo para seguir la teología de Brinsmead en la década de 1970 no puede ser sustentada con evidencia. Lo más que podría decirse es que el redescubrimiento, por parte de Brinsmead, del evangelio de la Reforma y su articulación en la revista Present Truth dieron a la perspectiva de Ford una agudeza de la que había carecido hasta ahora. De aquí que, cuando Basham dice: "Tal abandono [es decir, la teología de Ford] de la fe entregada una vez a los santos ... debe ser resistido con una decisión que es invencible", (21) no está siendo  completamente justo con la posición del profesor de Avondale. Por lo menos en algunas partes principales, la enseñanza de Ford ha sido entregada a los santos por los líderes de la iglesia en Questions on Doctrine y la posición antiBrinsmead de la década de 1960.

La conferencia de Palmdale tuvo lugar con una opinión dividida concerniente al significado de justificación por la fe y la cuestión de la naturaleza humana de Cristo. (22) Pero, cuando el Dr. Ford regresó a Australia, lo hizo con la convicción de que la conferencia había estado de acuerdo en que la justificación por la fe, como se usa en la Biblia, significa justificación sola. Sin embargo, algunos delegados norteamericanos regresaron a sus áreas igualmente convencidos de que Palmdale había sostenido la tradicional posición adventista sobre el significado de la justificación por la fe. (23)

Durante un tiempo, Palmdale no tuvo claro hasta qué punto los representantes de Review and Herald sustentaban la posición de Ford de que la justificación por la fe equivale a la justificación sola. Pero Ford estaba confiado en que ésta era la concesión predominante en Palmdale, y dijo que era una "primicia" en la historia del Adventismo del Séptimo Día. (24)

Un buen debate siguió en Australia, aunque muchos miembros de iglesia no se daban cuenta de este controversial trasfondo. Este conflicto y esta polarización eran vistos  desde perspectivas muy diferentes. Como observó Ray Martin en Objective Digest Report (1976):

Algunos la ven [la doctrina de Ford] como la destrucción de todo lo que el adventismo ha representado, y como la omega de la apostasía, mientras que otros la ven como el principio de la verdad que iluminará la tierra con la gloria de Dios y creen que, por fin, el adventismo ha alcanzado la mayoría de edad.

Al pasar el tiempo, comenzó a ser obvio que algunos influyentes líderes de Review and Herald no aceptaban la posición de Ford sobre la justificación por la fe. Tanto el editor de Review and Herald, Kenneth H. Wood, y el presidente de la Conferencia General, Robert H. Pierson, dejaron claras sus posiciones. Wood cita la Enciclopedia Adventista del Séptimo Día, que dice que la justificación por la fe incluye tanto la justificación como la santificación, (25) y luego sigue diciendo: "La declaración de Palmdale está de acuerdo con este punto de vista". (26) Continúa diciendo: "

Creemos que es justo decir ..., que los que sostienen que la santificación es parte de la "justicia por la fe" parecen hacer mayor énfasis en la vida santa que los que la excluyen; también, parecen hacer mayor énfasis en el papel que juega la humanidad en la cooperación con la divinidad en el plan de salvación. Esto es quizás porque consideran el evangelio, no meramente como las buenas nuevas de que, por medio de Cristo, las almas arrepentidas pueden tener una nueva posición delante de Dios, sino que, por medio de Él, los pecadores pueden ser transformados. (27)

En artículos subsiguientes sobre la declaración de Palmdale, (28) Wood deja claro cómo entiende él el evangelio. Escribe así:

Creemos que es importante entender que el evangelio (las buenas nuevas) no es meramente un anuncio de lo que Cristo ha hecho en el pasado para salvar a un mundo perdido, un anuncio de lo que Cristo desea hacer, y quiere hacer, y puede hacer, en el presente. No es sólo un anuncio de Belén y el Calvario; es un anuncio de un Salvador viviente, un Salvador que puede salvar hasta lo último (Heb. 7:25), un Salvador que puede salvar, no sólo del castigo del pecado sino del poder del pecado (Tito 2:11-14), un Salvador que no sólo perdona sino que limpia del pecado (1 Juan 1:9), un Salvador que puede guardarnos de ceder a la tentación (Judas 24), un Salvador que ministra a nuestro favor en el santuario celestial (Heb. 8:1, 2). (29)

El presidente de la Conferencia General, Robert H. Pierson, hace su influyente contribución en un artículo titulado "What Is Righteousness by Faith" [¿Qué significa la justificación por la fe?] (30) Pierson sigue a Wood al referirse a la Encyclopedia adventista y luego dice:

Por estas palabras, es claro que la Iglesia Adventista del Séptimo Día acepta las dos fases en la experiencia de la justificación por la fe. Una es la "experiencia instantánea", conocida como la justificación, ... [que es] la justicia imputada de Jesús ... y los resultantes paz y gozo en Cristo. ...

La segunda fase es una "experiencia de toda la vida en el vivir cristiano". ... (31)

Por lo menos dos cosas quedaron claras después de Palmdale: (1) La declaración de Palmdale no solucionó nada. A pesar de su preámbulo, que confiesa que el adventismo ha carecido por años de una clara declaración sobre la justificación por la fe, la declaración misma perpetúa, más bien que corrige, esa situación. (2) La contribución de Brinsmead a la teología de Ford se hizo evidente. Como ya hemos hecho notar, la idea de que Ford se ha convertido en seguidor de Brinsmead es una afirmación demasiado amplia para que la sostenga la evidencia. Sería igualmente cierto decir que Brinsmead se ha convertido en seguidor de Ford. Lo que ha quedado claro después de Palmdale es la manera precisa en que Brinsmead sí influyó en Ford. Por medio de la revista Present Truth, Brinsmead hizo que Ford afinara su definición de la justificación por la fe y le diera la forma de la interpretación bíblica reformada de ella como justificación sola. Brinsmead enseñó a Ford a considerar el concepto adventista de justificación por la fe a la luz de la Reforma, y no la posición de la Reforma a la luz del uso que el adventismo le daba. Lo que esto significó para Ford fue, no sólo que llegó a ver la justificación por la fe como justificación sola, sino que también llegó a ver la importancia decisiva de la justificación por la fe para la vida y la doctrina. (32) Toda su perspectiva se afinó más y quedó alterada más que fundamentalmente  por su encuentro con Present Truth.

Palmdale añadió combustible al fuego de la controversia dentro del adventismo por la importancia bíblica y reformada de la justificación por la fe. Muchos que antes no habían sido conscientes de la división ingresaron a las filas de acuerdo con sus convicciones.

La controversia alcanzó un nuevo nivel de tensión con la publicación de las Lecciones de Escuela Sabática para Adultos para abril-mayo-junio de 1977, tituladas Jesús, el hombre modelo. (33) Si alguna vez hubo dudas en la mente de algunos adventistas en cuanto a dónde está el liderazgo norteamericano en la década de 1970 en relación con Questions on Doctrine y los avances soteriológicos de la década de 1960, este folleto trimestral disipó esas dudas de una vez por todas.

En el folleto, Herbert Douglass presenta la idea de que la segunda persona de la Deidad se despojó de sus poderes y prerrogativas divinos. (34) "Nuestro modelo no es meramente un ejemplo que nos invita pero que nunca será alcanzado". (35) Jesús era completamente humano y poseía una naturaleza pecaminosa común a todos los hombres. Por esto, Jesús está calificado para ser nuestro ejemplo, y el evangelio (las buenas nuevas) es que Él ha demostrado que nosotros podemos derrotar al pecado y vivir exactamente como Él lo hizo (impecable). (36)

El folleto trimestral causó no poca conmoción en los círculos adventistas. M. G. Townend (el director de Escuela Sabática para la División Australasiática) envió una carta al presidente Pierson y se le informó, entre otras cosas, que "Yo [Pierson] he examinado personalmente las lecciones hace algunos días,  y he recibido una bendición de las ideas allí presentadas". (37)

Como es costumbre, el folleto fue enviado a eruditos y teólogos para que lo examinaran antes de su borrador final. Los principales teólogos de la División Australasiática sintieron una profunda aprensión y trataron de hacer detener su publicación. Sin embargo, el presidente de la Conferencia General informaron a los líderes australasiáticos que retirar el material en aquella etapa particular sólo agravaría la situación.

Finalmente, el folleto trimestral fue enviado a las iglesias adventistas locales en todo el mundo, y las objeciones a él siguieron por parte de ministros, teólogos, y laicos. Típica es una carta abierta dirigida a "Mis colegas ministros", por Victor P. Kluzit, (38) y la discusión grabada sobre el folleto por el Dr. Richard Neis, que expresa temores de herejía.(39) Kluzit llama a los líderes al arrepentimiento, y el Dr. Neis se pregunta si algunos de los puntos de vista de Douglass acerca de Cristo "se acercan a la blasfemia". Un pastor australiano, Max Hatton, llama al folleto trimestral "no verdaderamente protestante" y deplora su superficial punto de vista sobre el pecado. (40)

Hay una obvia confusión en las mentes de muchos miembros comunes de la iglesia, y existe una grave división acerca de la naturaleza misma y el significado del evangelio entre los ministros y teólogos adventistas. Hay también confusión acerca de la relación entre gran parte de la enseñanza en la década de 1970 (41) y las respetadas obras publicadas en las primeras décadas del adventismo contemporáneo - obras como Questions on Doctrine.

Rompiendo la síntesis

Antes de 1970, al punto del vista del adventismo sobre el evangelio era una síntesis de elementos protestantes y católico-romanos. La síntesis se podía hallar hasta en teólogos que estaban más cerca de la perspectiva reformada (por ejemplo, Heppenstall, Ford, y LaRondelle).

Cuando la justificación y la santificación son sintetizadas (como en el Concilio de Trento), la santificación inevitablemente absorbe la justificación. De aquí que, antes de la década de 1970 - y para los que persisten en la síntesis después de 1970 - la santificación se convierte en el énfasis predominante por encima de la justificación.

Esta síntesis de justificación por la fe con la santificación era el punto flaco en el "ataque" teológico de Heppenstall, Ford, y LaRondelle contra Brinsmead durante la década de 1960. (42) Aunque estos teólogos adoptaron una fuerte posición antiperfeccionista contra la enseñanza de Brinsmead, el hecho de que todavía sintetizaban la justificación con la santificación en su interpretación de la justificación por la fe viciaba su énfasis antiperfeccionista. Esto era especialmente así cuando consideramos que Brinsmead podía invocar la tradición adventista para sustentar su perfeccionismo. Mientras vio al evangelio como incluyendo en su esencia la santificación del creyente  y luego reflejado en este énfasis en la historia adventista, no pudo ser movido de su creencia en la perfección en esta vida.

Esta observación es respaldada por lo que ocurrió en la década de 1970. Ford parece haber aprendido la lección de la década de 1960 y salido con una clara distinción entre la justificación por la fe y la santificación. (43) Sin embargo, Heppenstall y LaRondelle todavía tienen que dejar claro que ellos también han roto la síntesis. (44) Así, pues, no es sorprendente que sus argumentos antiperfeccionistas carezcan del apalancamiento necesario para arrancar a sus colegas adventistas de la idea de que habrá una generación final que, a causa de condición impecable, no necesitará los beneficios de un Mediador. (45)

El nuevo elemento en el enfoque del adventismo hacia el evangelio en la década de 1970 es la ruptura de la síntesis entre la justificación por la fe y la santificación en la interopretación de la justificación por la fe. Esta es la primera vez en la enseñanza del adventismo que esta ruptura ha tenido lugar. (46) Donde esto ha ocurrido, hay un regreso descarado al evangelio de la Reforma.

Desde 1970, Brinsmead nunca ha dejado de subrayar la suficiencia de la justificación y atacar cualquier cosa que de alguna manera degrade este artículo de la fe cristiana. (47) Tanto para Brinsmead como para Ford, la centralidad de la justificación reside en el corazón del evangelio de Pablo y los reformadores. Sin embargo, en vista del hecho de que Brinsmead y Ford rompieron la síntesis entre la justificación por la fe y la santificación, ahora hay un esfuerzo definido de parte de otros por mantenerlo.

El adventismo en la actualidad

Ahora es nuestro propósito examinar el lugar del evangelio de la Reforma en el adventismo en el momento del más reciente desarrollo del movimiento. Hemos visto que, antes de 1950, la teología adventista tendía a relegar la justificación a la posición de mera. La justificación era vista como sólo para los pecados pasados. Pero, ¿y qué acerca del adventismo en la actualidad?

El presidente de la Conferencia General de los Adventistas del Séptimo Día, el pastor Robert H. Pierson, cita con aprobación el Signs of the Times de 1874 que dice: "Dependemos de Cristo, primero, para la justificación de nuestras pasadas ofensas, y segundo, para la gracia por medio de la cual podamos rendir una obediencia aceptable a su santa ley en los tiempos venideros". (48)

La tendencia a subordinar la justificaión a la santificación recibe su más fuerte representación en el número especial de Review and Herald sobre "La justificación por la fe", que, como ya hemos mencionado, fue publicado por los que deseaban contrarrestar al Brinsmead del nuevo rostro de la década de 1970. (49)

También, en "Why You Lose What You Don´t Use" [Por qué se pierde lo que no se usa], J. W. McFarland y J. R. Spangler, al contrastar la justificación con la santificación, tienen esto que decir:

La justificación borra el oscuro cuadro del pasado, la santificación pinta un brillante cuadro para el presente y el futuro; la justificación limpia ... el registro, la santificación mantiene el registro limpio. ... La santificación y la justificación es Cristo actuando en mi vida. (50)

Aunque esta degradación de la justificación es compartida por el editor de Review and Herald, Kenneth H. Wood, (51) así como por George McCready Price, (52) ninguna de estas presentaciones es tan explícita como la de Don Hawley en su libro Getting It all Together [Poniéndolo todo junto]. Dice Hawley:

La santificación, pues, es crecer en Cristo; ser más y más como Él por medio del impartimiento (la recepción real) de su justicia. Con el paso del tiempo, deberíamos requerir menos énfasis en la justicia imputada de Cristo y en realidad deberíamos poseer más y más de su justicia impartida. (53)

En el artículo "Saved Solely by Grace" [Salvados sólo por gracia], publicado en Review and Herald, Arnold V. Wallenkampf dice que "gracia que sostiene" es superior a "gracia que perdona", y que ¡deberíamos llegar a un punto en que podamos vivir sin la gracia que  perdona! (54)

En nuestro capítulo sobre el evangelio de la Reforma, vimos que una subordinación tan severa de la justificación a la santificación en interés de la santificación es ajena al modo de pensar de los reformadores. (55) El profesor de teología del Avondale College, Dr. Desmond Ford, es consciente de esto. En los trabajos que presentó en la conferencia de Palmdale, incluyó un apéndice para indicar la naturaleza "Atlas" de la jutificación. (56) De manera similar, en The Soteriological Implications of the Human Nature of Christ [Las implicaciones soteriológicas de la naturaleza humana de Cristo], Ford deja claro que la justificación es la base de la vida santa del creyente y que los ojos del cristiano deben enfocarse en ese hecho. (57)

En el adventismo de antes de 1950, encontramos una interpretación de la justificación en el sentido de que es la acción creativa de Dios en la vida del creyente. Aunque no es impropio hablar de la justificación como la acción creativa de Dios, hemos mostrado que esto se refiere al creyente en Cristo y no al creyente en sí mismo. (58) La misma tendencia que se encontraba en el adventismo de antes de 1950 está presente también en el adventismo contemporáneo: la idea de que justificación es hacer al creyente ontológicamente justo en sí mismo.

Clifford y Standish son explícitos. La justificación es una obra interior que involucra un cambio en el carácter de la persona justificada. (59) Sin embargo, para el Dr. Ford, "justificación es declarar justo, no hacer justo". (60)

El pastor J. W. Lehman de la iglesia de Campus Hill en Loma Linda, California, está de acuerdo con el Concilio de Trento en su interpretación de la justificación. En una serie de cuatro estudios grabados sobre el tema "What is Righteousness?" [¿Qué es justificación?] (1975), dice que justificación es amor, y que el creyente se vuelve justo al tener el amor de Cristo derramado en su corazón. (Este énfasis de Lehman es de lo más interesante pues, en la misma serie, ataca directamente al pelagianismo y al semi-pelagianismo). Además, en su mensaje de servicio sabático en Campus Hill, llamado "The Other Half of Forgiveness" [La otra mitad del perdón) (61), el pastor Lehman habla de "algunos malentendidos y problemas de la justificación por la fe". Dice: "Hasta ahora, hemos estado subrayando que la justificación por la fe es una operación doble - perdón por el pecado y hacernos justos". (62) El vicepresidente de la Conferencia General, Neal C. Wilson, respaldó la perspectiva de Lehman en un folleto que circuló anunciando sus estudios grabados. (63)

La interpretación católico-romana de la justificación recibe la más clara expresión en un trabajo de Erwin R. Gane titulado "Is There Power in Justification?" [¿Hay poder en la justificación?]. Dice Gane: "Lejos de ser meramente un acto forense de Dios, la justificación involucra la divina intervención más directa y transformadora en la vida del creyente cristiano ... (64) Gane dice que la justicia del creyente es una justicia ajena porque procede de fuera. (65) Pero, una vez que es concedida, se convierte en propiedad del creyente, así como de Cristo. (66) Esta justificación infundida habilita inmediatamente al creyente para el cielo. Gane iguala la infusión de la justificación con el nuevo nacimiento de Juan 3:5, e invoca el pasaje de Tito 3:5-6 para sustentar su caso. Esta nueva vida-justicia pertenece al creyente sólo mientras "permita que Jesús reine". (67) Gane concluye su artículo diciendo que E. J. Waggoner, de la fama de 1888, enseñaba que la justificación es la obra del Espíritu en el corazón del creyente y que A. G. Daniells, que pretendía revivir el mensaje de 1888, veía la justificación como "una experiencia vital en la cual se debe entrar". (68)

Este tipo de enfoque del significado de la justificación está bastante extendido en el adventismo contemporáneo. (69) Desde este enfoque del significado, hay sólo un corto paso hasta la idea de que la aceptación en el juicio final se basa en la renovación del carácter. Si se admitiese que la justificación nos pone en paz con Dios (lo que el adventismo siempre ha creído) y que la justificación incluye o es "la gracia de la justificación", entonces se sigue que la aceptación debe basarse en la renovación interna.

En la preparación de este libro, este autor dirigió una extensa encuesta en los Estados Unidos en 1976 sobre el tema de la justificación por la fe y el estudiante de seminario. Once escuelas fueron encuestadas con un cuestionario de selección múltiple. La pregunta seis era:

Mi aceptación en el juicio final se basará en
(a) mi carácter.
(b) el carácter que Cristo ha operado en mí.
(c) el perdón de los pecados.

Sesenta y seis por ciento de los estudiantes de seminario Adventistas del Séptimo Día en la Universidad de Andrews que llenaron el cuestionario respondieron con (b): "el carácter que Cristo ha operado en mí".

No es difícil entender esta respuesta de los estudiantes de seminario Adventistas del Séptimo Día cuando el editor de una de las principales publicaciones de la iglesia escribe como sigue:

Todos nosotros nos enfrentamos al juicio final, cuando Dios, el Anciano de Días, se siente en el tribunal de la justicia eterna y todos los que alguna vez vivieron sean llamados a comparecer delante de Él. ...

¿Seremos hallados culpables en aquel día terrible? ¿O nos enfrentaremos al terrible juez con nuestros pecados purificados y nuestros registros limpios?. ...

Por fortuna, hay esperanza. Si uno se disculpa por sus pecados y pide ayuda, el mismo Jesús le ayudará. "Yo te ayudaré". Isaías 41:10. Pablo halló el ofrecimiento de Cristo más que suficiente. Se regocijó: "Puedo hacer todas las cosas en aquél que me fortalece". Fil. 4:13. No se necesita continuar en los antiguos caminos de pecado. Se puede ser una nueva persona en Cristo, conquistador de toda mala tendencia, hermoso con un carácter como el del amado Jesús.

Y luego se puede enfrentar el juicio sin temor. ¡Gracias a Dios por Jesucristo! (70)

J. L.Tucker dice en It Happened at Night [Sucedió de noche]:

Describiendo las características de los salvados que son bienvenidos por Jesús a su segunda venida, leemos: Tienen la paciencia de los santos, guardan los mandamientos de Dios y tienen el testimonio de Jesucristo. Apoc. 14:12. Y ... "Bienaventurados los que guardan sus mandamientos para que tengan derecho al árbol de la vida ...". Apoc. 22:14. Lo sabio que cada uno de nosotros debe hacer es permitir que Jesús entre en nuestros corazones y viva su hermosa vida en nosotros. (71)

El contexto entero de esta declaración muestra que Tucker quiere decir que la salvación se obtiene por el proceso subjetivo del Cristo interior.

Si hay una diferencia entre estos escritores sobre la aceptación final y escritores como Herbert Douglass y C. Mervyn Maxwell, es que los primeros no llevan su perspectiva teológica a su conclusión última, mientras que los últimos llevan adelante sus puntos de vista con estricta consistencia lógica. Los primeros son implícitamente perfeccionistas, mientras los últimos son explícitamente perfeccionistas.

Si la justificación por la fe es "la bondad de Jesús en nosotros" (R. A. Anderson), entonces ciertamente hay un corto paso hasta la idea de que la justificación por la fe es la perfección. La generación final, pues, está formada por lo que duplican perfectamente el carácter impecable de Jesús. El Dr. Douglass escribe que los adventistas

... demostrarán al mundo que no es necesario que el hombre continúe siendo pecador, que el hombre puede alcanzar una experiencia impecable, justa, por la misma fe que Jesús ejerció, es decir, la justificación por la fe.

La invitación adventista para el mundo es "vengan a ver" ... (72)

Douglass expresa su ecuación entre la justificación por la fe y el perfeccionismo en "The Unique Contribution of Adventist Eschatology" (73) Para el editor asociado de Review and Herald, el

"'evangelio del reino' es la buena nueva de que Dios puede cambiar a hombres y mujeres a su semejanza si le permiten ser Señor de sus vidas". (74) El

... dramático y distintivo testimonio de la vida será ciertamente la evidencia - las "buenas nuevas" - de que Jesús reina en las vidas de los hombres. Tal es el evangelio en vívidos colores que será "predicado al mundo entero, como testimonio a todas las naciones; y entonces vendrá el fin". (75)

Para Douglass, la vindicación del carácter de Dios no se llevó a cabo de una vez por todas en el hacer y el morir de Jesucristo.  El necesario principio tuvo lugar con Jesús, pero el estilo de vida perfecto y impecable de la generación final de adventistas "completa la vindicación del carácter y el gobierno de Dios y decide para siempre la cuestión de su justicia y su misericordia". (76) Dios está esperando que "la iglesia de Dios  pruebe ..., que la vida de fe que Él [Jesús] vivió y el carácter que Él manifestó son logros posibles que todos los hombres pueden alcanzar". (77)

El enfoque de Douglass de la naturaleza humana de Cristo debe entenderse en el contexto de esta visión escatológica. Si, como indica Douglass, "Jesús nos mostró lo que es posible", (78) entonces es importante que tanto Jesús como el creyente partan de la misma posición ventajosa. De aquí que no pueda decirse que Jesús tenía una naturaleza impecable, porque eso le pondría "fuera de nuestro alcance".

Por consiguiente, Él no debe ser considerado como la Estrella Polar - una buena guía pero que nunca será alcanzada; o Supermán, que nunca podrá reproducirse. Es un modelo de trabajo, un Ejemplo relevante para todos nosotros ... (79)

Morris Venden apoya la perspectiva de Douglass. Venden escribe: "¿Sabía usted que la vida de Jesús en la tierra fue una perfecta demostración de justificación por la fe?" (80)

La publicación de Clifford y Standish, Conflicting Concepts of Righteousness by Faith in the Seventh-day Adventist Church: Australasian División [Conceptos conflictivos d ela justificación por la fe en la Iglesia Adventista del Séptimo Día: División Australasiática] - escrito para contrarrestar la teología de Ford y Brinsmead - no deja lugar a dudas en cuanto a su posición acerca de la cuestión ante nosotros. Si el creyente debe seguir el ejemplo de Jesús, debe tener un buen comienzo. Por esto, la naturaleza carnal es erradicada en la regeneración. (81) Creer que persiste hasta la muerte disminuiría la lucha contra el pecado. La idea de la imputación de la justicia de Cristo en lugar de su impartimiento es vista como el veneno calvinista en el potaje de Ford. (82) Los que dicen que la naturaleza carnal permanece son más dignos de lástima que de culpa. (83) Además, se nos dice que, si hay algo del yo en nuestras obras, Cristo no añadirá sus méritos a ellos. (84)

Hemos colocado juntos el perfeccionismo de Douglass y el de Conflicting Concepts porque parece (por la correspondencia en el material de investigación de este autor) que Conflicting Concepts es aceptado por los líderes de Review and Herald de la Iglesia Adventista. (85) Esta enseñanza de Douglass y Conflicting Concepts ocupa un lugar de importancia sin precedentes en el perfeccionismo adventista. En By Faith Alone, Norval Pease infiere que el perfeccionismo es excepcional en el adventismo. (86) Pero no podemos estar de acuerdo con este juicio. Tampoco podemos simplemente poner el perfeccionismo de nuevo rostro junto al de Andreasen y Branson. Esto es perfeccionismo de una intensidad sin precedentes. Nunca antes en la historia del adventismo ha recibido el perfeccionismo tanto énfasis y una expresión tan explícita. Naturalmente, el correpondiente motivo "la naturaleza humana pecaminosa de Cristo" y la negación del pecado original reciben también expresión irrestricta en gran parte de la "teología de síntesis" del Adventismo del Séptimo Día en la actualidad.

Ford ha afirmado su rostro contra el perfeccionismo del adventismo contemporáneo por considerarlo un falso evangelio que es contrario a la meta del movimiento de terminar la obra de una Reforma detenida. Ford sostiene que, en Cristo, el creyente tiene la perfección hoy. (87) Por fe en la expiación de Cristo, el creyente es perfecto en cada paso del camino. (88) La vida del cristiano es un campo de batalla entre las dos naturalezas; (89) y, aunque el carácter de Cristo es nuestra meta diaria, no podemos alcanzarla en esta vida. (90) La perfección cristiana es madurez, un crecimiento del carácter cristiano. (91) Bien entendida, la perfección no es impecabilidad. (92)

De la misma manera, desde fuera del adventismo oficial, Robert Brinsmead ejerce una marcada influencia dentro del adventismo contra la enseñanza perfeccionista de Douglass y Conflicting Concepts. Tanto en Present Truth (93) como en su respuesta a Clifford y Standish (94), Brinsmead ha dejado claro que el perfeccionismo es antibíblico (95) y contrario al sólido testimonio del protestantismo de la Reforma. (96)

Uno difícilmente podría creer que el antiperfeccionismo de la revista Present Truth está redactado por el mismo autor que produjo el abundante material perfeccionista de la década de 1960. Por los escritos de Brinsmead, es supremamente evidente que la doctrina de la justificación por la fe sola es la que echa fuera toda idea de la perfección en esta vida.



1. Véase de Brinsmead, Review of the Awakening Message, pts. 1-2.

2. Brinsmead quedó impresionado por la siguiente cita: "La justificación por la fe es realmente la única respuesta a las perplejidades morales de la doctrina del pecado original" (W. H. Griffith Thomas, The Principles of Theology, p. 193.

3. En su anterior enseñanza sobre el santuario, Brinsmead decía que la justificación era el "atrio exterior", la santificación, el "lugar santo", y la perfección, el "lugar santísimo".

4. Véase de Brinsmead, Review of the Awakening Message, pts. 1-2.

5. Sin fecha, pero emitida el 16 de mayo de 1974.

6. George E. Vandeman, "Meet the Master", Review and Herald, número especial, "Righteousness by Faith" [Mayo 16,1974].

7. Don F. Neufeld, "Righteousness by Faith" - Is It Biblical?" Review and Herald, número especial, "Righteousness by Faith" [16 Mayo 1974], p. 6.

8. Ibid., p. 8. 

9. C. Mervyn Maxwell, "Christ and Minneapolis 1888", Review and Herald, número especial, "Righteousness by Faith" [16 Mayo 1974], p. 18.

10. Herbert E. Douglass, "Why God Is Urgent and Yet Waits", Review and Herald, número especial, "Righteousness by Faith" [16 Mayo 1974], p. 23. Kenneth H. Wood. "Jesus Made the Way Plain in Parables", ibid., p. 24. Aquí Wood dice que la justificación por la fe "es un cambio sobrenatural".

11. Véase esp. el artículo de Vandeman citado en el n. 6 arriba.

12. Douglass, "Righteousness by Fiaith", p. 22.

13. Ibid., p. 23.

14. El subtítulo dice: Is Sanctification the Same as Righteousness by Faith? Rome Says Yes; The Reformation Says No; Where Do Seventh-day Adventists Stand? [¿Es la santificación lo mismo que la justificación por la fe? Roma dice que sí; la Reforma dice que no; ¿dónde quedan los Adventistas del Séptimo Día?]

15. Esta frase fue tomada de una carta escrita por un (entonces) miembro del personal de Review and Herald en Washington, D. C. Véase de A. John Clifford y Russell R. Standish, Conflicting Concepts of Righteousness by Faith in the Seventh-day Adventist Church: Australasian Division, que tiene mucho que decir con respecto a "mateship".

16.  El trabajo consiste de 53 páginas de un cuarto de tamaño.

17. F. A. Basham, "A Paper Presented to the Biblical Research Committee of the Australasian Division on the Subject of 'Righteousness by Faith', 3 Feb. 1976", p. 2.

18. Ibid., p. 3. Los hermanos a los que se alude son miembros del personal de Review and Herald.

19. Ibid. Énfasis añadido.

20. Esto queda claro por el siguiente párrafo en la carta de Basham: "El manuscrito producido por elDepartamento de Teología de Avondale no fue escrito en un vacío. Fue escrito después de la publicación del número especial de 'Review' y después de la crítica pública de Brinsmead del mismo. En el momento en que el Departamento de Teología imprimía su manuscrito, el Dr. Ford era completamente consciente de la controversia que había surgido a causa de este número específico. En la misma mitad de la controversia entre Brinsmead y los editores de la 'Review', el Dr. Ford usó los recursos del Departamento de Teología para publicar un manuscrito que respalda plenamente la crítica radical de Brinsmead y que asume una posición diametralmente opuesta a la de los editores de 'Review and Herald'. Así, pues, tenemos una clara división entre lo que el Dr. Ford enseña en Avondale y lo que enseñan nuestros hermanos norteamericanos" (ibid., p. 2.

21. Ibid., p. 6.

22. Véase "Christ Our Justice", Review and Herald, 27 May 1976, pp. 4-7.

23. Es decir, que "la justificación por la fe" significa tanto justificación como santificación. Cf. Seventh-day Adventist Encyclopedia, p. 1085.

24. "Y es maravilloso que recientemente en Estados Unidos hayamos podido hacer una afirmación como ésta por primera vez en nuestra historia, algo maravilloso" (Desmond Ford, discurso en la capilla de Avondale College, 18 mayo 1976.

25. Seventh-day Adventist Encyclopedia, p. 1085.

26. Kenneth H. Wood, "F. Y. I. [For Your Information]", pt. 1, Review and Herald, 21 Oct. 1976, p. 2. Nótese que Palmdale hablaba de "la experiencia de la justificación por la fe".

27. Ibid.

28. Wood, "F. Y. I. ", pts. 2-4, Review and Herald, 28 Oct. 1976, pp. 2,19; 4 Nov. 1976, pp. 2, 15; 18 Nov. 1976, p. 2, 13. Cf. Kenneth H. Wood, "Fit for a Wedding", ibid., 2 Dec. 1976, pp. 2, 11.

29. Wood, "F. Y. I", pt. 3, p. 2.

30. Robert H. Pierson, "What Is Righteousness by Faith?" The Ministry, Feb. 1977, p. 9.

31. Ibid. Vale la pena observar que Pierson incluye el aspecto subjetivo, "la paz y el gozo resultantes en Cristo" en su definición de justificación como la primera fase de la justificación por la fe.

32. Para el énfasis de Brinsmead sobre este punto, véase de Robert D. Brinsmead, "St. Paul´s Message of Justification", Present Truth, Apr. 1972, pp. 5-10; ídem, "The Righteousness Which Is of Faith", ibid., número especial, "Justification by Faith" [May 1972], pp. 14-17; ídem, "The Radical Meaning of Sola Fide", ibid., June 1975, pp. 6-7. Cf. ídem, Statement; ídem, The Current Righteousness by Faith Dialogue. En Current Dialogue, Brinsmead da 10 razones de por qué la santificación no puede ser incluida en el artículo de justificación por la fe.

33. Herbert E. Douglass, Jesus, the Model Man. Estas lecciones son usadas simultáneamente por las iglesias adventistas del mundo entero.

34. Ibid., p. 22.

35. Ibid., p. 96.

36. Ibid.

37. Citado en una carta de M. G. Townend para los oficiales de división, fechada en Ene. 24, 1977.

38. Victor P. Kluzit, An Appeal to Withdraw and Make a Public Confession for the Sabbath School Quarterly Entitled "Jesus, the Model Man" April-June, 1977 (Lev. 26:40, 42) [Una apelación para retirar y hacer confesión pública por el folleto de Escuela Sabática titulado "Jesús, el hombre modelo", Abril-Junio 1977 (Lev. 26:40-42]. El último párrafo de Kluzit transmite el espíritu de su apelación: "Hermanos, como ministro ordenado de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, he escrito esta protesta, porque es necesario que otro José se ponga de pie y hable (Lucas 20:50, 51) en favor de la verdad que es en Jesús al Concilio de los Pastores Espirituales ... y que expresen la más profunda desaprobación de la indiferencia laodicense que tenemos por Aquél que toca a la puerta de nuestra iglesia. ... Por consiguiente, este folleto de Escuela Sabática debe ser retirado y la Conferencia General debe hacer confesión pública por esta negación de Cristo.

39. Richard Neis, "Jesus, the Model Man".

40. Max Hutton, Jesus Our Example, pp. 2, 8.

41. Por ejemplo, la década de 1970 ha visto una inundación sin precedentes de enseñanzas sobre el perfeccionismo en el Adventismo del Séptimo Día. Hay un creciente énfasis siguiendo la línea del folleto de Escuela Sabática de Douglass, Jesús, el Hombre Modelo. Véase de Herbert E. Douglass y Leo R. Van Dolson, Jesus, the Benchmark of Humanity.

42. En un trabajo titulado "Fitness for Heaven: A Dialogue with Robert Brinsmead on Bible Perfection", Hans K. LaRondelle argumenta que justificación significa "la transformación del corazón dominado por el pecado" (p. 7); el derramamiento del amor en el corazón que cree" (p. 12), "el impartimiento del recreador Espíritu Santo" (p. 13). "La justificación bíblica significa mucho más que un mero perdón de pecados
forense o legal" (p. 14). En vez de que el creyente escape a la condenación en virtud de lo que Cristo hizo en la cruz, LaRondelle dice que, ... cuando el corrupto canal de la naturaleza es hecho inefectivo por la gracia del Cristo interior, no hay condenación para el alma perfeccionada. (Rom. 8:1)" (p. 80). LaRondelle se opuso fuertemente al perfeccionismo sólo después de que preparó su tesis doctoral Perfection and Perfectionism bajo G. C. Berkower en 1969-1970. Esta tesis contradice parte de teología anterior de LaRondelle.

43. El 2 de octubre de 1976, el Dr. Ford observó: "He usado (como lo han hecho muchos de mis hermanos) la 'justificación por la fe' para incluir la santificación" (Desmond Ford, "An Answer to Dr. Russell Standish", transcripción de un sermón, p. 41.

44. En el caso del Dr. Hans K. LaRondelle, esta síntesis entre la justificación y la santificación está todavía presente después de 1970. Véase de Hans K. LaRondelle, "Seventh-day Statement on Righteousness by Faith". Aquí LaRondelle dice que la justificación es "una transacción judicial de Cristo como Mediador celestial, pero es más que eso. Implica el impartimiento santificador del Espíritu Santo de amor divino en el corazón del creyente justificado (Rom. 5:1, 5; 8:14-16), o expresada de manera diferente, la morada interior de Cristo en el corazón del creyente (Gál. 2:20; Efe. 3:14-19" (p. 2). También: ... Puede decirse que la justificación libera al creyente arrepentido de la culpa del pecado y al mismo tiempo de la eclavitud y el poder contaminador del pecado" (p. 3). Véase además ídem, "Kommentar van dr. h. la rondelle op het artikel van paxton in jeugd, november, 1976" [Commentary of Dr. H. K. LaRondelle of the Article of Paxton in Youth, November, 1976]. Aquí LaRondelle dice: "Juan ... proclama el evangelio en términos del amor los unos para con los otros. El "evangelio en toda su plenitud nos es presentado en el Antiguo Testamento" (p. 10 en el original holandés). LaRondelle parece considerar cualquier intento de distinguir claramente entre justificación y santificación como una separación entre los dos. Pero Heppenstall refleja claramente la ruptura de la síntesis cuando dice: "Cuando Pablo habla de la justificación que es por la fe, no está pensando en términos de la justificación en el hombre, sino de su posición legal delante de Dios. ... 'Justificar' nunca significa en la Escritura derramar en alguien la cualidad de justificación, sino establecer la justificación forénsicamente,o hacer justo mediante un acto que está enteramente fuera del hombre" (Edward Heppenstall "The Meaning of Righteousness", en lecciones en la Universidad de Andrews, pp. 39-40). Aquí parece que Heppenstall es el precursor de la teología Ford-Brinsmead. Sólo le queda indicar que él consistentemente apoya esta esta interpretación de la justificación por la fe. Parece que LaRondelle, si es como nunca consistente consigo mismo (es decir, en su tesis, Perfection and Perfectionism), también debe ponerse del lado de la teología de la Reforma.

45. El "diálogo" de Heppenstall y LaRondelle con los perfeccionistas acerca de la posibilidad de alcanzar la perfección en esta vida puede ser vista en la obra de Herbert E. Douglass, Edward Heppenstall, Hans K. LaRondelle, y C. Mervyn Maxwell, Perfection: The Impossible Possibility.

46. Como deja claro la teología de los que han roto la síntesis, esto no significa una separación entre la justificación y la santificación. Más bien, la "ruptura" significa (1) la clara diferenciación entre la justificación y la santificación y (2) la primacía de la justificación. Véase de Desmond Ford, "The Scope and Limits of the Pauline Expression 'Justificación por la Fe'", en la obra de Jack D. Walker, ed., Documents from the Palmdale Conference on Righteousness by Faith, pp. 1-13.

47. Una muestra de la enseñanza de Brinsmead sobre este punto puede verse en el artículo de Robert D. Brinsmead en Present Truth, número especial, "Justification by Faith and the Charismatic Movement" (Sept-Oct. 1972); ídem, "Justification by Faith and the Current Religious Scene", Ibid., Ago. 1973, pp. 14-34; ídem, ibid., número especial "Sanctification", Feb. 1975; ídem, "Radical Meaning", pp. 6-7.

48. Citado en la obra de Pierson, "What Is Righteousness by Faith?" p. 9.

49. Por lo menos el 90 por ciento del número especial de Review and Herald sobre "Justificación por la fe" está dedicado a la santificación. La justificación fue condenada con una débil alabanza.

50. J. W. McFarland y J. R. Spangler "Why You Lose What You Don´t Use", Century 21: Institute for Better Living, p. 15. Énfasis en el original.

51. Véase de Wood, "Fit for a Wedding", pp. 2, 11.

52. "Oímos hablar mucho de recibir la justicia de Cristo, pero esto casi siempre se refiere a la imputación de esta justicia". Esto es muy importante como principio, pero esta es una etapa mucho más alta de realización, cuando el carácter justo de Cristo nos es impartido a nosotros ...". (George McCready Price, Review and Herald, 1 Jan. 1976).

53. Don Hawley, Getting It All Together, p. 35. Énfasis en el original.

54. Arnold V. Wallenkampf, "Saved Solely by Grace", Review and Herald, 9 Sept. 1971. p. 4.

55. Véase el cap. 2, "The Heart of the Reformation".

56. Ford, "Scope and Limits" en el trabajo de Walker, Documents from Palmdale, pp. 11-13. El apéndice en en realidad la "Introducción" de J. I. Packer a la obra de James Buchanan The Doctrine of Justification.

57. La Sra. de Desmond Ford, The Soteriological Implications of the Human Nature of Christ, pp. 9-10.

58. Véase del cap. 1, apéndice, "1888: A Thorn in the Church´s Flesh".

59. Clifford and Standish, Conflicting Concepts, pp. 24, 53, 56.

60. Desmond Ford, Redemption, Objective and Subjective, p. 2.

61. J. W. Lehman, "The Other Half of Forgiveness", transcripción de un sermón presentado en la Iglesia Adventista del Séptimo Día de Campus Hill, Loma Linda, Calif., Mayo 10, 1975. Esta es una gran iglesia adventista en un gran centro adventista.

62. Ibid., Cf. "El perdón incluye no sólo eliminar la condenación, sino también hacernos justos" (p. 4).

63. A Gift for Pastors of Seventh-day Adventist Churches in North America (1 Sept. 1975). Wilson dio su aprobación en una carta personal de Ago. 5, 1975, titulada "Memorándum de Neal C. Wilson, Vice-Presidente de la División Norteamericana", que fue enviada con el folleto. Lehman dice que la justicia de Rom. 3:21 es la justicia infundida del amor.

64. Erwin R. Gane, "Is There Power in Justification?" p. 1.

65. Ibid., p. 2.

66. Ibid.

67. Ibid., p. 3.

68. Ibid., p. 7.

69. Véase de LaRondelle, "Statement on Righteousness by Faith", p. 2; ídem, "The Everlasting Gospel and Righteousness by Faith", p. 21, en la obra del Comité de Investigación Bíblica de la Conferencia Bíblica Norteamericana, 1974. Aquí LaRondelle dice que Pablo advierte contra una mera "justificación extrínseca" en Gálatas al afirmar que "en la justificación" su "yo" fue crucificado con Cristo. Sin embargo, contrariamente al evangelicalismo pietista, el significado de la crucifixión en Pablo de la que se habla en Gál. 2:20 no es una crucifixión subjetiva sino la que tuvo lugar en la cruz del Calvario. Véase también, de Froom, Movement of Destiny, pp. 207, 267, donde se dice que la justificación ocurre por la morada interior; Edward Hohen, "Salvation Without the Works of Law" [Salvación sin las obras de la ley], Review and Herald, 21 May 1971 (Hoehn dice: "Lo que preocupaba a Pablo era el no reconocimiento de que nadie puede hacerse justo a sí mismo a la vista de Dios. Esta transformación es posible sólo por el poder de Cristo que vive en el corazón". [Énfasis añadido]; Roy Allan Anderson, "Tree indeed", The Ministry, Nov. 1976, p. 17, donde Anderson dice que la justificación es posible porque Cristo se convierte en bondad en nosotros.

70. Lawrence Maxwell, Signs of the Times, June 1975. Lawrence Maxwell es editor de Signs of the Times.

71. J. L. Tucker, It Happened at Night, pp. 13-14.

72. Herbert E. Douglass, "God Does Not Play Word Games", The Ministry, Oct. 1974, p. 37.

73. Herbert E. Douglass, "The Unique Contribution of Adventist Eschatology", esp. pp. 18-33, en Biblical Research Committee, North American Bible Conference, 1974.

74. Ibid., p. 18.

75. Ibid., p. 19.

76. Ibid., p. 27.

77. Ibid.

78. Herbert E. Douglass, Review and Herald, 30 Dec. 1971, p. 16.

79. Herbert E. Douglass, The Ministry, Apr. 1977, p. 29. Cf. ídem, Review and Herald, 23 dec. 1971, pp. 12-13.

80. Morris Venden, "Jesus Our Great Example", Review and Herald, 17 Oct. 1974, p. 18.

81. Clifford and Standish, Conflicting Concepts, p. 117.

82. Ibid., p. 118.

83. Ibid., p. 134.

84. Ibid., p. 113. ¡No es fácil ver por qué los méritos de Cristo necesitan ser añadidos a obra totalmente desinteresadas!

85. Aunque el Secretario de Campo de la División Australasiática, el pastor A. S. Jorgensen, me aseguró que él no aceptaba la perspectiva de Conflicting Concepts.

86. Pease, By Faith Alone, pp. 207-8.

87. Véase de la Sra. Ford, Soteriological Implications.

88. Ibid., p. 35.

89. Ibid., p. 37.

90. Ibid., p. 39.

91. Ibid., p. 40.

92. Ibid., pp. 41-3.

93. Véase de Brinsmead, Present Truth, número especial, "Sanctification", Feb. 1975. Aquí Brinsmead dice: No podemos llegar a un punto en la santificación en que nuestra comunidad con Dios no descanse completamente en el perdón de los pecados" (p. 55). Para material adicional de Brinsmead sobre la relación entre la justificación y la escatología, véase ídem, ibid., número especial, "Justification by Faith and Eschatology", Sept. 1974; ídem, "Antichrist 1975", ibid., Apr. 1975, pp. 12-20; ídem., ibid., número especial, "New Testament Eschatology", p. 78-89.

94. Brinsmead, Respuesta a "Conflicting Concepts", pp.78-89.

95. Ibid., p. 70.

96. Ibid., pp. 80-85.

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