El Mensaje del Segundo Ángel

Enseñan que todas las otras iglesias son "hijas de su padre el diablo"; que "Satanás ha tomado plena posesión de las iglesias como un cuerpo"; "sus oraciones y sus exhortaciones son abominación a la vista de Dios"; y que Satanás contesta sus oraciones. Enseñan que es correcto estar equivocado e incorrecto estar en lo cierto; que Dios derramó sus ricas bendiciones sobre aquéllos que enseñan el error, y maldijo a aquéllos que rehusaron aceptar los errores de Miller.

Enseñan que los Adventistas del Séptimo Día "son el único objeto sobre la tierra que es querido al corazón de Dios". Lea este folleto y luego pídale a su vecino Adventista que le explique por qué tienen que ser tan abusivos.

Nadie puede anunciar el mensaje del segundo ángel a menos que comprenda correctamente lo que es "Babilonia". En el capítulo dieciocho se hace un llamado al pueblo de Dios a salir de Babilonia. ¿Cómo puede una persona advertirle al pueblo de Dios que debe salir de Babilonia si la tal persona no sabe qué es o dónde está Babilonia?

Si Jonás hubiera ido a Jerusalén en vez de a Nínive y dado el mensaje que se le había entregado, ¿habría sido el mensaje de Dios? San Francisco sufrió un grande y destructor terremoto e incendio en 1906. Si Dios hubiese entregado un mensaje de advertencia a uno de sus siervos para que lo diera a la ciudad antes de la catástrofe, ¿habría este siervo llevado a cabo la comisión si hubiera hecho sonar la alarma de que Los Angeles había de ser destruída? Tal mensaje a Los Angeles no sólo habría sido un fracaso sino también una injusticia con la sureña ciudad y un pecado contra San Francisco.

La palabra Babilonia se encuentra seis veces en el libro de Apocalipsis, y en cada caso se usa como símbolo. También se la llama una mujer seis veces, y prostituta cuatro veces. Es un principio universal de interpretación que cuando la Biblia da la definición de un símbolo, esa definición debe ser aplicada en cada caso en que se use el símbolo, a menos que el contexto muestre que la intención es darle otro significado.

El capítulo diecisiete del Apocalipsis es el diccionario del libro: y nadie puede entender ni el segundo ni el tercer mensaje sin aceptar las definiciones que se dan en este capítulo. He aquí la definición que Dios da de la mujer, Babilonia: "Y la mujer que has visto es la gran ciudad que reina sobre los reyes de la tierra". Apoc. 17:18. Versión Revisada. Al margen se lee: "tiene un reino sobre los reyes de la tierra," y esta traducción concuerda con el griego.

"La mujer (Babilonia) de Apocalipsis 17 ... que por tantos siglos mantuvo un dominio despótico sobre los monarcas de la cristiandad, es Roma. Y ningún otro poder podría tan verdaderamente ser declarado 'ebrio con la sangre de los santos' como la iglesia que tan cruelmente persiguió a los seguidores de Cristo". Great Controversy, p. 382.

El mensaje del segundo ángel se repite y se expande en el capítulo 18. Nótese la similitud entre los dos.

Apoc. 18:2, 3. "Ha caído, ha caído la gran Babilonia, y se ha hecho habitación de demonios, y guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave inmunda y aborrecible. Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación".

¿Puede alguien negar que "Babilonia la grande" del capítulo 18 es la misma "Babilonia la grande" del capítulo 17? Dios define a la Babilonia del capítulo 17 como "aquella gran ciudad, que tiene un reino sobre los reyes de la tierra", y la Sra. White dice que la Babilonia del capítulo 17 es la Iglesia Católica Romana.

Puesto que se admite que la "Babilonia la grande" del capítulo 17 es Roma, y que la Babilonia del capítulo 18 es la misma que la Babilonia del capítulo 17, entonces la Babilonia del capítulo 18 tiene también que ser Roma. El mismo anuncio que se hace contra la Babilonia del capítulo 18 -- y por la misma causa -- es el que se hace contra la Babilonia del capítulo 14, y, si la Babilonia del capítulo 18 es Roma, entonces la Babilonia del mensaje del segundo ángel es también Roma, y no las caídas iglesias protestantes.

No hay sino una Babilonia en el libro de Apocalipsis, y cualquiera que intente enseñar lo contrario es ignorante, estúpido, o lo ha cegado un credo. Mi hermano, si Ud. arguye que la Babilonia del capítulo 17 representa a Roma, y que la Babilonia de Apoc. 14: 8 representa a las iglesias protestantes que cayeron moralmente en 1844, ¿cómo puede Ud. enfrentarse al que aboga por el domingo si él arguye que el "sábado" del libro de los Hechos, o el "día del Señor" de Apoc. 1: 10, significa domingo? El uno no es más inconsistente que el otro. Para argüir que la Babilonia del mensaje del segundo ángel representa al protestantismo caído, uno está obligado a ignorar la definición de Dios de Babilonia y violar una de las más fundamentales reglas de una sana interpretación.

Sin duda, algunos de nuestros lectores preguntarán: "¿Quién enseña que Babilonia representa al protestantismo caído?" Los Adventistas del Séptimo Día lo han enseñado por 70 años, y algunos de ellos todavía lo están enseñando.

Casi todos los antiguos escritores protestantes están de acuerdo en que Babilonia la Grande de Apoc. 17 es Roma con su reino eclesiástico, que "por muchos siglos mantuvo un dominio despótico sobre los monarcas de la cristiandad."

Pero, si Babilonia la grande de los capítulos catorce y dieciocho es Roma, ¿qué significa el anuncio de que "ha caído"? ¿Cómo puede [6] Roma reincidir cuando por siglos ha permanecido en las más bajas profundidades?

"Y un ángel poderoso tomó una piedra, como una gran piedra de molino, y la arrojó en el mar, diciendo: 'Con el mismo ímpetu será derribada Babilonia, la gran ciudad, y nunca más será hallada'". La palabra "caída" de Apoc. 14:8 y 18:2 no es la palabra apostasía que se usa en 2 Tesal. 2:3, "sin que antes venga la apostasía". La palabra se usa veintiuna veces en Apocalipsis, y en todos los otros casos se refiere a una caída, no a una reincidencia. "Rocas, caed sobre nosotros y escondednos", (6:16); "y la décima parte de la ciudad se derrumbó", "y las ciudades de las naciones cayeron", (16:19); "cinco de ellos han caído," (17:10); "Yo caí a sus pies". (19:10).

Si la "caída" de Babilonia es la caída moral de las iglesias protestantes como se enseñaba anteriorrmente, ¿es buena noticia el anuncio de que los Metodistas, los Bautistas, y los Presbiterianos han reincidido en su alejamiento de Dios? Pero es buena noticia anunciar [7] la destrucción del sistema eclesiástico apóstata que se ha emborrachado con la sangre de los santos.

Ahora que está claro que la caída de Babilonia es su "destrucción final", ¿cómo es que al pueblo de Dios se le llama a salir de Babilonia después del anuncio de su caída? ¿No es más bien tarde para llamarlo a salir, después de que Babilonia ha sido destruída?

El término "ha caído" ha llevado a algunos a la conclusión de que debe ser una caída moral. Porque, ¿cómo podría referirse a una "destrucción final" cuando el llamado "salid de ella" sigue al anuncio de su caída?

En Jeremías 51:8, tenemos el anuncio de la caída de la antigua Babilonia, y el término "en un momento cayó Babilonia, y se despedazó" se usó mientras ella estaba en la cúspide de su gloria. La explicación de esto es que el profeta ve en visión la ciudad en ruinas,y anuncia lo que ve, y por lo tanto usa el tiempo presente.

"¡Cómo es apresada Babilonia, y es tomada la que era alabada por toda la tierra! ¡Cómo viene a ser Babilonia objeto de espanto entre las naciones! Sube el mar sobre Babilonia; de la multitud de sus olas es cubierta! Sus ciudades son asoladas, la tierra seca y desierta, tierra en que no mora nadie, ni pasa por ella hijo de hombre".

"Escribió, pues, Jeremías en un libro todo el mal que había de venir sobre Babilonia, todas las palabras que están escritas contra Babilonia. Y dijo Jeremías a Seraías: Cuando llegues a Babilonia, y veas y leas todas estas cosas, dirás: Oh Jehová, tú has dicho contra este lugar que lo habías de destruir, hasta no quedar en él morador, ni hombre ni animal, sino que para siempre ha de ser asolado. Y cuando acabes de leer este libro, le atarás una piedra, y lo echarás en medio del Eufrates, y dirás: Así se hundirá Babilonia, y no se levantará del mal que yo traigo sobre ella".

Aquí tenemos un completo paralelo con los anuncios concernientes a la Babilonia moderna. Primero la destrucción se anuncia en el tiempo presente, luego al pueblo de Dios se les llama a salir (versículo 45). Después, una piedra es atada a la profecía y es lanzada al Eufrates con el anuncio de que "así se hundirá Babilonia".

De la misma manera, "la destrucción final de la moderna Babilonia" se anuncia en el tiempo presente, porque esa destrucción es vista por el ojo profético de Cristo, cuyo testimonio anuncia el ángel (Apoc. 1:13), y esto es seguido por el llamado: "Salid de ella, pueblo mío," y la naturaleza de la caída está representada por la "impetuosa caída" (Revised Version) de una piedra de molino en el mar, con las palabras anunciando una ruina futura.

Los seguidores de Miller esperaban que el Señor viniera en 1843, pero este desengaño pronto fue explicado a su satisfacción mediante un nuevo reparto de las figuras. Luego centraron sus esperanzas en la primavera de 1844, el tiempo del equinoccio. El desengaño se sintió más agudamente, mientras el mundo, y particularmente las iglesias protestantes, se volvían severamente contra ellos y sus fracasos al fijar fechas.

Cuando cambiaron la fecha para el otoño de 1844, las iglesias estaban tan disgustadas con ellos que les cerraron las puertas y denunciaron el advenimiento que habían predicho en términos nada elogiosos. [10] Los Adventistas enfrentaron esta actitud de las iglesias con las más severas acusaciones. Declararon que las iglesias eran "la sinagoga de Satanás," "albergue de toda ave sucia y aborrecible," y llamaron a los fieles a "salir de Babilonia".

A este llamado, hecho durante el verano, se le llamó "clamor de medianoche", o el mensaje del segundo ángel. Hay que darle crédito a Miller porque nunca aprobó las acusaciones contra las iglesias, ni participó de ellas. El encarnizamiento de los Adventistas contra las iglesias continuó intensificándose hasta el gran desengaño de octubre 22, 1844, y no se suavizó después de esta fecha por una generación o más.

Los pioneros enseñaron que el segundo mensaje había terminado en el otoño de 1844. El Anciano White enseñó que "el mensaje del segundo ángel alcanzó hasta el otoño de 1844, cuando el clamor 'Salid de ella, pueblo mío' terminó".

"Esta obra está concluída. Este ángel ha volado. Babilonia, las iglesias nominales, ha caído. El pueblo de Dios ha salido de ella. Ella es ahora 'la sinagoga de Satanás.' Apoc. 3:9. 'Habitación de demonios, guarida de todo espíritu inmundo, y albergue de toda ave sucia y aborrecible'. Apoc. 18:2". Present Truth, pp. 68,69. - 1850.

"El mensaje del segundo ángel [versículo 8] también se ha cumplido ...... Es un hecho bien conocido que la carga del primer mensaje se dio desde 1840 hasta comienzos de 1844. Es también un hecho que el anuncio 'Ha caído Babilonia' se hizo en 1844, y que la carga de ese mensaje, que llamó a muchos miles de las diferentes iglesias, se cerró en el otoño de 1844". Signs of the Times, p.113, James White, 1853.

Los otros pioneros, especialmente Joseph Bates, estaban igualmente persuadidos en su creencia de que el segundo mensaje se cerró en 1844. James White también enseñó que en ningún caso se dieron dos mensajes simultáneamente, sino que cada uno siguió al otro sucesivamente. Véase Review and Herald, tomo 1, p. 15.

"Cuando las iglesias desdeñaron el consejo de Dios al rechazar el mensaje Adventista, el Señor las rechazó. El primer ángel fue seguido por el segundo. ... Este mensaje fue entendido por los Adventistas como el anuncio de la caída moral de las iglesias a consecuencia de su rechazo del primer mensaje. La proclama 'Ha caído Babilonia' se dio en el verano de 1844 y, como resultado, como cincuenta mil se retiraron de estas iglesias.

"El término Babilonia, derivado de Babel y que significa confusión, se aplica en la Escritura a las varias formas de la religión falsa o apóstata. Pero el mensaje anunciando la caída de Babilonia debe aplicarse a algún cuerpo religioso que una vez fue puro, y que se ha vuelto corrupto.

"La referencia aquí no puede ser la Iglesia de Roma, porque esa iglesia ha estado en una condición caída por muchos siglos. Pero, ¡cuán apropiada es la figura cuando se aplica a las iglesias protestantes!". Spirit of Prophecy, tomo 4, pp. 232, 233.

Que Babilonia representaba las iglesias protestantes caídas fue la posición unificada de la denominación hasta 1911. Algunos maestros bíblicos entre ellos comenzaron a reconocer que no había sino una Babilonia en el libro de Apocalipsis, y que en cada caso se refería a la iglesia Romana. Pero el "Espíritu de Profecía" había dicho que no podía referirse a Roma, así que tuvieron que corregir tanto la "inspiración" como su credo.

En 1888, el "Espíritu de Profecía", tomo 4, fue revisado y publicado como The Great Controversy [El Gran Conflicto] En la página 383 de esta edición se encuentra lo siguiente: "El mensaje de Apocalipsis 14 anunciando la caída de Babilonia debe aplicarse a las organizaciones religiosas que una vez fueron puras y que se han convertido en corruptas. Puesto que este mensaje sigue a la advertencia del Juicio, debe ser dado en los últimos días, y por lo tanto no puede referirse a la Iglesia Romana, porque esa iglesia ha estado en una condición caída por muchos años. Además, en el capítulo dieciocho de Apocalipsis, en un mensaje que es todavía futuro, el pueblo de Dios es llamado a salir de Babilonia. De acuerdo con este pasaje, muchos de los del pueblo de Dios todavía están en Babilonia. ¿Y en cuáles organizaciones religiosas está ahora la mayor parte de los seguidores de Cristo? Sin duda, en las varias iglesias que profesan la fe protestante".

En 1911, The Great Controversy fue revisado nuevamente, y se hizo un intento de ponerlo en armonía con la Biblia. Además de unas pocas alteraciones sin importancia, se hicieron dos cambios importantes al párrafo precedente bajo la pluma de la propia Sra. White.

El cambio más importante se hizo insertando la palabra solamente, para que dijera, "referirse a la Iglesia Romana solamente, porque esa iglesia ha estado en una condición caída por muchos siglos". El segundo cambio es la omisión de las palabras "en un mensaje que es todavía futuro".

Si una persona de inteligencia normal lee cuidadosamente este párrafo adulterado y nota cuán inconsistentemente tonto suena ahora, huelgan mayores comentarios. Sin embargo, los defensores de la inspiración (?) argumentan que la inserción de la palabra "solamente" no altera el significado en lo más mínimo, sino que aclara lo que ella quería decir. [14]

Si Ud. fuera juzgado por un crimen capital y el jurado trajera el veredicto: "Encontramos al acusado no culpable del crimen del que se le acusa", habría alguna diferencia para Ud. si el alguacil leyera y registrara el veredicto: "Encontramos al acusado no culpable solamente del crimen del que se le acusa"?

Lea Apoc. 14:8 y 18:1-5 y verá enseguida que uno no es sino la ampliación del otro. El capítulo 18 solamente proporciona los detalles del mensaje del segundo ángel. Los hermanos vieron esto, así que cuando revisaron The Great Controversy, la Sra. White consintió en dejar fuera la afirmación de que el mensaje del capítulo 18 era todavía futuro. ¿Por qué? Porque, si el mensaje del capítulo 18 es todavía futuro, entonces el mensaje del segundo ángel es todavía futuro.

Hermano, ¿qué es inspirado, las ediciones de 1884 y 1888, o la edición de 1911? Una dice que la iglesia romana no puede ser Babilonia; la otra dice que es Babilonia. Una dice que el mensaje del segundo ángel es todavía futuro; la otra dice que fue dado en 1844. Ambas no pueden ser inspiradas. Si ambas son inspiradas, alguien va a tener que fabricar un nuevo nombre para esta clase de inspiración.

La inserción de la palabra "solamente" en The Great Controversy preparó el camino para que la denominación quedara bien en el mensaje del segundo ángel. Las lecciones de Escuela Sabática para el segundo trimestre de 1913 enseñaban que el mensaje del segundo ángel es todavía futuro y que es [15] un anuncio de la destrucción de "la moderna Babilonia, la Iglesia de Roma". También lo llama el mensaje del "evangelio".

Cuando Bible Readings fue revisado en 1916, se le puso en armonía con las lecciones de Escuela Sabática publicadas anteriormente. Hablando del segundo mensaje, una nota dice: "El mensaje del evangelio anunciando la caída final debería ser causa de regocijo para cada amante de la verdad y la justicia". Las tres preguntas finales del estudio sobre el mensaje del segundo ángel son como sigue:

"24. ¿Qué canción de triunfo sigue al derrumbamiento de Babilonia?" Contestada con Apoc. 19:6,7. Bible Readings, p. 258.

La denominación ha quedado bien con su mensaje del segundo ángel, el cual está ahora en armonía con la Biblia. Pero desde 1844 hasta 1913, estuvo por completo en desacuerdo con la palabra de Dios. Esto es, por casi setenta años, enseñaron un mensaje que no era el del segundo ángel; no era un mensaje bíblico en absoluto, sino mera invención humana. No era meramente un mensaje falso, sino una crasa injusticia hacia el mundo protestante.

Nuevamente decimos: El verdadero segundo mensaje nunca ha sido dado al mundo; ¿qué acerca del tercero? ¿Ha de ser dado al mundo el mensaje del tercer ángel antes que el segundo? Alguna revisión adicional parece ser necesaria. Algunas modificaciones más radicales deben hacérsele a los escritos de la Sra. White antes de que el segundo mensaje pueda ser dado por la denominación.

Como se dijo anteriormente, cuando las iglesias rehusaron permitirles a los Milleristas que siguieran enseñando sus erradas predicciones en sus reuniones, los Adventistas, con el mayor encarnizamiento, se volvieron contra estas iglesias y las denigraron con el lenguaje más espantoso. En este abuso, la Sra. White no tenía paralelo, como muestran las siguientes citas:

El diablo contesta las oraciones de los miembros de todas las otras iglesias

"Los que rechazaron el primer mensaje no podrían beneficiarse con el segundo; ni se beneficiaron con el clamor de medianoche, que era para prepararlos para entrar con Jesús, por fe, en el lugar santísimo del santuario celestial". Early Writings, p. 260.

"Como los judíos, que ofrecían sus inútiles sacrificios, éstos ofrecen sus inútiles oraciones al [17] apartamiento que Jesús ha abandonado; y Satanás, complacido con el engaño, asume un carácter religioso, y guía las mentes de estos profesos cristianos hacía sí mismo, trabajando con su poder, sus señales, y maravillas engañosas, para atraparlos en su red". Ibid., p. 261.

"También viene como ángel de luz, y extiende su influencia sobre la tierra. Vi falsas reformas por todas partes. Las iglesias se regocijaron, y consideraron que Dios estaba trabajando maravillosamente en su favor, cuando era otro espíritu". Spiritual Gifts, tomo 1, p. 172.

Nuevamente, en la página 22 de Present Truth, publicado en agosto de 1849, encontramos lo siguiente:

"Vi que las misteriosas señales y maravillas, y falsas reformas, aumentaron y se extendieron. Las reformas que se me mostraron no eran reformas del error hacia la verdad, sino de mal a peor; porque los que profesaban un cambio de corazón sólo se habían envuelto en un ropaje religioso, que cubría la iniquidad de un corazón impío. Algunos parecían haberse convertido realmente, para engañar al pueblo de Dios; pero si se hubieran podido ver sus corazones, se habrían visto tan negros como siempre". Parte de la cita que antecede se encuentra en la página 45 de Early Writings.

"Satanás ha tomado plena posesión de las iglesias como un cuerpo". Early Writings, p. 273.

"Vi que, puesto que Jesús abandonó el lugar santo del santuario celestial, y pasó hacia dentro del segundo velo, las iglesias se habían estado llenando de toda ave inmunda y aborrecible. Vi gran iniquidad y vileza en las iglesias; y sin embargo, sus miembros profesan ser cristianos. Su profesión, sus oraciones, y sus exhortaciones son una abominación a la vista de Dios. Dijo el ángel: 'Dios no olerá en sus asambleas'". Ibid., p. 274.

"Vi que, si el falso ropaje pudiera ser arrancado de los miembros de las iglesias, se revelaría tal iniquidad, vileza, y corrupción, que el más tímido hijo de Dios no titubearía en llamar a estos profesos cristianos por su verdadero nombre, hijos de su padre el diablo, porque sus obras hacen". Early Writings, Edición Antigua, página 93. Esta cita se encuentra en la página 228 de la nueva edición, donde han tratado de suavizarla poniéndola en tiempo pasado.

El período cubierto por el movimiento de Miller estuvo marcado por muchos personajes sobresalientes, como Alexander Campbell, Charles G. Finney, Albert Barnes, Adoniram Judson, John G. Patton, Robert Moffat, y David Livingstone, ninguno de los cuales aceptó nunca las enseñanzas de Miller.

Alexander Campbell estaba en la cúspide de su poder durante el movimiento de 1844. Era editor de un periódico religioso conocido como el Millenial Harbinger. Ninguna publicación religiosa podía ignorar la excitación de los años 1842 a 1844. En su publicación, Alexander Campbell con frecuencia se ocupaba del movimiento millerista. De manera muy amable y convincente, señalaba los errores de Miller. Demostró que la cronología de Miller era defectuosa.

También señaló el hecho de que Babilonia debía caer antes de la venida del Señor. Todo el mundo podía ver que Babilonia, que todos estaban de acuerdo en que era Roma, no había caído. También trató de convencer a los milleristas de que la tierra no era el santuario.

El Dr. Campbell no era un burlador. Hablaba muy favorablemente de Miller y de muchos de sus seguidores, y desaprobaba en términos muy enfáticos el popular método de enfrentarse a Miller por medio del ridículo y el insulto.

Charles G. Finney fue uno de los más grandes, si no el de mayor éxito, de los evangelistas que produjo el siglo diecinueve. Dondequiera que iba, gentes de todas clases y profesiones se volvían de sus malos caminos y se convertían en obedientes y fieles siervos de Dios. Su vida activa entera parece casi un continuo milagro de salvación.

Después de haber dirigido estos poderosos reavivamientos por veinte años, este buen siervo de Dios tuvo el privilegio de escuchar a William Miller en el gran tabernáculo en Boston. Lo escuchó atentamente varias veces, y luego invitó a Miller a su habitación para una entrevista personal. En un espíritu amable, le mostró a Miller su error, y le dijo claramente que sufriría un desengaño. Miller reconoció algunos de los argumentos del hermano Finney, pero la advertencia no tuvo efectos visibles.

Éstos eran poderosos hombres de Dios, que guiaron a los pecadores al arrepentimiento en este período, pero que no apoyaban la posición d Miller. ¿Puede alguien dudar de que estos hombres eran hombres de Dios, hombres que Dios usó poderosamente en su reino? Pasaron por la gran experiencia de 1844, y todo el tiempo estuvieron trabajando diligentemente con marcado éxito en la conversión de pecadores. Esto fue tan cierto después del período de 1844 como lo había sido antes.

Charles Finney llevaba a cabo muchos de sus reavivamientos en el vecindario de la parte norte de New York en el que William Miller y su esposa trabajaban y publicaban el Review and Herald. Así que es seguro que la Sra. White entró en contacto con los reavivamientos de Finney cerca del tiempo en el que ella escribió estas acusaciones. Fuera esto cierto o no, Finney fue incluído en las acusaciones generales contra los reavivamientos en aquellos días. [21]

Parafraseemos una de las acusaciones: "Como los judíos, que ofrecían sus inútiles sacrificios, (Finney y sus seguidores) ofrecen sus inútiles oraciones al compartimiento que Jesús había abandonado; y Satanás, complacido con el engaño, asume un carácter religioso, y guía las mentes de estos profesos cristianos (como Finney y Moody) hacia sí mismo, para atraparlos en sus red".

Hombres tan sobresalientes como Moffat y Livingstone, trabajando en las selvas de Africa, Judson en Birmania, y Paton entre los caníbales de las islas, se mantenían fieles en sus puestos, sin prestar atención al movimiento de Miller, y Dios bendecía su trabajo. Sin embargo, de acuerdo con la Sra. White, ellos estaban entre los que eran "rechazados por Dios," y sus "oraciones y exhortaciones" eran una "abominación a Dios". Dice ella: "Vi falsas reformas por todas partes", no aquí y allá, sino "por todas partes". "Por todas partes" incluye tanto el extranjero como el campo local. Uds. no pueden escapar a ello, hermanos; no pueden explicarlo; la única salida es reconocer la vergüenza y suprimir el libro.

Sí, sabemos que la Sra. White dice: "Vi que Dios tenía hijos honestos entre los Adventistas nominales y las iglesias caídas, y antes de que se derramen las plagas, los ministros y el pueblo serán allamados a salir de estas iglesias, y gustosamente recibirán le verdad". Early Writings, p. 261. Ninguno [22] de estos hombres de Dios fue "llamado a salir de estas iglesias", y todos están muertos, y por lo tanto no pueden ser llamados "antes de que se derramen las plagas". Por lo tanto, todos ellos están incluídos entre aquéllos a quienes Dios ha rechazado, y cuyas oraciones son una "abominación a Dios".

Ahora bien, ¿cuál fue el mayor pecado que llevó a estos hombres a ser capturados por Satanás, y que hacía que sus oraciones fueran una abominación a Dios? No podía haber sido la cuestión del sábado, porque la prueba del sábado, de acuerdo con la Sra. White, no vino sino hasta después del desengaño.

Prueba: "Vi que la prueba presente acerca del sábado no podía venir sino hasta que la mediación de Jesús en el lugar santo hubiese concluído, y él hubiese pasado adentro del segundo velo". Early Writings, p. 42.

Entonces, ¿qué pudo haber hecho que estos grandes siervos de Dios se convirtieran en agentes del diablo? Una de las citas que anteceden explica el asunto. La respuesta es que rechazaron lo que los Adventistas estaban enseñando como el mensaje del primer ángel y la proclamación de la segunda venida de Cristo en 1844.

En otras palabras, estos estudiantes bíblicos, sinceros, de oración, vieron que Miller estaba errado y rehusaron aceptar su error. Por lo tanto, por rehusar aceptar un error, fueron rechazados por Dios. Por otro lado, los que aceptaron este error, esta falsa enseñanza, esta errónea interpretación [23] de la Palabra, fueron bendecidos por Dios y fueron hechos su pueblo favorito y escogido.

De acuerdo con las enseñanzas de esta denominación, otro pecado, que era suficiente para hacer que estos hombres se volvieran para ser guiados por el diablo, era el pecado de no saber que Jesús había pasado del primero al segundo compartimiento del santuario celestial el 22 de octubre de 1844.

Finney y todos los cristianos, excepto los seguidores de la Sra. White, creían que Cristo entró "del velo adentro" en el segundo compartimiento a su ascensión, en vez de esperar hasta 1844. Heb. 6:19,20. Estas gentes piadosas, que rehusaron creer en una mera suposición, sin un ápice de evidencia -- sí, claramente contradicha por la Palabra -- fueron rechazadas por Dios, y sus oraciones, que eran ofrecidas con sencillez y fe -- con la misma fe con que eran ofrecidas antes de que se iniciara el movimiento adventista -- nunca llegaban al Padre, sino que eran contestadas por Satanás, simplemente porque no sabían que la Sra. White, James White, y Joseph Bates habían trasladado al Salvador al lugar santísimo el 22 de octubre de 1844.

¡De cuán crasa injusticia hace esto culpable a Dios! Lo hace condenar a sus fieles siervos que diligentemente estudiaban su Palabra. Y porque estaban familiarizados con su Palabra y, por lo tanto, detectaron los errores [24] en las enseñanzas de los milleristas y rehusaron aceptar estos errores, y continuaron haciendo la obra de su Maestro como lo habían hecho antes, Dios los rechazó, pero bendijo con sus más ricas bendiciones a los que enseñaban estos errores, y los convirtió en "un pueblo en el cual todo el cielo se interesa, y son el único objeto sobre la tierra querido al corazón de Dios". Testimonies to Ministers, por la Sra. E. G. White, pág. 41.

Hablando de la Iglesia Adventista del Séptimo Día, la Sra. White dice: "La iglesia, debilitada y defectuosa, y necesitando ser censurada, advertida, y aconsejada, es el único objeto en la tierra al cual Cristo confiere su suprema estima". Ibid., p. 49.

La posición tomada por estos pioneros requeriría un reordenamiento de 2 Tesa. 2:10-13. Debería decir algo así: Ellos, Finney, Judson, Livingstone, y otros, recibieron el amor de la verdad para ser salvos. Por esta causa Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a este error, sino que se complacieron en la injusticia. Pero tenemos que dar gracias a Dios por Uds., los Adventistas del Séptimo Día solamente, hermanos amados por el Señor, porque Dios desde 1844 los ha escogido a Uds. para salvación por medio del Espíritu de Profecía y las creencias en los errores de Miller.

No deseamos arrojar ninguna sombra sobre William Miller. Era un hombre piadoso [25], y honestamente creía en el mensaje que dio. Estaba errado, y con el correr del tiempo reconoció su error, como deben hacerlo todos los hombres honestos.

Se podría hacer cualquier número de citas de la Sra. White, James White, Joseph Bates, y los otros pioneros, para mostrar que ellos consideraban los reavivamientos en otras iglesias como la obra del diablo.

Hombres de Dios, como Moody, fueron también incluídos en estas terribles acusaciones. En 1884, la denominación publicó "Resumen de la verdad presente: Una breve exposición de los puntos de vista de los Adventistas del Séptimo Día. Por Uriah Smith". En la página 45 se encuentran la siguiente pregunta y respuesta en relación con la caída condición de las iglesias protestantes. "¿Qué puede decirse de los esfuerzos de los modernos evangelistas?"

"A este respecto, su condición no ha mejorado desde entonces; y los esfuerzos espasmódicos y emocionales de un Knapp, un Hammond, un Moody, y otros modernos evangelistas, no están obteniendo ningún mejoramiento permanente. Hay una verdad avanzada para esta época, y ninguna obra permanente de reforma religiosa puede llevarse a cabo excepto en conexión con esa verdad".

Cualquier persona familiarizada con la corrupción moral de algunos ministros entre los Adventistas del Séptimo Día se asombra de que ellos usen lenguaje como el que antecede al describir a otras iglesias. La inmoralidad se manifiestó tanto entre los dirigentes que el Consejo de la Conferencia General se vio obligado a detener el creciente pecado.

El título de este capítulo puede haberles sonado extraño a muchos lectores, pero es confirmado en cada jota y en cada tilde por las enseñanzas de la denominación. Cada hombre y mujer pensante y familiarizado con los hechos dirán: ¡Qué vergüenza!, hasta que los editores corrijan esta vergonzosa enseñanza.

Por extraño que parezca, los Adventistas del Séptimo Día todavía enseñan que era erróneo que Finney, Moffat, y un ejército de otros estuvieran en lo cierto, y que era correcto que James White, la Sra. White, Joseph Bates, y sus seguidores estuviesen errados, enseñasen el error, y llevaran a la gente a creer lo que era contrario a la Biblia. Que se sepa, son las únicas personas en la historia que alguna vez enseñaron que era erróneo estar en lo cierto, y correcto estar equivocado.

Early Writings es una desgracia para la denominación, y no pocos de sus dirigentes comparten este convencimiento. Apelo a Uds., hermanos, como individuos y como organización, en el nombre del Dios de justicia; en nombre de la honestidad y decencia ordinarias, para que reconozcan estos errores y abusos indecentes por parte de su profeta, y arrojen este libro al limbo del galimatías teológico. La cortesía cristiana lo exige; la decencia ordinaria lo exige; las verdades bíblicas que Uds. defienden lo exigen, y todo el cielo lo aprobará. ¿Lo harán Uds., o continuarán mereciendo la justa indignación de todas las personas de mente estable?

Capítulo 17	Capítulo 18
Vers. 2. "Con la cual han fornicado los reyes de la tierra".	Vers. 3: "Los reyes de la tierra han fornicado con ella".
Vers. 2: "Los moradores de la tierra se han embriagado con el vino de su fornicación".	Vers. 3: "Porque todas las naciones han bebido del vino del furor de su fornicación".
Vers. 4: "La mujer estaba vestida de púrpura y escarlata, y adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas".	Vers. 16: "Ay, ay, de la gran ciudad, que estaba vestida de lino fino, de púrpura y escarlata, y estaba adornada de oro, de piedras preciosas y de perlas!".
Vers. 6: "Vi la mujer ebria de la sangre de los santos, y de la sangre de los mártires de Jesús".	Vers. 24: "Y en ella se halló la sangre de los profetas y de los santos, y de todos los que han sido muertos en la tierra".