Ellen G.
White
CONFERENCIA BÍBLICA DE 1919
SOBRE
ELLEN G. WHITE
INTRODUCCIÓN
Durante mucho tiempo, los
Adventistas del Séptimo Día han considerado a Ellen G. White
una profeta divinamente inspirada, tal como los profetas de la
Biblia. Fue una escritora prolífica; produjo un estimado de
100,000 páginas de borradores escritos a mano, para un total
de entre 15 y 20 millones de palabras. Aunque los dirigentes
de la iglesia aseguran no creer en la inspiración verbal, han
guardado cuidadosamente cada una de las palabras que ella
escribió. Para proteger sus palabras, se han situado
duplicados en micropelícula de sus borradores en varios
lugares alrededor del mundo. La Fundación Ellen G. White, una
subsidiaria de la Conferencia General de los ASD, supervisa
sus borradores, revisa sus libros, y publica nuevas
compilaciones de sus escritos.
A primera vista, los logros
literarios de Ellen White estaban muy por encima del promedio,
especialmente considerando que ella sólo tenía una educación
de tercer grado. Pero posiblemente usted no sepa que lo que
ella escribía a mano era copiado y redactado más tarde
por sus secretarias (Davis, Robinson, White, Bolton), luego
revisado, expandido y mejorado por los redactores de copia y
los comités literarios de las casas publicadoras. Sin embargo,
todas las mejoras que se hacían durante su vida estaban
sujetas a su aprobación.
Además, Ellen White tenía
el privilegio de poseer una biblioteca personal de casi 2,000
libros. Estos hechos han sido expresados claramente por Ellen
White, sus secretarias, los redactores de sus libros, la
Fundación White, la iglesia Adventista del Séptimo Día, y
hasta por los que creen firmemente en la inspiración divina de
Ellen White.
Ellen White afirmaba ser
inspirada divinamente
Pero,
¿fue Ellen White inspirada por Dios? ¿Fueron sus escritos
inspirados por Dios del mismo modo que los escritores
bíblicos? ¿Escribió ella lo que recibió directamente de Dios
por medio de visiones? ¿Fueron inspiradas por Dios las
palabras que ella escribió? ¿Copió los escritos de otros
autores? Y si copió, ¿admitió que lo había hecho?
Específicamente, ¿cuál fue la fuente de los escritos de
Ellen White? En las siguientes citas, ella es bien
específica en cuanto a la fuente de sus cartas, artículos, y
libros:
"Algunos están listos a preguntar: ¿Quién le dijo
estas cosas a la hermana White? Hasta me han preguntado: ¿Le
dijo alguien estas cosas? Yo podría contestarles: Sí; sí, el
ángel de Dios me ha hablado. ... Pero ... para el futuro, no
minimizaré el testimonio que Dios me ha dado, para dar
explicaciones en un intento por satisfacer esas mentes
estrechas, sino que consideraré todas esas preguntas como un
insulto al Espíritu de Dios". -- Testimonies,
tomo 3, pp. 314-315, escrito en 1873.
"Al Señor le ha
parecido bien mostrarme las necesidades y errores de su
pueblo ... He mostrado a los ofensores sus faltas y el modo
de corregirlas, según los dictados del Espíritu de Dios. ...
Así ha pronunciado amonestaciones y juicios el Espíritu de
Dios". -- Testimonies, tomo 4, pág. 14, escrito en 1876.
Yo dependo del
Espíritu del Señor tanto al relatar o escribir una visión
como al tenerla. Me es imposible traer a la mente las cosas
que se me han mostrado, a menos que el Señor me las presente
en el momento en que a Él le plazca que yo las relate o las
escriba". -- Spiritual Gifts, tomo 2, p. 293,
escrito en 1860.
"Aunque yo dependo
del Espíritu del Señor tanto al escribir como al recibir mis
visiones, las palabras que utilizo al describir lo que he
visto son mías, a menos que sean las que me haya dicho un
ángel, las cuales siempre encierro entre comillas". -- Review
and Herald, oct. 8, 1867, citado en Selected
Messages, tomo 1, p. 37.
"En mis libros se
expresa la verdad, parapetada tras un 'así ha dicho el
Señor'. El Espíritu Santo trazó estas verdades sobre mi
corazón y mi mente". -- Carta 90, citada en Ellen
G. White, por Arthur L. White, tomo 4, p. 393.
"Al vacilar
mi pluma un momento, vienen a mi mente las palabras
apropiadas. ... Cuando escribo estos preciosos libros, si yo
titubeo, se me dan las palabras mismas con las cuales
expresar la idea". -- Selected Messages,
tomo 3, pp. 51-52.
"Me levanté a las tres de la mañana para
escribirte. Dios estaba hablando por medio de la arcilla.
Podrías decir que esta ... era sólo una carta. Sí, era sólo
una carta, pero inspirada por el Espíritu de Dios, para
traer a vuestras mentes las cosas que se me habían mostrado
a mí. En estas cartas que yo escribo, en los testimonios que
yo doy, les presento lo que el Señor me ha presentado a mí.
Yo no escribo ni un sólo artículo para el periódico
expresando meramente mis propias ideas. Ellas son lo que
Dios ha abierto delante de mí en visión". -- Testimonies,
tomo 5, p. 67, escrito en 1882.
"Yo soy sólo un instrumento en las manos del
Señor para hacer la obra que Él me ha puesto a hacer. Las
instrucciones que he dado por medio de la pluma o de viva
voz han sido expresión de la luz que Dios me ha dado a mí.
He tratado de poner delante de vosotros los principios que
por años el Espíritu de Dios ha estado impresionando en mi
mente y escribiendo en mi corazón". -- Testimonies,
tomo 5, p. 691, escrito en 1889.
"He escrito muchos libros, y han circulado
ampliamente. De mí misma, yo no podría haber presentado la
verdad en estos libros, pero el Señor me ha dado la ayuda de
su Santo Espíritu. Estos libros, que proporcionan la
instrucción que el Señor me ha dado durante estos pasados
sesenta años, contienen luz del cielo, y pasarán la prueba
de una investigación". -- Selected Messages, tomo 1,
p. 35, escrito en 1906.
La evidencia de que Ellen
White creía que era divinamente inspirada es clara. Ella
enseñó consistentemente que sus visiones eran la fuente de la
información que ella escribía en sus cartas, libros,
artículos, y testimonios. Su esposo, James White, defendía
vigorosamente las afirmaciones de ella:
"(Ellen White) no 'obtiene los
mensajes' de sus visiones 'de enseñanzas o estudios
previos'". -- James White, en A Word to the
"Little Flock", p. 22, escrito en 1847.
Evidencia de deshonestidad
Pero, durante toda su vida,
y durante los años subsiguientes, han salido a relucir una y
otra vez informes en el sentido de que Ellen White no fue
honesta en cuanto a la fuente de su información. Especialmente
en las últimas dos décadas, los investigadores han descubierto
tal montaña de evidencia probando el plagiarismo de Ellen
White que la iglesia Adventista del Séptimo Día se ha visto
obligada a emprender sus propias investigaciones.
Walter Rea demostró el
plagiarismo de EGW
En enero de 1980, Walter
Rea (en ese entonces pastor ASD y profesor de Biblia en
escuelas superiores) presentó a los dirigentes de la iglesia
la evidencia que había descubierto. Rea demostró que Ellen
White había copiado tanto material de otros autores que apenas
si hay un pensamiento original en alguno de sus libros. Esto
estremeció terriblemente al Adventismo del Séptimo Día. En
consecuencia, la Conferencia General auspició una
investigación de ocho años de duración de la propia iglesia
sobre el libro The Desire of Ages
[El Deseado de Todas las Gentes] que en aquel entonces se
consideraba el más auténtico de los muchos libros de EGW) para
establecer si Ellen White realmente había copiado o no.
Fred Veltman demostró que
EGW había mentido
El equipo de investigación
de la denominación estuvo dirigido por uno de los suyos, el
Dr. Fred Veltman (en ese tiempo director del Departamento de
Religión del Pacific Union College). Después de la
presentación inicial del Dr. Veltman, se publicó un resumen en
los números de octubre y diciembre de 1999 de Ministry, la revista oficial
de la iglesia Adventista del Séptimo Día para el clero.
La mayoría de los pastores
y laicos ASD no tienen ni idea de la existencia del informe
Veltman, aunque el texto completo está disponible por medio
del Pacific Union College. El informe oficial Veltman llegó
con franqueza a la conclusión de que, no sólo había Ellen
White copiado vorazmente las obras de otros escritores, sino
que tanto ella como sus colaboradores habían mentido
deliberadamente para ocultar la verdad. He aquí dos
conclusiones del informe Veltman:
"Es de primordial importancia observar que la
misma Ellen White, no sus asistentes literarias, compuso el
contenido básico del texto de Desire of Ages. Al
hacerlo, ella fue la única que tomó expresiones literarias
(copió) de las obras de otros autores sin darles crédito
como sus fuentes (plagiarismo). Segundo, hay que reconocer
que Ellen White usó escritos ajenos consciente e
intencionalmente. ... Ellen White, y otros que hablaban en
nombre de ella, no admitieron, ni implícita ni
explícitamente, y hasta negaron, la dependencia literaria de
parte de ella". -- The Desire of Ages Project: The
Conclusions", Ministry, noviembre 1990, p. 11.
Cuando el Dr. Veltman fue cuestionado sobre las
repetidas afirmaciones de Ellen White de que ella sólo
escribía lo que el Señor le había mostrado en visión y que
ella no había copiado las obras de otros autores, contestó:
"De salida, tengo que admitir que, a mi parecer,
este es el problema más serio al que hay que enfrentarse en
relación con la dependencia literaria (las copias) de Ellen
White. Es un golpe directo al corazón de su honestidad,
su integridad, y por lo tanto, de su confiabilidad".
Ibid., p. 14.
¡El informe oficial de la
iglesia Adventista del Séptimo Día llegó a la conclusión de
que Ellen White copió material de otros autores consciente y
deliberadamente, y que ni ella ni sus asociados admitieron, y
aun negaron, que ella había copiado! El mito de que Ellen
White escribió bajo la inspiración directa de Dios simplemente
no cuadra con los hechos.
¿Cuánto
material
copió Ellen White? El Dr. Veltman arribó a la conclusión de
que ella había copiado tanto material de otros escritores que:
"El contenido del comentario de Ellen White sobre
la vida y el ministerio de Jesús, The Desire of Ages,
es en su mayor parte derivado (copiado) más bien que
original. ... En términos prácticos, esta conclusión declara
que, en los escritos de Ellen White sobre la vida de Jesús,
no se puede reconocer ninguna categoría general de contenido
o catálogo de ideas que sean propias de ella". -- Ibid.,
p. 12.
La Conferencia Bíblica de
1919
Recuérdese, esto no fue lo
que los opositores de Ellen White dijeron de ella; ¡fue la
conclusión a la que llegó el propio equipo de investigación,
cuidadosamente escogido, de la iglesia Adventista del Séptimo
Día! Pero nada de esto era nuevo para los dirigentes de la
iglesia Adventista del Séptimo Día.
Hace siete décadas, y
cuatro años después de la muerte de Ellen White, la iglesia
Adventista del Séptimo Día reunió a sus máximos dirigentes,
teólogos, editores, y eruditos en un intento por tomar una
decisión mutuamente aceptable sobre la validez del ministerio
de Ellen White. Se reunieron en las oficinas centrales de la
iglesia en Takoma Park, Washington D. C., durante una
Conferencia Bíblica que habría de durar la mayor parte de
julio y parte de agosto.
Más de cincuenta personas asistieron a esas
reuniones. Esas personas incluían a:
Arthur G. Daniells, Presidente de la
Conferencia General
G. B. Thompson, Secretario de
Campo de la Conferencia General
W. W. Prescott, Secretario de
Campo de la Conferencia General
C. S. Longacre, Secretario de
la Associación de Libertad Religiosa
F. M. Wilcox, Redactor de Review and Herald
L. L. Caviness, Redactor
Asociado de Review
and Herald
W. E. Howell, Redactor de Christian Educator
A. O. Tate, Redactor de Signs of the Times
M. C. Wilcox, Redactor de
Libros de Pacific Press
T. M. French, Director de la
Escuela de Teología del Emmanuel Missionary College (ahora
Andrews University)
W. H. Wakeham, Profesor de
Biblia en el Emmanuel Missionary College (ahora Andrews
University)
C.M. Sorenson, Profesor de
Historia en el Emmanuel Missionary College
M. E. Kern, Presidente del
Foreign Mission Seminary (ahora Columbia Union College)
H. C. Lacey, Profesor de
Religión en el Foreign Mission Seminary
C. L. Taylor, Director del
Departamento de Biblia del Canadian Junior College
J. N. Anderson, Profesor de
Biblia del Washington Foreign Mission Seminary
W. G. Wirth, Profesor de
Religión en el Pacific Union College.
El 30 de julio y el 1 de
agosto, las reuniones se enfocaron especialmente sobre Ellen
White como "el Espíritu de Profecía". Según las minutas
oficiales, once veces durante esos dos días se les pidió a los
más importantes oficiales de la iglesia Adventista del Séptimo
Día una decisión autorizada sobre la inspiración de ella -- y
once veces evitaron esa decisión. El carácter de esa
discusión se percibe a través de los siguientes extractos
breves:
Puntos en discusión en la
Conferencia Bíblica de 1919
F. M. Wilcox: 'Creo que
tenemos entre manos un asunto muy delicado, y me molestaría
muchísimo que se influyera en el campo y en cualquiera de
nuestras escuelas para
que se descontaran los Testimonios (de Ellen White). Hay
gran peligro de una reacción, y estoy realmente
preocupado. He oído preguntas aquí que han dejado la impresión
en mi mente de que, si se hacen las mismas preguntas en clase
cuando regresemos a nuestras escuelas, vamos
a tener serias dificultades. Creo que hay muchas preguntas que
deberían ser retenidas y no discutidas. ... No
creo necesario que contestemos cada una de las preguntas que
se nos hagan. ... Creo
que, si destruimos la fe en ellos (los Testimonios), vamos
a destruir la fe en el fundamento mismo de nuestra obra. ... Y, a menos que
estas preguntas puedan mnejarse de la manera más diplomática,
creo que vamos a tener
serios problemas'.
J. N. Anderson: '¿Podemos retener esas
cosas y ser fieles a nosotros mismos? Además, ¿no corremos peligro al
hacerlo? ¿Es correcto dejar que nuestro pueblo en
general continúe siendo fiel a la inspiración verbal de los Testimonios? Cuando hacemos eso,
¿no estamos
preparándonos para una crisis que será muy seria algún
día?'
C. L. Taylor: 'Creo que hemos levantado
una gran montaña de dificultades contra la cual tenemos
que salir a luchar. ... Si tenemos que hacer a un lado lo
que la hermana White ha dicho interpretando la historia ... como no
fiable, y también hacer a un lado como no fiables sus exposiciones de la
Escritura, la única conclusión natural para mí, y
probablemente para muchos otros, sería que la misma autoría es no fiable en
relación con la organización, el panteísmo, y cada uno de
todos los otros temas que ella alguna vez discutió;
-- que ella posiblemente
dijo la verdad, pero que es mejor que obtengamos toda la
información histórica que podamos para ver si ella dijo la verdad o no'.
C. L. Daniells: 'Creo
que se puede hacer más daño con los Testimonios afirmando su
inspiración verbal del que se puede hacer con la Biblia'.
M. E. Kern: 'La
pregunta es, ... ¿cómo
podemos pensar, y creer, y saber que hay
inconsistencia aquí, -- algo que no está bien, -- y sin embargo creer que el
Espíritu de Profecía (Ellen White) es inspirado?
... La cuestión es cómo presentar estas cuestiones
a la gente´".
Esas eran las preguntas con
las cuales luchaban los dirigentes Adventistas del Séptimo Día
en 1919, sólo cuatro años después de la muerte de Ellen White.
Reconocían claramente su dilema: ¿cómo admitir que Ellen White
no era inspirada verbalmente -- cómo admitir que ella no era
fiable en ninguna área -- y todavía preservar la fe de la
gente en la iglesia, su organización, y sus doctrinas? Por
otro lado, como dirigentes que conocen estas cosas sobre Ellen
White, ¿cómo podemos mantener nuestra propia integridad y
continuar enseñando los antiguos mitos de los Adventistas del
Séptimo Día? Y si enseñamos los antiguos mitos sobre Ellen
White, ¿no estamos preparando a la iglesia para una futura
crisis cuando salga a luz la verdad?
El veredicto de los
dirigentes en 1919
Esos eran los puntos en
disputa. ¿Cuál fue su veredicto? Se hizo muy evidente para los
dirigentes Adventistas del Séptimo Día que la influencia de
Ellen White sobre la membresía de la iglesia era demasiado
fuerte, y las alternativas demasiado riesgosas para hacer
cualquier declaración oficial repudiando el ministerio de
ella.
Sin embargo, es útil mirar
aquéllo sobre lo que los máximos dirigentes de la iglesia
Adventista del Séptimo Día estuvieron de acuerdo extraoficialmente
en relación con Ellen White durante la Conferencia Bíblica de
1919. Estuvieron de acuerdo sobre once puntos críticos
relacionados con el ministerio de Ellen White:
1. Ellen White no era
inspirada verbalmente.
A. G. Daniells: 'Yo
asumo la posición de que los Testimonios no son inspirados verbalmente, y que fueron
preparados por las secretarias y redactados para darles la
correcta forma gramatical. ... Es inútil ponerse de pie y hablar de la
inspiración verbal de los Testimonios, porque todo el que
alguna vez haya visto hacer el trabajo sabe que no es así,
y ¡que es mejor que lo descartemos!'.
F. M. Wilcox: 'Por
muchos años he sabido cómo
se componían las obras de la Hermana White y cómo se
compilaban sus libros. Nunca he creído en la inspiración
verbal de los Testimonios'.
G. B. Thompson: 'No son inspirados verbalmente, --- eso lo
sabemos, --- ¿y para qué enseñar que lo son?'
2. Ellen White no era
infalible como persona.
A. G. Daniells:
'Ahora, acerca de la infalibilidad. ... Cuando se toma la
posición de que ella no
era infalible, y que sus escritos no son inspirados
verbalmente, ¿no hay oportunidad para que se
manifieste lo humano? ... ¿Y debemos sorprendernos? Cuando
sabemos que el instrumento era falible, y que las verdades
generales, como ella dice, fueron reveladas, ¿no estamos preparados
para ver errores?'
3. Ellen White no era
infalible en sus interpretaciones de la Biblia.
C. L. Taylor: 'Quisiera pedirle que discuta
para nosotros el valor exegético de los Testimonios. ... ¿Podemos aceptar las
explicaciones que ella da sobre las Escrituras? ¿Son
confiables esas explicaciones?'
A. G. Daniells: 'Es posible que haya algunas dificultades
con cuestiones muy críticas'.
4. Ellen White no es una
autoridad sobre cuál traducción de la Biblia usar.
A. G. Daniells: 'No
creo que la hermana White quisiera para nada establecer la
certeza de una traducción. No creo que ella tuviera eso en
mente, o que tuviera algo que ver con poner el sello de
aprobación a la Versión Autorizada o la Versión Revisada,
cuando citó eso'.
5. Ellen White no es exacta
sobre la historia, ni sobre el cumplimiento de la
profecía.
A. G. Daniells: 'Yo
nunca he ido a sus escritos y tomado la historia que
encontré en ellos como una positiva declaración
histórica en relación con el cumplimiento de la
profecía.... Se nos advirtió que
no usáramos a la hermana White como historiadora. Ella nunca
aseguró que lo fuese. Se nos advirtió que no contrastásemos
las afirmaciones de sus escritos con los varios relatos que
existen sobre un hecho'. ...
H. C. Lacey: '... ¿No es su valor espiritual, más bien que
su exactitud histórica,
la prueba final del espíritu de profecía?
A. G. Daniells: 'Sí, creo que sí'.
6. Ellen White no debe
usarse para zanjar controversias que resulten de
diferentes interpretaciones de las Escrituras.
W. W Prescott: 'Algunos
hermanos aquí recuerdan muy bien una seria controversia sobre
la interpretación del capítulo 8 de Daniel, y hubo algunos
hermanos que se oponían a lo que se llamó la nueva posición, y
usaron los escritos de ella para sustentar su posición. Ella les escribió a esos
hermanos y les dio instrucciones de que no usaran sus
escritos para dilucidar la controversia'.
J. N. Anderson: '¿Hasta qué punto consideraría
usted esas palabras de la hermana White como una declaración
general sobre sus escritos?'
A. G. Daniells: 'Creo que trataban
especialmente sobre ese punto entonces, pero creo que debemos
usar el mismo juicio acerca del uso de sus escritos en otros
casos".
7. Los "mensajes de salud"
de Ellen White no son reglas generales para todo el mndo.
A. G. Daniells: 'Por
ejemplo, esta cuestión de la reforma pro salud. Es bien
sabido, a partir de los escritos mismos y de contactos
personales con la hermana White, así como por cuestión de
sentido común, así como al viajar y al adquirir conocimientos
de diferentes partes del mundo, que las instrucciones dadas en
los Testimonios nunca tuvieron el
propósito de ser una gran regla general a gran escala para
el comer y el beber de la gente'.
8. Ellen White copió
material de otros autores sin darles crédito, asegurando
al mismo tiempo que era inspirada por Dios.
A. G. Daniells:
'Ahora, ustedes saben algo sobre ese librito, (Sketches From) the Life
of Paul [Bosquejos de la Vida de Pablo]
(originalmente publicado en 1883). Conocen el problema en que
nos metimos a causa de eso. Nunca pudimos reclamar inspiración para la
totalidad del pensamiento y la preparación del libro
porque fue hecho a un lado por lo mal que había sido
compuesto. No se les
dio crédito a las autoridades correspondientes, y algo de
eso se coló en The
Great Controversy. ... Supongo que todos ustedes
saben acerca de eso y conocían las afirmaciones que se hacían
contra ella, las acusaciones de plagio que se le
hacían, hasta por los autores del libro, Conybeare y
Howson, y que probablemente causarían dificultades a
la denominación debido a lo mucho de su libro que
había sido puesto en (Sketches
From) the Life of Paul sin
darles crédito y sin poner comillas. ... Yo lo
encontré, y lo leí con el hermano Palmer cuando lo encontró, y
conseguimos el libro de Conybeare y Howson, y History of the
Reformation, de Wylie, y leímos
palabra por palabra, página tras página, y no había
comillas, ni créditos, y la verdad es que yo no supe la
diferencia sino hasta que los comparé. ¡Supuse que era la
obra de la hermana White! ... Allí vi la
manifestación de lo humano en estos escritos. Por supuesto, yo
podría haber dicho esto, y lo dije, que ojalá se hubiese tomado un rumbo
diferente en la compilación de los libros. Si se hubiese
tenido el debido cuidado, se
habría evitado que mucha gente se descarriara. ... '
W. W. Prescott: 'Yo no quiero acusar a
nadie. Pero sí creo que se
cometieron grandes errores de ese modo. ... Cuando
hablé con W. C. White sobre esto ... me dijo con franqueza
que, cuando sacaron
Great Controversy, si no encontraban nada en sus escritos
sobre ciertos capítulos para hacer las conexiones
históricas, tomaban otros libros, ... y usaban porciones
de ellos. ...'
9. La inspiración divina de
Ellen White es cuestionable.
F. M. Wilcox: 'Me
gustaría preguntarle, hermano Daniells, si podría aceptarse
como una especie de regla que la hermana White podría estar
errada en los detalles, pero que tenía autoridad sobre la
política general y la enseñanza. ... Me parece que yo tendría que aceptar
lo que ella dice de algunas de esas políticas generales o
descartar toda la cuestión. O el Señor ha hablado por
medio de ella, o Él no ha hablado por medio de ella;
y si la cuestión es decidir en mi propia opinión si Él ha
hablado o no, entonces yo considero los libros de ella de la
misma manera que cualqueir otro libro publicado. Creo que una cosa es que
un hombre estultifique su conciencia, y otra muy distinta
que estultifique su juicio. Una cosa es que yo
haga a un lado mi conciencia, y otra que yo cambie mi juicio
acerca de algunos puntos de vista que yo sostengo'.
A. G. Daniells:
'Nosotros no creamos ese problema. ¿O sí? Nosotros los de la
Conferencia General no lo creamos, pues no hicimos la
revisión. Nosotros no participamos en eso. No tuvimos nada en
absoluto que ver con eso. Todo se hizo bajo la supervisión de
ella. Si
hay un problema aquí, lo creó ella, ¿no
es así?'
10. Si los escritos de Ellen
White tienen que ser corregidos, ¿cómo se puede afirmar
que el resto de su obra fue inspirado?
W. W. Prescott: 'He
aquí mi problema. He examinado esto (Great Controversy) y sugerido cambios
que deberían hacerse para corregir afirmaciones. Estos cambios
han sido aceptados. Mi
problema personal es conservar la fe en aquellas cosas con
las cuales no puedo tratar sobre esa base. ... Si
corregimos aquí y allá, ¿cómo vamos a quedar en los otros
lugares?'
11. Si la iglesia hubiera
dicho la verdad sobre Ellen White, no tendría los
problemas que tiene ahora.
G. B.
Thompson: ' Creo que estamos en este problema a causa
de la errónea educación que ha tenido nuestro pueblo. Si hubiésemos enseñado
la verdad siempre sobre este asunto, no tendríamos ningún
problema ni disgusto en la denominación actualmente. ¡Pero
tenemos el disgusto porque no hemos enseñado la verdad!'
¡Los borradores de la
Conferencia Bíblica de 1919 bajo llave y candado!
Después de discutir cada
uno de estos temas y llegar a un acuerdo extraoficial sobre ellos, el
Presidente de la Conferencia General, A. G. Daniells, solicitó
que los borradores
oficiales de sus discusiones fueran puestos bajo llave por
los siguientes cincuenta años. La mejor oportunidad para que
los dirigentes de la iglesia comunicaran "la verdad" sobre
Ellen White había pasado.
Los registros oficiales de
la Conferencia Bíblica de 1919 fueron archivados hasta
diciembre de 1974, cuando el Dr. Donald Yost los descubrió
envueltos en papel en una bóveda en la Conferencia General.
Los paquetes contenían aproximadamente 2.400 hojas
mecanografiadas transcritas de las notas estenográficas
oficiales tomadas en las reuniones. Extractos pertinentes
fueron impresos en Spectrum, Volumen 10, Número 1, pero esa
edición ya no está disponible en Spectrum. Una reproducción de
los artículos de la Conferencia Bíblica de 1919, publicados
por Spectrum, está disponible en forma de folleto,
pidiéndola a Sydney Cleveland, 172 Suncrest Drive, Greenwood,
IN46143 por $6. Esta traducción ha sido ligeramente
condensada. Se han añadido subtítulos para que los lectores
puedan seguir más fácilmente el hilo de las discusiones.
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