¡CONSTANTINO ESCRIBIÓ MATEO 28:19!

¿Qué escribió realmente Mateo:
"Bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo" o
"Id y haced discípulos a todas las naciones EN MI NOMBRE"?


Este artículo se basa en una publicación originalmente escrita en 1961, titulada "Una colección de evidencia a favor y contra la redacción tradicional de la frase bautismal en Mateo 28:19" ["A Collection of the Evidence For and Against the Traditional Wording of the Baptismal Phrase in Matthew 28:19"]. El autor era ministro, presumiblemente protestante. Firmó su trabajo simplemente como A. Ploughman. Vivía en Birmingham, Inglaterra. Durante sus 50 años de estudio de la Biblia, el autor no había encontrado nada que tratara de la autenticidad de Mateo 28:19, excepto en artículos agotados, libros y enciclopedias. Yo no habría considerado examinar esta información excepto por el hecho de que un amigo de confianza se sintió bastante celoso de la importancia de las conclusiones a las que llega el artículo. En él, sólo las citas históricas seculares se han conservado como fueron escritas en la investigación de Ploughman. 

Cuestionar la autenticidad de Mateo 28:19 no es cuestión de establecer con cuánta facilidad esto se puede o no se puede explicar dentro del contexto de puntos de vista doctrinales establecidos. Más bien, es cuestión de descubrir los pensamientos mismos de nuestro Dios, recordando que su verdad, no nuestras tradiciones, es eterna.

La información presentada es extremadamente relevante para nuestra fe. La cantidad de información que apoya las conclusiones presentadas puede parecer abrumadora pero, para el buscador serio de la verdad, la búsqueda bien vale la pena el esfuerzo. Espero que usted permita que los hechos contenidos en este artículo le insten a la acción. Si descubre que que no ha sido bautizado en el nombre del Dios verdadero, y a sabiendas ha aceptado un sustituto, ¿cómo respondería Dios?

Sin embargo, debe recordarse que no tenemos ningún manuscrito escrito conocido en el primero, el segundo y hasta el tercer siglo. Hay un vacío de más de trescientos años entre cuando Mateo escribió su epístola y nuestras copias de manuscritos más antiguas. (También se necesitaron más de trescientos años para que la Iglesia Católica evolucionara hacia lo que los "primeros padres de la iglesia" querían que se convirtiera).

Ni un solo manuscrito primitivo está libre de errores textuales. Algunos tienen errores singulares; otros manuscritos fueron copiados extensamente y tienen los mismos errores. Nuevamente, nuestro propósito es examinar toda la evidencia y establecer, hasta donde sea posible, cuáles eran las palabras originales.

Considerando el hecho de que ninguna de las escrituras, desde Génesis hasta Malaquías, hace ninguna referencia a un Dios trinitario, y que, desde Marcos hasta Apocalipsis, tampoco tenemos evidencia de la Trinidad, tenemos que considerar la posibilidad de que todos los manuscritos existentes puedan tener en común uno o más errores textuales.

De acuerdo con el historiador bíblico C. R. Gregory:

Los manuscritos griegos del texto del Nuevo Testamento eran a menudo alterados por los escribas, que ponían en ellos lo que les era familiar, y que ellos consideraban eran las ideas correctas.

Más adelante trataremos de estos cambios. Otro escritor dijo:

Se da un gran paso adelante cuando proponemos dar a los manuscritos peso de acuerdo con su antigüedad, no de acuerdo con su edad, sino de acuerdo con la antigüedad del texto que contienen. Demostrar cuán honesto es un texto, no estrictamente cuán antiguo es, nos proporciona un texto cuyo contenido es verdaderamente antiguo. Cuando verificamos que un texto es más antiguo que el siglo cuarto, que el texto era corriente en el siglo tercero, o mejor todavía, en el siglo segundo, todavía no podemos estar seguros de que no ha sido alterado. Necesitamos tratar de verificar que el texto es texto puro. Hay razones para creer que los errores más burdos que han deformado el texto ya habían entrado en él en el siglo segundo. Sin embargo, lo que deseamos averiguar, no es meramente un texto antiguo, sino un texto exacto.

Por supuesto, los "errores más burdos" a los que se refiere este escritor no son doctrinales, sino en el texto mismo. Sin embargo, no es de sorprenderse que algunas de estas corrupciones textuales ocurrieran simultáneamente con los respectivos cambios doctrinales a medida que éstos eran introducidos en la iglesia primitiva. Esta apostasía histórica será tratada más adelante.

Lo mismo que con los manuscritos, todas las versiones existentes, que contienen el final de Mateo, tambén contienen el nombre trino. Pero, por supuesto, hay más que considerar que lo que está presente en un documento. También hay que tomar en cuenta lo que está ausente. Citando nuevamente la Enciclopedia de Religión y Ética: "En todas las versiones existentes, el texto se halla en la forma tradicional [trinitaria] ... aunque hay que recordar que los mejores manuscritos, tanto de las versiones en latín antiguo africano como en siríaco antiguo, son defectuosas en este punto".

F. C. Conybeare expande más:

En los únicos códices en los que más probablemente se conservaría una interpretación más antigua, a saber, el siríaco sinaítico y el más antiguo manuscrito en latín, las páginas que contenían el final de Mateo han desaparecido.

Así que, aunque todas las versiones primitivas contienen el nombre trino en Mateo 28:19, las más anteriores de estas versiones no contienen el versículo en absoluto. ¡Y, curiosamente, no por omisión, sino porque fue quitado! No podemos estar seguros de por qué estas páginas fueron destruidas pero, a causa de nuestro estudio, ahora nos vemos obligados a consultar los primeros escritos históricos.

EXTRACTOS DE LOS PRIMEROS ESCRITORES CATÓLICOS

Antes de referirnos a estos primeros escritores, debemos decir enfáticamente que, si la cuestión bajo consideración fuera de doctrina, los registros escritos de estos escritores católicos serían totalmente irrelevantes. Las doctrinas deben obtenerse de la pura palabra de Dios solamente, no de los católicos, judíos u otras fuentes. Estos autoproclamados "padres" vivieron en una época de irrestricta herejía. Su testimonio es inapreciable sólo porque proporciona una verificación incidental e independiente de textos escriturales mucho más antiguos que nuestras copias actuales completas.

Durante mis lecturas, he logrado substanciar estas dudas sobre la autenticidad del texto de Mateo 28:19 citando evidencia patrística [L. pater: "padre"] contra ella, tan de peso, que en el futuro, los teólogos más conservadores se abstendrán de hacer descansar en él en absoluto cualquier argumento dogmático, mientras que los más letrados lo descartarán tan completamente como han descartado su texto compañero, el de los 'tres testigos' - F. C. Conybeare en el Hibbert Journal.

¿Podría ser cierta esta osada afirmación? Aunque no queda en existencia ni un solo manuscrito de los tres primeros siglos, sí tenemos observaciones de "testigos presenciales" de por lo menos dos hombres que, de hecho, tuvieron acceso a manuscritos que datan de mucho antes que los nuestros más antiguos. Otros también citan a Mateo 28:19, cuyas obras escritas se han preservado, y datan de época mucho más anterior que nuestras mejores copias manuscritas. Estamos a punto de examinar quiénes eran estos hombres y cuáles eran esas circunstancias. Intentaremos establecer si estas son citas confiables de las escrituras originales. ¿Cómo citaron ellos a Mateo 28:19? En sus comentarios, era implícita una controversia existente alrededor del uso de las escrituras que se citaban? ¿Era implícita una Trinidad? Estas son preguntas que pueden ser respondidas.

En las páginas que siguen, consideraremos evidencias de los siguientes hombres, bien sea por medio de citas de sus escritos, o por medio de comentarios de sus escritos por parte de sus contemporáneos: 1) Eusebio de Cesarea, 2) el conocido autor de De Rebaptismate, 3) Orígenes, 4) Clemente de Alejandría, 5) Justino Mártir, 6) Macedonio, 7) Eunomio y 8) Afrates.

Nuestra búsqueda a través de sus escritos no es para establecer ninguna doctrina, sino para hallar testigos tempranos del versículo en cuestión.

EUSEBIO DE CESAREA

Nuestro primer testigo será Eusebio de Cesarea, también conocido como Eusebio Panfilios. Nació alrededor del 270 A. D. y murió alrededor de 340 A. D. Vivió en tiempos de rampantes cambios doctrinales; era trinitario, y ya tarde en su vida, ayudó a la formación del Credo de Nicea. Con relación a nuestra búsqueda sobre Mateo 28:19, Eusebio es nuestro testigo clave. Por consiguiente, para establecer su veracidad como testigo creíble, consideremos las siguientes citas: "Eusebio de Cesarea, con quien estamos en deuda por la preservación de tantas obras contemporáneas de la antigüedad, muchas de las cuales habrían perecido si él no las hubiese reunido y editado". Robert Roberts, In Good Company, tomo III, pág. 10.


Eusebio, el más grande maestro griego de la iglesia y el teólogo más experto de su tiempo ... trabajó sin cesar en favor de la aceptación de la palabra pura del Nuevo Testamento tal como procedía de los apóstoles ... Eusebio ... confió todo el tiempo sólo en manuscritos antiguos, y siempre confesó abiertamente la verdad cuando no podía hallar suficiente testimonio. E. K. en Christadelphian Monatshefte, Ago. 1923, de Mosheim, en una nota editorial.

Eusebio Panfilios, obispo de Cesarea en Palestina, hombre de vasta lectura y tradición, y que había adquirido fama inmortal por sus trabajos en historia eclesiástica y en otras ramas de la erudición teológica. Capítulo 2, 9 ... Hasta más o menos los 40 años de edad, vivió en gran intimidad con el mártir Pánfilo, un hombre erudito y devoto de Cesarea, y fundador de una extensa biblioteca allí, de la cual Eusebio derivó su vasto tesoro de conocimiento. Dr. Westcott en "General Survey", página 108.

Eusebio, a cuyo celo debemos la mayor parte de lo que sabemos sobre la historia del Nuevo Testamento. Peake Bible Commentary, pág. 596.

El escritor más importante del primer cuarto del siglo cuarto fue Eusebio de Cesarea... Eusebio fue un hombre de poca originalidad y poco juicio independiente. Pero era ampliamente versado en la literatura cristiana griega de los siglos segundo y tercero, la mayor parte de la cual ha perecido y es irrecuperable. Las épocas subsiguientes tienen una profunda deuda con su honesta erudición, aunque ésta era un poco confusa y a veces no poco prejuiciada. Dictionary of Christian Biography and Literature.

Algunos cientos de obras, varias de ellas muy extensas, han sido citadas directamente o se ha hecho referencia a ellas como leídas por Eusebio. En muchos casos, leía un tratado entero buscando una o dos notas históricas, y debe haber escudriñado muchos otros escritos sin hallar nada útil para sus propósitos. Parece que la pregunta más vital que viene a la mente es la sinceridad de Eusebio. ¿Manipuló los materiales o no? El sarcasmo de Gibbon (Decline and Fall, c. xvi) es bien conocido ... Los pasajes a los cuales Gibbon se refiere no confirman su acusación ... Eusebio se contenta con condenar estos pecados ... en términos generales, sin entrar en detalles ... pero no deja ninguna imputación a su honestidad. Mosheim, nuevamente en una nota editorial. Eusebio fue un historiador importante, y tenía acceso a los mejores auxiliares que su época proporcionaba para componer una correcta historia. Mosheim.

De los testigos patrísticos del texto del Nuevo Testamento, como estaba en los manuscritos griegos desde más o menos 300-340 A. D., ninguno es más importante como Eusebio de Cesarea, porque vivió en la más importante Biblioteca Cristiana de aquella época, a saber, aquella cuyos materiales Orígenes y Panfilio habían reunido. No es ninguna exageración decir que de esta sola colección de manuscritos en Cesarea se deriva la mayor parte de la literatura sobreviente ante-nicena. En su Biblioteca, Eusebio debe haber manejado habitualmente códices de los evangelios más antiguos, por doscientos años, que los más antiguos de los grandes unciales que ahora tenemos en nuestras bibliotecas. F. C. Conybeare en Hibbert Journal, 1902.

Considerando la honestidad, capacidad y oportunidad de Eusebio como testigo del texto del "Nuevo Testamento", vayamos ahora a su evidencia concerniente a Mateo 28.

LA EVIDENCIA DE EUSEBIO

De acuerdo con Ludwig Knupfer, editor del Christadelphian Monatshefte, Eusebio, entre sus muchos otros escritos, compiló un archivo de variantes corruptas de las Santas Escrituras, y

la más grave de todas las falsificaciones denunciadas por él es, sin duda, la redacción tradicional de Mateo 28:19.

Su material fuente se ha perdido, como él escribió más tarde:

... a causa de la guerra, he perdido todos mis archivos y otros materiales relacionados con la revista.

Pero varias autoridades mencionan una obra titulada Discrepancias en los Evangelios, y otra obra titulada The Concluding Sections of the Gospels [Secciones Finales de los Evangelios].

De acuerdo con Conybeare:

Eusebio cita este texto (Mateo 28:19) una y otra vez en obras escritas entre los años 300 y 336, a saber, en sus largos comentarios sobre Salmos, Isaías, su Demonstratio Evangelica, su Teofanía ... en su famosa historia de la iglesia y en su panegírico del emperador Constantino. Después de una búsqueda moderada en estas obras de Eusebio, he hallado citas de Mateo 28:19, y siempre en la forma siguiente: 'Id y haced discípulos a todas las naciones en mi nombre, enseñándoles que observen todas las cosas que os he mandado'.

La investigación de Ploughman reveló todas estas citas, excepto una, que está en una cadena publicada por Mai en una revista alemana, Zeitschrift fur die neutestamentliche Wisenschaft, editada por el Dr. Erwin Preuschen en Damstadt en 1901. Eusebio no se contentó meramente con citar el versículo de esta forma, sino que, más de una vez, lo comentó de tal manera que demostraba cuánto había confirmado las palabras "en mi nombre". Así, pues, en su Demonstratio Evangelica, escribió lo siguiente:

Porque no les ordenó "hacer discípulos a todas las naciones" simplemente y sin aptitud, sino con la adición esencial "en mi nombre". Porque tan grande era la virtud que acompañaba esta apelación que el apóstol dice: "Dios le otorgó el nombre que es sobre todo nombre, para que en el nombre de Jesús se doble toda rodilla de las cosas que están en el cielo y en la tierra y debajo de la tierra". Por consiguiente, era correcto que hiciera énfasis en la virtud del poder que residía en su nombre, pero que estaba oculto a los muchos, y que por lo tanto dijera a sus apóstoles: "Id y haced discípulos a todas las naciones en mi nombre". (col 240, p. 136).

Conybeare continuó, en Hibbert Journal, 1902:

Es evidente que éste fue el texto hallado por Eusebio en los muy antiguos códices reunidos entre cincuenta y ciento cincuenta años antes de su nacimiento por sus grandes predecesores. No había oído que hubiese ni sabía nada acerca de ninguna otra forma de texto sino hasta que hubo visitado Constantinopla y asitió al Concilio de Nicea. Luego, en dos controvertidas obras escritas en su extrema ancianidad, y tituladas, la una, 'Contra Mercelo de Ancyra', y la otra, 'Acerca de la teología de la iglesia', usó la redacción común. Otro escrito de él también lo contiene, a saber, una carta escrita después de que el Concilio de Nicea hubo terminado y dirigida a su veedor de Cesarea.

En su Crítica Textual del Nuevo Testamento, Conybeare escribió:

Por consiguiente, es claro que, de los manuscritos que Eusebio heredó de su predecesor, Panfilio, en Cesarea de Palestina, por lo menos algunos conservaron la redacción original, en la cual no se hace ninguna mención ni del bautismo ni del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo. Se ha conjeturado por el Dr. Davidson, el Dr. Martineau, el Deán de Westminster, y el Professor Harnack (para mencionar sólo unos pocos nombres de entre muchos) que aquí el texto recibido no podría contener las palabras mismas de Jesús - esto mucho antes que cualquiera - excepto el Dr. Burgon, que se guardó el descubrimiento para sí mismo - hubiese notado la forma de redacción de Eusebio.

Naturalmente, una objeción fue suscitada por el Dr. Chase, obispo de Ely, que argumentaba que Eusebio ciertamente halló el texto tradicional en sus manuscritos, pero había utilizado la redacción más breve en sus obras por temor a vulgarizar la "sagrada" redacción trinitaria. De manera interesante, un obispo moderno reavivó este mismo argumento, usado 150 años antes, en apoyo del texto falsificado de 1 Juan 5:7-8:

Porque tres son los que dan testimonio en el cielo: el Padre, elVerbo y el Espíritu Santo; y estos tres son uno. Y tres son los que dan testimonio en la tierra: El Espíritu, el agua y la sangre; y estos tres concuerdan.

Según Porson (en un prefacio a sus Cartas):

Bengel ... aceptaba que las palabras (los tres testigos) no estaban en ningún manuscrito genuino. ... ¡Ciertamente, entonces, el versículo es espurio! ¡No! Este erudito halla una vía de escape. 'El pasaje era de una naturaleza tan sublime y misteriosa que la secreta disciplina de la iglesia lo retiró de los libros públicos, hasta que gradualmente se perdió'. ¿Con qué falta de evidencia debe trabajar un crítico que recurre a un argumento como éste?

Conybeare continúa, refutando el argumento del obispo de Ely:

Es suficiente respuesta señalar que el argumento de Eusebio, cuando cita el texto, involucra el texto 'en mi nombre'. Porque, pregunta, '¿en nombre de quién?', y responde que fue el nombre mencionado por Pablo en su epístola a los Filipenses 2:10.

Finalmente, la Enciclopedia de Religión y Ética afirma:

Resumiendo, los hechos son que Eusebio cita a Mateo 28:19 veintiuna veces, ya omitiendo todo entre 'naciones' y 'enseñando' o bien en la forma 'haced discípulos a todas las naciones en mi nombre', siendo esta última forma la más frecuente.

Habiendo considerado la evidencia de Eusebio, consideremos algunos otros escritores primitivos.

OTROS ESCRITOS PRIMITIVOS

Así los entendía el autor anónimo de De Rebaptismate en el siglo tercero, y se espacia en 'el poder del nombre de Jesús invocado sobre un hombre en el bautismo'. (El autor de De Rebaptismate, del Diccionario Bíblico Smith, Tomo I, página 352).

En las obras de Orígenes, como se conservan en griego, la primera parte del versículo se cita tres veces, pero su cita siempre se detiene antes de llegar a las palabras 'las naciones'; y eso, de por sí, indica que su texto ha sido censurado, y las palabras que seguían, 'en mi nombre', han sido tachadas. - Conybeare.

En las páginas de Clemente de Alejandría, un texto algo similar al de Mateo 28:19 se cita una vez, pero de un hereje gnóstico llamado Teódoto, y no del texto canónico, sino como sigue: 'Y a los apóstoles les da el mandamiento: Yendo, predicad y bautizad a los que creen en el nombre del Padre, el Hijo y el Espíritu Santo'. Excerta cap. 76, ed. Sylb, página 287, citado de Conybeare.

Justino [Mártir] ... cita un dicho de Cristo ... como prueba de la necesidad de la regeneración, pero retrocede al uso de Isaías y la tradición apostólica para justificar la práctica del bautismo y el uso de la fórmula trina. Esto ciertamente sugiere que Justino no conocía el texto tradicional de Mateo 28:19. - Enciclopedia de Religión y Ética.

En Justino Mártir, que escribió entre 130 A. D. y 140 A. D., hay un pasaje que ha sido considerado como una cita o un eco de Mateo 28:19 por varios estudiosos, por ejemplo, Resch, en su Ausser canonische Parallelstellen, que ve en él un compendio del texto ordinario. El pasaje está en el dialogo de Justino con Trifón 39, p. 258: 'Dios no ha infligido ni inflige el juicio, como sabiendo que algunos que aun hoy están siendo hechos discípulos en el nombre de su Cristo y están abandonando el camino del error, también reciben dones cada uno según lo merezcan, siendo iluminados por el nombre de este Cristo'. "Hasta ahora, la objeción a estas palabras, siendo reconocida como una cita fuera de contexto, era que ignoraba la fórmula 'bautizándolos en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo'. Pero el descubrimiento de la forma eusebiana de texto elimina la dificultad: y Justino es visto teniendo el mismo texto ya en el año 140, que Eusebio regularmente halló en sus manuscritos desde el 300 hasta el 340.- Conybeare (Hibbert Journal).

Podemos inferir que el texto no había sido fijado cuando Tertuliano escribió a principios del siglo tercero. A mediados de ese siglo, Cipriano pudo insistir en el uso de la triple fórmula como esencial en el bautismo aun de los ortodoxos. El papa Esteban le respondió que el bautismo, aun de los herejes, era válido si sólo el nombre de Jesús era invocado. (Esta decisión no impidió que los papas del siglo séptimo excomulgaran a la Iglesia Celta entera por permanecer fiel al uso antiguo del nombre de Jesús). En la última mitad del siglo cuarto, el texto 'en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo' era usado como grito de batalla por los ortodoxos contra los adherentes de Macedonio, que eran llamados 'pneumato-machi' o 'combatientes contra el Espíritu Santo ' porque declinaban incluir el Espíritu en la Trinidad de personas como co-igual, consubstancial y co-eterno con el Padre y el Hijo. También negaban firmemente que algún texto del Nuevo Testamento autorizara tal coordinación del Espíritu con el Padre y el Hijo. De aquí que deduzcamos que sus textos concordaban con el de Eusebio. - (Conybeare (Hibbert Journal).

Se hallan excepciones que quizás apunten a la desaparición de una antigua práctica. Cipriano (Ep. 73) y los 'Cánones Apostólicos' (no. 50) combaten la fórmula más corta, atestiguando con ello su uso en ciertas áreas. Por tanto, la ordenanza del Canon Apostólico reza: 'Si algún obispo o prebítero no cumple tres bautismos de una iniciación, sino un bautismo que se administra (como) en la muerte del Señor, que sea despedido'. 'Esta era la fórmula de los seguidores de Eunomio (Sócr. 5:24), 'porque no bautizaban en la Trinidad sino en la muerte de Cristo'. En consecuencia, usaban solamente una inmersión. - Encyclopedia Biblia (Artículo sobre el "Bautismo").

Hay otro testigo cuyo testimonio debemos considerar. Es Afrates ... que escribió entre el año 337 y el 345. Cita el texto de una manera formal, como sigue: 'Haced discípulos a todas las naciones, y ellas creerán en mí'. Las últimas palabras parecen ser un comentario sobre la frase de Eusebio 'en mi nombre'. Pero, en todo caso, imposibilitan el textus receptus con su mandato de bautizar en el nombre trino. Si la redacción de Afrates fuera un hecho aislado, podríamos considerarlo como una cita suelta, pero en presencia de los textos de Eusebio y Justiniano, esto es imposible. - Conybeare.

CÓMO FUERON CAMBIADOS LOS MANUSCRITOS

Las siguientes citas demuestran cuán libremente alteraban los escribas los manuscritos del "Nuevo Testamento", en agudo contraste con los escribas de las escrituras del "Antiguo Testamento", que copiaban los escritos sagrados con reverencia y estricta exactitud.

Estas citas demuestran también el primitivo comienzo herético de la inmersión trina en el tiempo en que la doctrina de la Trinidad estaba siendo formulada, y cómo los escritos del "Nuevo Testamento" fueron cambiados para ajustarlos a la práctica sincretizada.

En el caso que acabamos de examinar (Mat. 28:19), debe notarse que ni un solo manuscrito ni versión antigua ha preservado para nosotros la verdadera interpretación. Pero eso no es sorprendente porque, como nos lo recuerda el Dr. C. R. Gregory, uno de los más grandes críticos textuales: 'Los manuscritos griegos del texto del Nuevo Testamento eran a menudo alterados por los escribas, que ponían en ellos las interpretaciones que les eran familiares, y que ellos sostenían eran la interpretación correcta'. (Canon y Texto de del N. T. 1907, pág. 424). "Estos hechos hablan por sí solos. Nuestros textos griegos, no sólo de los evangelios, sino también de las epístolas, han sido revisados e interpolados por copistas ortodoxos. En algunos casos, podemos rastrear sus perversiones del texto con la ayuda de citas patrísticas y revisiones antiguas. Pero deben quedar muchos pasajes que han sido corregidos de ese modo, pero en los cuales no podemos actualmente revelar el fraude. Era necesario subrayar este punto porque el Dr. Westcott y Hort acostumbraban afirmar que no hay ninguna evidencia de que se hayan hecho cambios meramente doctrinales en el texto del Nuevo Testamento. Esto es exactamente lo contrario de la verdad, y distinguidos estudiosos como Alfred Loisy, J. Wellhausen, Eberhard Nestle, y Adolf Harnack, para mencionar sólo cuatro nombres, no tienen escrúpulos en reconocer este hecho". Sin embargo, aunque esto es perfectamente correcto, "hay varias razones para que nos sintamos seguros acerca de la confiabilidad general de nuestras traducciones". Peter Watkins, en un excelente artículo, 'Bridging the Gap' [Salvando la Brecha] en The Christadelphian, Enero 1962, pp. 4-8).

El Codex B. (Vaticanus) sería el mejor de todos los manuscritos existentes ... si estuviera preservado completamente, menos dañado, (menos) corregido, más fácilmente legible, y no hubiese sido alterado por una mano posterior en más de dos mil lugares. Por lo tanto, Eusebio no carece de fundamento cuando acusa a los adherentes de Atanasio y de la doctrina de la Trinidad surgida recientemente de falsificar la Biblia más de una vez. - Fraternal Visitor 1924, página 148, traducción de Christadelphian Monatshefte.

Nosotros sabemos ciertamente de más interpolaciones y corrupciones introducidas en las Escrituras ... por los atanasianos y relacionadas con la Trinidad que en ningún otro caso en absoluto. Que sepamos, no tenemos ninguna interpolación ni corrupción de esta clase hecha en ninguna de ellas ni por los eusebianos ni por los arrianos. Whiston - En la Segunda Carta al Obispo de Londres, 1719, p. 15.

Aunque la inmersión trina era, pues, casi una práctica universal, Eunomio (circa 360) parece haber sido el primero en introducir (nuevamente) la inmersión simple 'a la muerte de Cristo'. Esta práctica fue condenada, so pena de degradación, por el Canon Apostólico 46 (al 50). Pero llega ante nosotros nuevamente como un siglo más tarde en España; pero luego, curiosamente, la hallamos considerada como distintivo de ortodoxia en oposición a la práctica de los arrianos. Estos últimos mantuvieron el uso de la inmersión trina, pero de manera tal que establecían su propia gradación en las tres personas. Smith's Dictionary of Christian Antiquities (Artículo sobre el bautismo).

En los 'Dos Caminos' del Didache, se bosquejan los principales deberes de los candidatos para el bautismo y el método de administrarlo por triple inmersión o por infusión en la cabeza. De esta triple inmersión da testimonio también Tertuliano (Adverses Prax 26)... La forma más elaborada del rito en el uso occidental moderno se halla en la Iglesia Católica Romana. Oxford Dictionary of the Christian Church - pp. 125, 126.

Incuestionablemente, la triple inmersión es muy antigua en la iglesia ... Por supuesto, su propósito es honrar a las tres personas de la Santa Trinidad, en cuyo nombre se confiere. Catholic Encyclopedia - página 262.

Si se pensara, como creen muchos críticos, que ningún manuscrito representa más que comparativamente tardías revisiones del texto, es necesario contraponer, contra la masa de evidencia en los manuscritos, la influencia de la práctica bautismal. Parece más fácil creer que el texto tradicional fue ocasionado por la acción de esta influencia en el texto 'eusebiano', no que este último surgió del primero, a pesar de él. Encyclopedia de Religión y Ética - Artículo "Bautismo".

La supervivencia exclusiva del texto tradicional de Mat. 28:19 en todos los manuscritos, tanto griegos como latinos, no necesita causar sorpresa ...Pero, en todo caso, la conversión de Eusebio al texto más largo después del concilio de Nicea indica que, en este tiempo, este texto ´más largo estaba siendo introducido como una contraseña de ortodoxia en todos los códices ... La cuestión de la inclusión del Espíritu Santo en la Trinidad en igualdad de términos había sido machacada, y un texto tan inapreciable para el partido dominante no podía menos que abrirse paso en cada uno de los códices, sin importar sus afinidades textuales. Conybeare - En el Hibbert Journal.

Atanasio ... conoció a Flaviano, el autor de la Doxología, que desde entonces ha sido universal en el cristianismo: 'Gloria al Padre, al Hijo, etc.'. Esto fue compuesto en oposición a la Doxología arriana: 'Gloria al Padre, por el Hijo, en el Espíritu Santo'. Robert Roberts, en "Good Company" [Buena Compañía] (Tomo iii, página 49).

Whiston, en la Segunda Carta Concerniente a las Doxologías Primitivas, 1719, página 17, escribió:

Los eusebianos ... algunas veces llamaban el tiempo mismo cuando, el lugar donde, y la persona por medio de la cual ellas (las formas de doxología) eran primero introducidas ... Así, pues, Filoflorgio, un escritor de esa misma época, nos asegura en 'Extractos de Fotus' que, más o menos en el año 348 A. D., Flaviano, patriarca de Antioquia, reunió a una multitud de monjes, y allí usó por primera vez esta doxología pública:'Gloria al Padre, y al Hijo, y al Espíritu Santo'.

Y, concerniente a la alteración de la escritura basada en el uso litúrgico, Hammond, en "Crítica Textual Aplicada al N. T.", (1890), página 23, escribió:

Hay dos o tres inserciones en el Nuevo Testamento, de las cuales se ha supuesto que tienen su origen en el uso eclesiástico. Las palabras en cuestión, siendo conocidas familiarmente en una conexión particular, fueron quizás anotadas en el margen de alguna copia, y de allí fueron incorporadas por el siguiente transcriptor; o la familiaridad del propio transcriptor con las palabras puede haber conducido a que las insertara. Esta es la fuente a la cual el Dr. Tregelles atribuye la inserción de la doxología al final del Padrenuestro en Mateo 6, que no está presente en la mayoría de las mejores autoridades. Quizás también Hechos 8:37, que contiene la profesión de fe bautismal, que falta por completo en las mejores autoridades, halló su camino en el texto latino de este modo.

Considerando la evidencia de los manuscritos, las versiones y ahora los primeros escritos, usted ya debería haber llegado a la conclusión de  que, en los primeros siglos, algunas copias de Mateo no contenían la moderna interpretación trina. Sin importar las opiniones o las posiciones asumidas por nuestros comentaristas, deberíamos por lo menos admitir ese hecho.

En la práctica legal, cuando varían las copias de un documento original que se ha perdido, se usa la "evidencia interna" para resolver la discrepancia. Es decir, se hace una comparación del texto que no está en disputa con el texto en cuestión, para establecer cuál de las variantes interpretativas es más probablemente la original. Teniendo en mente ambas variantes, ahora iremos a las escrituras mismas en busca de nuestra evidencia interna.

EVIDENCIA INTERNA

"Examinadlo todo; retened lo bueno". (1 Tesalonicenses 5:21). En este versículo, la palabra griega traducida como "examinar" es dokimazo, y significa "poner a prueba, probar, escudriñar (ver si una cosa es genuina o no), reconocer como genuino después de examinarlo, aprobar, considerar como digno".

En nuestros esfuerzos por establecer cuál redacción de Mateo 28:19 es la original, someteremos ambas interpretaciones a diez "pruebas". Al hacerlo, podremos reconocer la genuina, y expondremos a la luz la espuria.

1.  La prueba del contexto

Cuando examinamos el contexto, hallamos que la interpretación trinitaria actual carece de sintaxis lógica; es decir, la verdadera interpretación del texto está oscurecida porque los conceptos variantes no armonizan. Sin embargo, si leemos el texto como sigue, el contexto entero encaja y la progresión de las instrucciones es comprensible:

Toda potestad me es dada ... por tanto, id ... haced discípulos en mi nombre, enseñándoles ... todo lo que yo os he mandado ... yo estoy con vosotros ... (Mateo 28:18-20). 

2.  La prueba de la frecuencia

¿Está la frase "en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo" usada en alguna otra parte de la escritura? Ni una sola vez.

¿Usó Jesús la frase "en mi nombre" en otras ocasiones? Sí, 17 veces, para ser exactos. Ejemplos se hallan en Mateo 18:20; Marcos 9:37, 39, 41; 16:17; Juan 14:14, 26; 15:16; 16:23.

3.  La prueba de la doctrina

¿Está alguna doctrina basada o algún concepto basado en una interpretación de un nombre triple, o del bautismo en el triple nombre? Ninguno en absoluto. ¿Está alguna declaración de la escritura basada en el hecho del bautismo en el nombre de Jesús? ¡Sí! Esto queda aclarado en 1 Corintios 1:13: "¿Está Cristo dividido? ¿Fue Pablo crucificado por vosotros? ¿O fuisteis bautizados en el nombre de Pablo?" Cuando se analizan cuidadosamente estas palabras, indican que los creyentes no deben ser bautizados en nombre del que fue crucificado por ellos. El Padre, en su insondable amor, nos dio su único Hijo para que muriera en nuestro lugar, habiendo sido Él resucitado más tarde a la incorruptibilidad por el Espíritu de Dios. Pero es el Señor Jesús mismo quien fue crucificado, y por lo tanto, es en su nombre que los creyentes deben ser bautizados en agua.

De acuerdo con el Dr. Thomas, en Misterio Revelado, Artículo XLIV:

"No hay sino una manera en que un creyente de 'las cosas concernientes al reino de Dios y el nombre de Jesucristo' se vista de él, o sea investido de su nombre, y esta es, mediante la inmersión en su nombre. El bautismo es para este propósito específico". "En cuanto a su importancia, el bautismo está ligado inseparablemente a la muerte de Cristo. Es el medio por el cual se identifica con la muerte del Señor". - God´s Way, pág. 190. El Padre no murió, ni el Espíritu tampoco. Como dice la escritura, "sepultados con él (Jesús) por el bautismo", no con el Padre, el Hijo, y el Espíritu Santo. (Romanos 6:3-5).

R. Roberts usó esta explicación en "The Nature of Baptism" [La naturaleza del bautismo], página 13:

Según la inmersión trina, no es suficiente ser bautizado en el Hijo. Así, pues, Cristo es desplazado de su posición como el eslabón conector, la puerta de entrada, el 'camino nuevo y vivo', Así, pues, hay tres nombres bajo el cielo por los cuales debemos ser salvos, en oposición a la declaración apostólica, de que 'no hay otro nombre (diferente del de Jesús de Nazaret) bajo el cielo dado a los hombres por el cual debamos ser salvos'. (Hechos 4:12).

Por supuesto, este es el mismo razonamiento ofrecido por Pablo. ¿Fuisteis bautizados en el nombre de Pablo? ¿O en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo, o en cualquier otro nombre que desplace a Cristo de su posición como el Cordero sacrificial y el único nombre dado a nosotros para salvación?

Basados solamente en la interpretación que antecede, podemos comprobar el texto genuino de Mateo 28:19, confirmando el uso de la frase "en mi nombre".

4.  La prueba de la analogía

¿Alguna otra escritura hace referencia al bautismo en el nombre trino? No. ¿Alguna otra escritura se refiere al bautismo en el nombre de Jesús? ¡Sí! El Padre bautizó a los discípulos con el don del Espíritu Santo, una promesa que vino, de acuerdo con Jesús, "en su nombre" (Juan 14:26). Esto es porque Jesús es el "común denominador". [Literalmente: Nombre] tanto en al bautismo por agua como en el bautismo del Espíritu Santo, como se hace evidente en los siguientes textos:

Juan 16:7  Pero yo os digo la verdad: Os conviene que yo me vaya; porque si no me fuese, el Consolador no vendría a vosotros; mas si me fuere, os lo enviaré.

Juan 14:26  Mas el Consolador, el Espíritu Santo, a quien el Padre enviará en mi nombre, él os enseñará todas las cosas, y os recordará todas las cosas que yo os he dicho. (Véase también Juan 7:39).

Hechos 8:12 Pero cuando creyeron a Felipe, que anunciaba el evangelio del reino de Dios y el nombre de Jesucristo, se bautizaban hombres y mujeres.

Nótese que eran bautizados como resultado de haber predicado el nombre de Jesucristo, no bajo los títulos de "Padre, Hijo y Espíritu Santo". Por analogía, debemos, por tanto, ser bautizados en el nombre de Jesús, porque la invocación de su nombre es el catalizador del entendimiento que nos prepara para el bautismo del Espíritu, que también es dado en su nombre (Hechos 2:38-39; 19:1-5; Juan 3:3-5).

5.  La prueba de la consecuencia

¿Cuando somos bautizados, nos "vestimos" del nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo? No. ¿Nos vestimos con el nombre de Jesús? Sí. Según todos los relatos bautismales registrados en la escritura, cuando somos bautizados en el nombre de Jesucristo, de manera bien literal somos bautizados "dentro" del nombre de Jesucristo.

Gálatas 3:27  Porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, de Cristo estáis revestidos.

En la escritura no se hace ninguna mención de ningún bautismo que se relacione con los títulos del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Todos los relatos reales mencionan una clara conexión con la persona de Cristo y su sacrificio expiatorio.


6.  La prueba de la práctica


Mientras cumplían la "gran comisión", ¿bautizaron los discípulos siquiera una vez en el nombre de la Trinidad? ¡Nunca! ¿Bautizaron en el nombre de Jesús? ¡Siempre! (Hechos 2:38; 8:16; 10:48 (inferido); 19:5, etc). Cuando se defiende la inmersión trina, se ha argumentado: "Prefiero obedecer a Jesús antes que imitar a los apóstoles". Pero esta clase de razonamiento pone a los apóstoles en rebeldía y hace que todos los bautismos apostólicos sean contrarios a la palabra de Dios. Si toda la palabra de Dios, y lo era, entonces no deberíamos tratar de oponer la una a la otra, sino más bien buscar reconciliar toda la palabra de Dios en su contexto apropiado y aplicara correctamente a nuestras vidas. Es más fácil creer que los discípulos siguieron las instrucciones finales de Jesús que creer que inmediatamente desobedecieron sus órdenes.

7.  La prueba de la importancia

¿Qué significado se menciona en la escritura en relación con el bautismo de los creyentes en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo? Ninguno. ¿Qué significado se atribuye al bautismo en el nombre de Jesús? Primero, la escritura enseña que el bautismo en el nombre de Jesús es un acto de arrepentimiento que conduce al perdón de los pecados (Hechos 2:38). Segundo, el bautismo sólo en el nombre de Jesús está asociado a la promesa del Espíritu Santo de Dios (Hechos 2:38; 19:1-5). Tercero, el bautismo en el nombre de Jesús en el nombre de Jesús se compara con nuestra disposición personal a ser sacrificios vivientes y hasta a morir con Cristo (Romanos 6:1-4 y Colosenses 2:12). Cuarto, ser bautizado en Cristo es como 'somos revestidos' de Cristo (Gálatas 3:27). Quinto, el bautismo en el nombre de Jesús se llama la "circuncisión de Cristo" y refleja el hecho de que nos "despojamos" del hombre de pecado antes de que nos convirtamos en una "nueva criatura en Cristo Jesús". (Colosenses 2:11-12, 2 Corintios 5:17). El bautismo en el nombre de Jesús expresa fe en la vida física de Jesús, la crucifixión del Hijo de Dios por nuestros pecados, y la remisión de pecados por medio de su nombre. El bautismo trinitario sólo puede expresar fe en la teología católica misma.

8.  La prueba de los relatos paralelos

Mateo 28 no es el único registro en los evangelios acerca de la "gran comisión" de la iglesia. Lucas tambiénregistra este evento con gran detalle. En Lucas 24:46-47, escribió acerca de que Jesús hablaba en tercera persona. "Y que se predicase en su nombre el arrepentimiento y el perdón de pecados en todas las naciones". En contradicción con el texto falsificado, este pasaje, por sí solo, establece la correcta redacción de Mateo 28:19, donde Jesús habló en tercera persona: "En mi nombre". Además, el evangelio de Marcos también registra otra versión de la "gran comisión" usando algunos de los mismos patrones de habla: "Id ... todo el mundo ... predicad el evangelio ... toda criatura ... bautizados ... en mi nombre ...". (Marcos 16:15-18). Por supuesto, no es al bautismo "en mi nombre" a lo que se refiere aquí, sino más bien a la obras que los discípulos harían. Pero, en comparación con Mateo, la similitud es notable, porque el bautismo tampoco se menciona explícitamente aquí, sino que los discípulos debían ser hechos "en mi nombre".

9.  La prueba de la cita elogiosa

Aunque no hay ningún texto que ofrezca una cita elogiosa del bautismo trinitario, hay un notable parecido entre la verdadera redacción de Mateo 28:19-20 y Romanos 1:4-5. Mateo contiene la comisión de Cristo a sus apóstoles, mientras que el relato de Romanos es la aceptación por Pablo de su propia comisión como apóstol. Considérense las siguientes similitudes:

Mateo 28:18-29 ............................................ Romanos 1:4-5
"toda potestad me es dada" .........................."el Hijo de Dios con poder"
"Id"................................................................."recibido ... apostolado"
"enseñándoles que guarden" ....................... "por la obediencia a la fe"
"todas las naciones" ..................................... "todas las naciones"
"en mi nombre" ............................................ "por amor de su nombre" 

10.  La prueba del principio

Está escrito: "todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús ...". (Colosenses 3:17). En este principio establecido por Pablo, la implicación es clara. La palabra "todo" por necesidad cierta incluye el bautismo, que es un mandato que involucra tanto palabra como obra. La redacción tradicional de Mateo, que contiene la redacción trinitaria, está claramente en discordancia con el principio que antecede. La redacción más corta, sin la inserción falsificada, obedece este principio. Éste establece cuál de las dos redacciones es la contradictoria. La palabra de Dios no se contradice; más bien, se elogia y se completa a sí misma. Pablo no sólo expresó este principio, sino que lo aplicó específicamente al tema del bautismo. En Hechos 19:1-6, hay un relato concerniente a los discípulos de Juan que habían sido bautizados bajo su ministerio. Como el bautismo en el nombre de Jesús, el bautismo de Juan era de arrepentimiento para remisión de pecados (Marcos 1:4; Hechos 2:38). El mensaje de Juan, que acompañaba su bautismo, era que vendría Uno después de él, que "quitaría los pecados del mundo" y "bautizaría con el Espíritu Santo". Pablo presentó estos discípulos a Aquél, y aplicó el principio precedente, rebautizándolos. "Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y cuando Pablo es impuso las manos, el Espíritu Santo vino sobre ellos ...". Y así, aplicando la prueba del principio a nuestras dos redacciones de Mateo 28:19,20, hallamos apoyo muy fuerte para la frase "en mi nombre".

Adenda

1.  Está amaneciendo

En 1960, la Sociedad Bíblica Británica y Extranjera publicó un Testamento Griego, y la redacción alternativa de Mateo 28:19 fue "en to onomati mou" ("en mi nombre"). Eusebio fue citado como autoridad.

La Biblia de Jerusalén, de 1966, una producción católica romana, tiene esta nota de pie de página para Mateo 28:19:

Puede ser que esta fórmula ... sea un reflejo del uso litúrgico establecido más tarde en la comunidad primitiva. Se recordará que Hechos habla de bautizar en el nombre de Jesús.

2.  ¡Pero Mateo 28:19 y Lucas 24:47 no dicen nada del bautismo!

Es verdad. Sólo se refieren a "hacer discípulos a todas las naciones" y "al arrepentimiento y la remisión de pecados". Sin embargo, una vez que hemos establecido que el texto original de Mateo 28:19 dice simplemente "en mi nombre", hemos eliminado esencialmente todo apoyo para bautizar "en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo!". A causa de esta implicación de largo alcance, nos vimos obligados a examinar la evidencia interna concerniente al bautismo para tratar de hallar cualquier posible apoyo para la redacción tradicional porque el concepto trinitario tradicional que fue añadido a Mateo 28:19 está conectado con el bautismo. Aunque el bautismo no se menciona específicamente en Mateo 28:19 ni en Lucas 24:47, se infiere por los dos puntos siguientes:

1. En Mateo, el mandato es "haced discípulos en mi nombre". Por necesidad, "hacer un discípulo" incluye el bautismo en el proceso de conversión (Marcos 16:15-16, Juan 3:3-5) y el proceso entero está bajo el paraguas de la especificación de hacerlo "en su nombre".

2. En Lucas, el "arrepentimiento y remisión de pecados" serían predicados "en su nombre". Por el testimonio de las otras escrituras (Lucas 3:3, Hechos 2:38), es claro que la remisión de pecados pasa a través del bautismo, precedido por el arrepentimiento. Ambos deben ser predicados "en su nombre".

3.  La evidencia de Eusebio

Jerónimo nació en 331 A. D. y murió en 420. Escribió muchos tratados y cartas exegéticos y controversiales, así como la renombrada traducción Vulgata Latina de las Escrituras. Hizo una interesante declaración que es como sigue (del Catálogo de Escritores Eclesiásticos):

Mateo, que es también Leví ... compuso un evangelio ... en idioma y caracteres hebreos ... Además, el hebreo mismo ha sido preservado hasta el día de hoy en la biblioteca de Cesarea, que el mártir Pánfilo reunió tan diligentemente.

Ahora bien, Eusebio de Cesarea (260-340 A. D.) heredó de aquel Pánfilo, (que murió en 310 A. D., aquella famosa biblioteca que fue iniciada por Orígenes (185-254 A. D.). Aparentemente, la redacción de aquella declaración de Jerónimo significaba que el manuscrito original de Mateo todavía podía verse en la biblioteca de Cesarea. Ello podría haber significado que una primera copia del escrito de Mateo en hebreo estaba allí, pero la fraseología de Jerónimo parecía indicar que era el manuscrito verdadero escrito por Mateo mismo.

4.  Las reservas mentales de Eusebio

En la página 14 de la referencia que antecede, se menciona el hecho de que, después del Concilio de Nicea, Eusebio usó en tres ocasiones el nombre trino al escribir. Los siguientes tres extractos arrojan luz sobre este extraño asunto:

1. En el Concilio de Nicea (A. D. 325), Eusebio tuvo parte principal ... Ocupó el primer asiento a la diestra del emperador, y pronunció al primer mensaje dirigido a Constantino cuando tomó asiento en la cámara del concilio ... En una carta explicativa dirigida a su iglesia de Cesárea, Eusebio mismo nos ha dejado un relato de sus actividades con relación al objeto principal del concilio. Esta carta está escrita a los cesareanos para explicar que él resistiría hasta lo último cualquier cambio vital en el credo tradicional de su iglesia, pero que había suscrito estas alteraciones, cuando se le aseguró la inocencia de ellas, para evitar aparecer como contencioso. Diccionario de Biografías y Literatura Cristiana; Eusebio.

2. Nuestra preocupación aquí es sólo con Nicea y cómo afectó a Eusebio ... su propio relato del asunto nos ha sido transmitido a nosotros ... en la carta que él dirigió a su diócesis una explicación de sus acciones en el Concilio, porque, con algunas reservas, había firmado el documento que contenía el texto revisado del credo que había presentado ... Pero, quedando satisfecho de que el credo no implicaba la trampa sabeliana opuesta ... firmó el documento. Wallace Hadrill, en 'Eusebius de Cesarea', (1960). ... ...

3. Siguió el Concilio de Nicea, en el verano de 325 A. D. Por supuesto, Eusebio estuvo presente, y quedó profundamente impresionado por aquella majestuosa reunión ... Ocupó una posición distinguida en el Concilio; fue su vocero al darle la bienvenida al emperador ... Al día siguiente, como cediendo a aquellos representantes, y conmovido por la opinión expresa de Constantino, Eusebio firmó el Credo, y hasta aceptó el anatematismo añadido a él; pero, como se ve por su propia declaración, lo hizo a fuerza de comentarios evasivos que ciertamente no podría haber hecho en ese momento. Aunque entonces capituló verbalmente en las decisiones doctrinales del Credo de Nicea ... lo hizo de mala gana, bajo presión, y por sentido propio ... Sabía que se diría que había comprometido sus convicciones, y por lo tanto escribió su relato de la transacción al pueblo de su diócesis y, como lo expresa Atanasio, 'se excluyó a su propia manera'. William Bright en su Prefacio a la obra de Burton "Texto de la Historia Eclesiástica de Eusebio".

5.  Mutilaciones del texto sagrado en el siglo segundo

En el libro, se menciona el hecho de que los críticos textuales han logrado reproducir el Texto Sagrado sustancialmente correcto tal como existía en los siglos segundo y tercero. Como se señaló en la página 7, "hay todas las razones para creer que los errores más garrafales que jamás han deformado el texto ya habían entrado en el siglo segundo ... Si nuestra piedra de toque sólo nos revela textos que son antiguos, no podemos esperar obtener para nuestro resultado nada que no sea un texto antiguo. Sin embargo, lo que deseamos no es meramente un texto antiguo, sino el texto verdadero". Los tres extractos siguientes son interesantes e ilustran ese pronunciamiento.

1. La Introducción contiene lo siguiente: "Puede aceptarse con confianza que tenemos a nuestra disposición el Nuevo Testamento sustancialmente como los escritos contenidos en él serían leídos dentro de un siglo de su composición. The Authentic New Testament fue traducido por el Dr. Hugh J. Schonfeld, publicado en 1962.

Fue en ese siglo, como se ha señalado, que los "más garrafales errores" deformaron el Texto Sagrado.

2.  El S. P. E. C., comentando Mateo 28:19, dice:

Uno esperaría que este nombre fuera el de Jesús, y es sorprendente hallar que el texto continúa con 'el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo', que no son nombres en absoluto. Naturalmente, surge la sospecha de que esto no fue lo que Mateo escribió originalmente. En 'Padre, Hijo y Espíritu Santo', tenemos la fórmula trinitaria ... que fue asociada con el bautismo cristiano en el siglo segundo, como queda evidenciado en el Didache, capítulo siete. El S. P. C. K, publicado en 1964, Tomo Uno, del Clarified New Testament.

3. F. C. Kenyon, en The Text of the Greek Bible [El Texto de la Biblia Hebrea], páginas 241-242, dijo:

"Al principio, cada libro tenía su texto original sencillo, lo cual es ahora objeto de la crítica por recuperar, pero en los dos primeros dos siglos, este texto griego original desapareció bajo una masa de variantes, creada por errores, alteraciones conscientes, e intentos de remediar las incertidumbres así creadas".

6.  La fuente del error

La referencia más antigua a la inserción trinitaria doctrinal se halla en el didache. El Didache es una colección de fragmentos de escritos de cinco documentos o más. Se cree que fueron escritos originalmente entre 80 A. D.  y 160 A. D. Aunque ahora tenemos sólo 99 versículos, estos versículos contienen las semillas de muchas falsas enseñanzas que se desarrollaron en las supersticiones papales. Las semillas de las indulgencias, la misa, el confesionario, la substitución de la inmersión por el rociamiento, y otros errores garrafales, se hallan en aquel desprestigiado y seudocristiano documento. (Refs. IV1, IX2-4, X2-6, XIII3, XIV1 y IV1).

En el Didache, entre todas las creencias apóstatas mencionadas arriba, se encuentra la frase trinitaria que más tarde halló camino en el texto de Mateo 28:19, desplazando las auténticas palabras de Cristo. Aquí, pues, está el origen de la errónea enseñanza escrita que refleja la práctica de los "cristianos" apóstatas del siglo segundo.

7.  ¿Debería usted ser rebautizado?

Después de restaurar el texto de Mateo 28:19 a su forma original, o sea, "Id, pues, y haced discípulos a todas las naciones en mi nombre", surge naturalmente la pregunta siguiente: "Yo fui bautizado en el nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Puesto que esto no es bíblico, ¿debo ser rebautizado?" Antes que responder de acuerdo con nuestra propia sabiduría o nuestro propio prejuicio, hallemos la respuesta a esta importante pregunta en la misma palabra de Dios, porque sólo ella es el verdadero modelo por el cual medir nuestra experiencia con el Señor. Volviendo a Hechos, hallamos la respuesta.

Hechos 19:6  Aconteció que, entre tanto que Apolos estaba en Corinto, Pablo, después de recorrer las regiones superiores, vino a Éfeso, y hallando a ciertos discípulos, les dijo: "¿Recibísteis el Espíritu Santo cuando creísteis?" Y ellos le dijeron: "Ni siquiera hemos oído si hay Espíritu Santo". Entonces dijo: "¿En qué, pues, fuisteis bautizados?" Elos dijeron: "En el bautismo de Juan". Dijo Pablo: "Juan bautizó con bautismo de arrepentimiento, diciendo al pueblo que creyesen en aquel que vendría después de él, esto es, en Jesús el Cristo". Cuando oyeron esto, fueron bautizados en el nombre del Señor Jesús. Y habiéndoles impuesto Pablo las manos, vino sobre ellos el Espíritu Santo; y hablaban en lenguas, y profetizaban.

Al leer esta narración, es fácil descubrir la respuesta a nuestra pregunta. Pablo halló discípulos quienes, como la mayoría de nosotros en la actualidad, habían oído el mensaje del reino de Dios, y habían respondido a ese mensaje siendo bautizados después de su arrepentimiento. Sin embargo, en esta situación, estos "discípulos" todavía debían escuchar el mensaje del evangelio completo, a saber, que Jesús con su muerte, sepultura y resurrección, había comprado la salvación para toda la humanidad al convertirse en el mismo Cordero de Dios del cual Juan había predicado. A causa de esto, el bautismo de ellos, bajo el ministerio y la autoridad de Juan (que precedió a Cristo), no reflejaba una asociación con la muerte y al sepultura de Jesús, lo cual convertía en efectivo el bautismo en el nombre de Jesús. 

Mientras que nosotros respondimos al mensaje del evangelio completo, ellos afirmaron su creencia por medio de un bautismo que sólo les asociaba con un credo doctrinal, no con la sangre expiatoria de Jesús, que es lo único apropiado por medio de su nombre. Para Pablo, el paso siguiente era obvio. Sabiendo que la promesa del Espíritu Santo le era dada a los que, por medio de la obediencia por fe se habían arrepentido de sus pecados y se habían bautizado en el nombre de Jesús, les dio instrucciones para que se rebautizaran:

Hechos 4:12 ... porque no hay ningún otro nombre debajo del cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos.

¿Estaba errado Pablo? ¿O lo hemos estado nosotros? Pablo ciertamente no lo estaba, porque, de acuerdo con la promesa de Dios, había impuesto las manos a las personas y éstas habían recibido el Espíritu Santo sólo momentos después de ser bautizados en su nombre. Recordemos que el bautismo en el nombre de Jesús expresa fe en la encarnación, la auténtica vida humana de Jesús, la muerte del Hijo de Dios en el madero por nuestros pecados, y la remisión de pecados por medio de su nombre. En resumen, al usar el nombre de Jesús en la fórmula bautismal se expresa fe en:

1. La persona de Cristo (quien es él realmente)

2. La obra de Cristo (su muerte, sepultura y resurrección por nosotros), y

3. El poder y la autoridad de Cristo (su capacidad de salvarnos por sí mismo).

Por estas mismas razones, el bautismo era entonces, y debería continuar ahora siendo administrado en el nombre del Señor Jesucristo. Su palabra, no la tradición y las invenciones de los hombres, deberían ser el modelo para lo que enseñemos, creamos, y obedezcamos. Como nos amonesta apropiadamente el texto de apertura:

Deuteronomio 4:2  No añadiréis a la palabra que yo os mando, ni disminuiréis de ella, para que guardéis los mandamientos de Jehová vuestro Dios que yo os ordeno.

Es en extremo desconcertante para mí que esta manifiestamente problemática afirmación "bíblica" haya sido aceptada ciegamente por siglos. En el día en que yo fui bautizado por un ministro WCG [Iglesia Mundial de Dios] allá por 1973, tuve reservas acerca del procedimiento mientras observaba a los que eran bautizados antes que yo, entre un considerable grupo de personas, en el nombre de la Trinidad. Yo no había podido confirmar mis sospechas sobre el texto en ese momento, pero esta práctica contradictoria me molestó durante 28 años antes de tomar acción apropiada. Estoy en deuda con Ploughman, ahora difunto, por su esfuerzo erudito. ¡Estudió Mateo 28:19 durante toda su vida! Era bastante vehemente cerca de exponer el fraude de los escribas primitivos. ¿Fue usted bautizado en el nombre de la apostasía?

Lon Martin
Septiembre 15, 2001. 



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