Ellen G. White
ELLEN G. WHITE
Y LOS ÍDOLOS DE LAS JOYAS
Robert K. Sanders
Traducido de Truth
or
Fables
Ellen White dijo claramente que las joyas de oro, los encajes
llamativos, y los brazaletes eran ídolos, y que los que los usan
tienen una cabeza débil. Lo que mucha gente no sabe es que la
misma Ellen usaba una cadena de oro, encajes, un broche camafeo,
y un reloj de oro.
Ellen G. White: Las joyas y el espíritu de Jesús.- "Sería mejor que los que tienen brazaletes, y
usan artículos de oro y adornos, quitaran estos ídolos de sus
personas y los vendieran, aunque fuera por mucho menos de lo
que les costaron, y de esa manera practicaran la
auto-negación. El tiempo es demasiado corto para adornar el
cuerpo con oro o plata o indumentaria costosa". Manuscript
Releases, Volume Nine, título del capítulo: Ellen White
acerca de las joyas, página 117, párrafo 1.
NOTA: Ellen ejercía todo el control
posible para mantener a las mujeres bajo su esclavitud. Ella
clasificaba como idolatría el hecho de usar brazaletes,
artículos de oro, y adornos, y advertía a la gente que
quitaran estos ídolos, porque el tiempo era corto. Ellen se
equivocó al decir que estos artículos eran ídolos. No hay
apoyo bíblico para esta afirmación. Si la gente estuviera
fabricando dioses y adorándolos, como en los tiempos de
Moisés, entonces ésta sería una amonestación correcta.
Ellen
G. White: Señal de un corazón enfermo.-- "Advertimos a nuestras hermanas cristianas
contra la tendencia a confeccionar estos vestidos según los
estilos mundanos, atrayendo la atención. La casa de Dios es
profanada por el vestido de mujeres que profesan ser
cristianas en la actualidad. Un vestido fantástico, un
despliegue de cadenas de oro y encajes llamativos, es una
indicación segura de una cabeza débil y un corazón orgulloso".
Selected Messages, Book 3, título del capítulo: El
Vestido y los Adornos, página 244, párrafo 1.
NOTA: Ellen condenaba a sus hermanas cristianas por
usar cadenas de oro y encajes llamativos, diciendo que tenían
una cabeza débil. Ellen tenía una aptitud especial para
identificar a las personas que tenían una cabeza débil, pues
ella se juzgaba a sí misma como tal: Usaba una cadena de
oro colgando al frente, y tenía una cabeza débil por hacerlo.
La Biblia nos lo dice: Mateo
7:1,2: "No juzguéis, para que no seáis juzgados. Porque con
el mismo juicio con que juzgáis, seréis juzgados, y con la
medida con que medís, os será medido". Ellen se juzgó a sí misma.
Manuscript Releases,
Volumen Ocho, página 449, párrafo 1
Título del capítulo:
Los regalos de la hermana Kerr
"La hermana Kerr me
llevó al salón de su recámara, y abrió una caja de ruchas [una
franja de encaje, redecilla, cinta, o cosa semejante, usada en
lugar de un cuello o puño] para el cuello, y quería que yo
aceptara la caja entera. Su esposo es mercader en Honolulu, y,
aunque no es creyente, es un hombre muy generoso. También,
ella me ofreció tres yardas y media de seda, que costaban tres
dólares la yarda, y con las cuales yo me podía confeccionar un
saco [un abrigo o una chaqueta cortos, de diseño un tanto
holgado]. Vi que ella estaba muy deseosa de que yo lo tuviera,
y que no podía rehusárselo sin decepcionarla mucho. Era un
hermoso trozo de seda que le había quedado de un vestido que
tenía. También me regaló una bufanda de seda, y un prendedor
de diez dólares, compuesto de piedras blancas, muy sencillo y
útil. Pensé que no podría aceptarlo, pero ella se veía tan
triste, que finalmente lo tomé, y lo he usado desde entonces,
pues es práctico y apropiado, y para nada ostentoso".--
Carta 32a, 1891, pp. 2, 3. (Dirigida a J. E. y Emma White,
diciembre 7, 1978). Puesta a disposición del público el 26 de
octubre de 1978).
Ellen G. White:
"... un despliegue de cadenas de oro y llamativo
encaje es una indicación cierta de una cabeza débil y un
corazón orgulloso". Selected Messages, Book 3,
título del capítulo: El vestido y los adornos, página 244,
párrafo 1.
En
el Antiguo Testamento se usaban joyas
Rebeca:
Génesis 24:52-53: "Cuando el criado de Abraham oyó
sus palabras, se inclinó en tierra ante Jehová. Y sacó el criado
alhajas de plata y alhajas de oro, y vestidos, y dio a Rebeca;
también dio cosas preciosas a su hermano y a su madre".
Nota: En
el Antiguo Testamento, Dios no prohibió a la gente que tuviera
joyas.
Los niños israelitas:
Éxodo 3:22: "Pedirá cada mujer a su vecina y a su
huéspeda alhajas de plata, alhajas de oro, y vestidos, los
cuales pondréis sobre vuestros hijos y vuestras hijas. Y
despojaréis a Egipto".
Nota: Dios les dijo a los israelitas que
pusieran plata, oro, y vestidos sobre sus hijos. Dios no les
habría dicho que hicieran esto si hubiese sido pecado.
Las mujeres israelitas:
Isaías 3:16: "Asimismo dice Jehová: Por
cuanto las hijas de Sión se ensoberbecen, y andan con cuello
erguido y con ojos desvergonzados; cuando andan van danzando, y
haciendo son con los pies; por tanto, el Señor raerá la cabeza
de las hijas de Sión, y Jehová descubrirá sus vergüenzas. Aquel
día quitará el Señor el atavío del calzado, las redecillas, las
lunetas, los collares, los pendientes y los brazaletes, las
cofias, los atavíos de las piernas, los partidores del pelo, los
pomitos de olor y los zarcillos, los anillos, y los joyeles de
las narices, las ropas de gala, los mantoncillos, los velos, las
bolsas, los espejos, el lino fino, las gasas y los tocados.
Nota: Algunos leen estos
versículos pensando que Dios condenaba a estas gentes por usar
joyas. Pero no es así. Dios estaba condenando a estas mujeres
por su arrogancia y por flirtear con los ojos. Quitarles sus
joyas y su ropa fina habría de ser su castigo. El lector habrá
notado que la lista incluye ropa corriente, como túnicas,
capas, velos, esclavinas, y chales. También se incluyen
carteras y espejos. Los dirigentes de la iglesia que usan
estos versículos para condenar el uso de joyas también
deberían condenar el uso de ropa corriente, espejos, y
carteras, si quieren ser consistentes con el texto.
Las criadas y las novias
israelitas:
Jeremías 2:32: "¿Se olvida la virgen de su
atavío, o la desposada de sus galas?"
Nota: A
los pastores adventistas del séptimo día no se les permite
celebrar una boda usando los contrayentes anillos de
matrimonio. Por muchos años, a los pastores ASD no se les
permitió bautizar a nadie que llevara puesto un anillo de
matrimonio. Algunos pastores hacían que los candidatos
bautismales pusieran cinta adhesiva sobre sus anillos para que
no tuvieran que quitárselos, pues algunos candidatos se
negaban a bautizarse si tenían que quitárselos.
Los hombres del Antiguo
Testamento usaban joyas:
Éxodo 33:4: "Y oyendo el pueblo esta mala
noticia, vistieron de luto, y ninguno se puso sus atavíos".
Nota: Tanto hombres como mujeres usaban
adornos.
El Sumo Sacerdote usaba
joyas:
Éxodo 28:17-20: "Y lo
llenarás de pedrería en cuatro hileras de piedra; una hilera
de una piedra sárdica, un topacio, y un carbunclo; la segunda
hilera, una esmeralda, un zafiro, y un diamante; la tercera
hilera, un jacinto, una ágata, y una amatista; la cuarta
hilera, un berilo, un ónice, y un jaspe. Todas estarán
montadas en engastes de oro".
José usaba joyas:
Génesis 41:42:
"Entonces Faraón quitó su anillo de su mano, y lo puso en la
mano de José, y lo hizo vestir de ropas de lino finísimo, y
puso un collar de oro en su cuello".
Daniel usaba joyas:
Daniel 5:29:
"Entonces mandó Belsasar vestir a Daniel de púrpura, y poner
en su cuello un collar de oro, y proclamar que él era el
tercer señor del reino".
Nota: En el Antiguo Testamento, la gente
era alabada y se le regalaba oro y joyería y ropa fina. Dios
nunca consideró esto como pecaminoso. En realidad, Dios a
veces ordenaba que se usaran joyas.
En el
Nuevo Testamento se usaban joyas
1 Tim. 2: 9,10: "Asimismo, que las mujeres se atavíen de ropa
decorosa, con pudor y modestia; no con peinado ostentoso, ni
oro, ni perlas, ni vestidos costosos. sino con buenas obras,
como corresponde a mujeres que profesan piedad".
Nota: Al
escribir a Timoteo, Pablo se refirió a las mujeres que usaban
ropa costosa y joyería en lugar de hacer buenas obras. El
verse bien en ropa costosa, trenzando el cabello, y llevando
joyas de oro no reemplaza a las buenas obras en aquéllos que
profesan ser cristianos. Pablo no estaba condenando las joyas
o la ropa costosa como pecaminosas en sí mismas. En realidad,
Timoteo no ordenó a las mujeres que no usaran joyas.
Los adventistas del
séptimo día le han dado exagerada importancia al hecho de usar
anillos de matrimonio, aretes, y joyería, así como maquillaje.
Poco se dice acerca de usar ropa costosa, y nada sobre
arreglar el cabello en trenzas. Si condenaran el arreglo
del cabello en trenzas, quizás tendrían también que condenar a
Ellen White, que usaba su cabello en trenzas, como lo muestran
sus fotografías.
1 Ped. 3:3-5: "Vuestro atavío no sea el externo de cabellos
ostentosos, de adornos de oro o de vestidos lujosos, sino el
interno, el del corazón, en el incorruptible ornato de un
espíritu afable y apacible, que es de grande estima delante de
Dios. Porque así también se ataviaban en otro tiempo aquellas
santas mujeres que esperaban en Dios, estando sujetas a sus
maridos".
Nota: Pedro
está diciendo lo mismo que Pablo; el usar joyas de oro y ropa
costosa no reemplaza la belleza interna de la mujer cristiana.
Pedro no condena a las mujeres que usan su cabello en trenzas,
que usan joyas de oro, y que llevan ropa fina. Pedro menciona
esto como ejemplo de las mujeres del Antiguo Testamento que se
sometían a sus esposos, diciendo que tenían esta belleza
interior. Estas mujeres del Antiguo Testamento usaban joyas, y
nunca se dice que usarlas fuera pecado.
Si vosotros juzgáis a
las personas que usan joyas, ¡sois jueces con malos
pensamientos!
Sant. 2:2-4: "Si en
vuestra congregación entra un hombre con anillo de oro y con
ropa espléndida, y también entra un pobre con vestido
andrajoso, y miráis con agrado al que trae la ropa espléndida
y le decís: Siéntate tú aquí en buen lugar; y decís al pobre:
Estate tú allí en pie, o siéntate aquí bajo mi estrado; ¿no
hacéis distinciones entre vosotros mismos, y venís a ser
jueces con malos pensamientos?
Nota: El
apóstol Santiago no condena al hombre que usa el anillo de oro
y la ropa espléndida, sino a los que discriminan entre el rico
y el pobre. Santiago pudo haber dicho al rico: Si estuvieras
viviendo después de 1844, y estuvieras usando un anillo de oro
y ropa espléndida cuando fueres a la Iglesia Adventista, su
profeta Ellen White te habría dicho que estabas practicando la
idolatría y que tenías una cabeza débil.
El maquillaje
¿Condena
Dios el maquillaje como pecado?
El maquillaje puede
incluir perfume, colorete, colores en los párpados, colores en
las pestañas y las cejas [máscara], polvos, lápiz labial, esmalte de
uñas, etc. Muchos creen que las mujeres que usan maquillaje tienen una pobre
relación espiritual con Dios, que son vanas, o que no son
salvas. ¿Es
éste un concepto bíblico o un
malentendido personal de las Escrituras?
Muchos cristianos han
obtenido este concepto de los credos de su iglesia, o se han
equivocado al interpretar la Biblia. El pecado es sólo lo que
Dios, no la iglesia, llama pecado. Agunos usan el ejemplo de
la malvada Jezabel para disuadir el uso de maquillaje. Miren
cuán pecadora
era, y ella se pintó el rostro antes de ser muerta. ¿Se pintó Jezabel el rostro o
los ojos?
Algunas mujeres usan máscara,
pero no usan lápiz de labios porque creen que Jezabel se pintó
el rostro. Y, por supuesto, ninguna mujer cristiana quiere
parecerse a Jezabel. Pero algunas traducciones dicen
erróneamente "rostro" en vez de "ojos". Para ser como Jezabel,
una mujer
tiene que dejar de usar máscara, y
estará bien si usa lápiz labial.
2 Reyes 9:30: "Vino después Jehú a Jezreel; y cuando Jezabel
lo oyó, se pintó los ojos con antimonio, y atavió su cabeza, y se asomó a una ventana".
Dios no condenó a Jezabel
por pintarse los ojos, sino por su maldad. Señoras, si ustedes
deciden seguir a Jezabel como ejemplo para no maquillarse los
ojos, entonces no deben hacer nada con su cabello. Cortarlo,
arreglarlo, teñirlo, etc. estaría fuera de toda consideración.
Dios compara a su pueblo con una
mujer:
Jer. 4:30: "Y tú,
destruída, ¿qué harás? Aunque te vistas de grana, aunque te
adornes con atavíos de oro, aunque pintes con antimonio tus
ojos, en vano te engalanas; te menospreciarán tus amantes,
buscarán tu vida".
Al comparar a su pueblo con las mujeres que usan joyas, Dios
no estaba condenando el uso de joyas o maquillaje, sino que le
estaba mostrando a su pueblo que andar ataviada no cambiaba la
relación con Él. Dios estaba llamando a su pueblo a volverse a
Él, no a quitarse las joyas o el maquillaje.
No hay ni un solo
texto en la Biblia entera que prohiba el uso de maquillaje o
joyas. Enseñar la doctrina de que el no usar ni joyas ni
maquillaje hace a una persona más santa y más justa no es
bíblico. ¿Quiere Dios que la gente se vea gris y monótona? Por
supuesto, es posible exagerar el uso del maquillaje y las
joyas. Yo estoy seguro de que Dios no quiere que los
cristianos parezcan payasos o prostitutas. Y, por supuesto, es
erróneo usar maquillaje o joyas con el propósito de mostrar
que uno es mejor que los demás. Es la persona interior la que
debe tener un espíritu manso y pacífico.